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martes, 4 de julio de 2017

Quevedo. "Amor constante más allá de la muerte"

Francisco de Quevedo (Madrid, 1580 - Villanueva de los infantes, 1645) es uno de nuestros mejores poetas, si no el mejor, del siglo de oro. Ya le dediqué una entrada hace 6 años en la que comentaba su poema Dichoso puedes, Tántalo, llamarte... Hoy trato de su conocido soneto, Amor constante más allá de la muerte, y comento su contenido y continente. O sea, qué creemos que quiso decir el poeta y cómo lo dijo, porque los poemas de esa época suelen requerir de algunas explicaciones para desentrañar su texto.


AMOR CONSTANTE MÁS ALLÁ DE LA MUERTE

Cerrar podrá mis ojos la postrera
sombra que me llevare el blanco día,
y podrá desatar esta alma mía
hora a su afán ansioso lisonjera;

mas no, de esotra parte, en la ribera,
dejará la memoria, en donde ardía:
nadar sabe mi llama la agua fría,
y perder el respeto a ley severa.

Alma a quien todo un dios prisión ha sido,
venas que humor a tanto fuego han dado,
médulas que han gloriosamente ardido,

su cuerpo dejará, no su cuidado;
serán ceniza, mas tendrá sentido;
polvo serán, mas polvo enamorado.


Francisco de Quevedo


Significado del poema:

Este poema recrea la pervivencia del amor más allá de la muerte, como indica su nombre, tema de inspiración petrarquista y que ya trató Garcilaso en nuestra lengua. El amante se imagina en la otra vida después de la muerte y manifiesta que su amor será eterno. Hay que tener en cuenta que en esta época el "yo poético", que protagoniza la obra, es una máscara enamorada, no el sentimiento real de quien escribe.

El primer cuarteto describe el momento de la muerte: La muerte (la postrera sombra) cerrará mis ojos ese día en que comienza la eternidad (el blanco día) y esa hora feliz (hora lisonjera) liberará mi alma de la ansiedad (afán ansioso) por alcanzar el amor que desea. (Ese tópico de la dama, Lisi en este caso, cuyo amor es inalcanzable, es muy usual en la poesía amorosa de la época)

El segundo cuarteto detalla el viaje del alma hasta alcanzar la inmortalidad (en la otra ribera de la laguna Estigia y el río Leteo) y la persistencia de la memoria del amor: Pero mi alma no dejará la memoria de la amada en este mundo de los vivos (la otra parte de la ribera) en la que ardía enamorada, sino que sabe cruzar sin temor (nadar sabe mi llama la agua fría) y saltarse las leyes del más allá (perder el respeto a ley severa) que imponen el olvido de la vida anterior a quienes cruzan el Leteo para entrar en los Campos Elíseos.

Los tres versos del primer terceto explican la relación entre el cuerpo y el alma y el lugar que ocupó la pasión. Y los tres del segundo terceto, en paralelismo con cada uno de los primeros, exponen su idea esencial del amor y su victoria final sobre la muerte: Mi alma, encarcelada por el dios del amor (Eros), dejará mi cuerpo pero no el cuidado de mi amor. / Mis venas que han dado vida (la sangre como "humor") a mi pasión amorosa desaparecerán, pero han cumplido (tendrá sentido) su cometido de alimentar el fuego del amor en el corazón. / Mis médulas (huesos) que han ardido en ese fuego del amor serán polvo, pero ese último resquicio del cuerpo será "polvo enamorado".


Figuras retóricas:

El primer cuarteto esta cuajado de hipérbatos, ya que se altera el orden normal de la frase (sujeto + verbo + complementos) que sería: La postrera sombra podrá cerrar mis ojos el blanco día que me llevare, y esa hora lisonjera podrá desatar esta alma mía de su afán ansioso. Tanto "postrera sombra", como "blanco día" u "hora lisonjera" son metáforas de la muerte que se presenta aquí como un descanso liberador de la vida. "Desatar esta alma mía" describe la separación del alma y el cuerpo. Se destaca el quiasmo (ordenar de forma cruzada dos grupos de palabras) de "cerrar podrá mis ojos" con "podrá desatar esa alma", metáforas de la separación de cuerpo y alma; y la antítesis (contraposición de dos palabra o frases) "hora a su afán ansioso lisonjera" en que la hora de la muerte en vez de ser pesarosa es feliz.

Ese primer cuarteto expresa una posibilidad que es rebatida por una argumentación el segundo cuarteto que manifiesta la persistencia del amor. En este segundo cuarteto se presenta el amor con metáforas relacionadas con el fuego "en dónde ardía", "mi llama" que se sobreponen a la muerte y sus reglas "nadar el agua fría" y "ley severa", en esa mitológica representación del Hades (el más allá griego) que imponía beber el agua del olvido en el río Leteo, lo que no hace el amante.

En los tercetos se muestra la victoria del amor sobre la muerte efectuando un paralelismo entre sus versos, con tres oraciones copulativas coordinadas con tres oraciones adversativas (verso 9º con el 12º, 10º con el 13º y 11º con el 14º) y, además, los versos 9º y 10º se presentan en forma de hipérbaton para realzar la expresión. El dios Eros (o Cupido) ha aprisionado metafóricamente al alma que ahora se libera. El fuego representa al amor que convierte a las venas en ceniza (además, existe una antítesis entre el fuego y el líquido, la sangre, que corre por las venas) y a los huesos en polvo, pero siguen teniendo sentido porque mantienen el amor. Amor que es una victoria ante la muerte.

Hay que destacar que J.M. Blecua enmendó un error de copia histórico que indicaba en el 11º verso "dejaran" en vez del "dejará" y que es lo que da lugar al paralelismo de esos versos. Paralelismo que antes quedaba desdibujado ya que se leía como si el segundo terceto afectase globalmente a todo el primer terceto.


Si queréis profundizar en el comentario de este texto os recomiendo el artículo publicado por Pablo Jauralde en Cervantes Virtual "Cerrar podrá mis ojos la postrera..."


Estructura métrica:

Respecto al continente, el poema es un soneto de endecasílabos que riman en ABBA ABBA CDC DCD. Señalo a continuación 
 las sílabas tónicas, aparte de la principal obligada en la 10ª, el tipo de verso y las sinalefas existentes.

Cerrar podrá mis ojos la postrera
(2,4,6 heroico) (único encabalgamiento del poema con el verso siguiente "postrera sombra")
sombra que me llevare el blanco día,

(1,6,8 enfático, apoyo secundario en 4ª) (sinalefa obligada "llevare el")
y podrá desatar esta alma mía

(3,6,8 melódico) (sinalefa "est'alma en que la tonicidad de "alma" elimina la anterior "a")
hora a su afán ansioso lisonjera;

(1,4,6 sáfico enfático, apoyo secundario en 8ª) (sinalefa obligada "hora a")

mas no, de esotra parte, en la ribera,

(2,4,6 heroico, apoyo secundario en 8ª) (sinalefa obligada "de esotra", sinalefa que obliga a suprimir la pausa fónica de la coma "parte, en")
dejará la memoria, en donde ardía:

(3,6 melódico, apoyo secundario en 8ª) (sinalefa que obliga a suprimir la pausa fónica de la coma "memoria, en", sinalefa obligada "donde ardía")
nadar sabe mi llama la agua fría,

(2,(3),6,8 heroico con ténue antirritmo melódico en 3ª) (sinalefa "l'agua" en que la tonicidad de "agua" elimina la anterior "a")
y perder el respeto a ley severa.

(3,6,8 melódico) (sinalefa obligada "respeto a")

Alma a quien todo un dios prisión ha sido,
(1,4,6,8 enfático heroico) (sinalefa "alma a" un poco compleja para que se escuchen las dos aes y no se pierda la semántica de la frase) 
venas que humor a tanto fuego han dado,

(1,4,6,8 enfático heroico) sinalefas obligadas por atonicidad "que humor" y "fuego han" 
médulas que han gloriosamente ardido,

(1,(4),6,8 enfático heroico) (con leve tonicidad en 4ª en la sinalefa "que han" casi obligada) Hay tratadistas que defienden la acentuación grave de "medulas" indicando que era la habitual en la época, pero yo estoy de acuerdo con Jauralde, que defiende la fuerza de los tres versos enfáticos e indica que la tonicidad en la época también podría ser esdrújula "médulas".

su cuerpo dejará, no su cuidado;
(2,6.7 heroico tenso por el antirrítmico en 7ª, apoyo secundario en 4ª)
serán ceniza, mas tendrá sentido;

(2,4,8 sáfico, apoyo secundario en 6ª)
polvo serán, mas polvo enamorado.

(1,4,6 enfático heroico con apoyo secundario en 8ª) (sinalefa obligada "polvo enamorado")


La armonía del verso la marca su longitud y la tonicidad de sus sílabas. Aquí todos los endecas excepto uno (el 13º) son "a maiori" o sea apoyados en una tonicidad fuerte en 6ª y todos conviven muy bien. Además, unos cuantos enfáticos, sobre todo los del primer terceto, dan mayor fuerza a la expresión de esos versos.

Si estáis interesados en saber más de esa armonía versal, que distingue al poema de la prosa y que se explican a través de los principios métricos, podéis consultar mi tratado "Métrica poética del idioma español". En esta entrada del blog os dejo una sinopsis del libro.





Y ya que hemos hablado tanto de este soneto vamos a escucharlo recitado magníficamente en este vídeo por José Luis Gómez.




Respecto a más información sobre Francisco de Quevedo y su obra, en este link a la Fundación Francisco de Quevedo podéis acceder su poesía y a mucha más información, y Cervantes virtual también le dedica un apartado.

Como libros sobre la poesía de Quevedo puedo recomendar "Poesía varia" en edición crítica de James O. Crosby por Cátedra y "Poesía selecta" en edición crítica de Lía Schwartz e Ignacio Arellano de Ediciones 10, además del clásico "Poemas escogidos" de José Manuel Blecua en Castalia.

miércoles, 24 de mayo de 2017

Hilario Barrero

Conocí a Hilario Barrero (Toledo, 1948) en la presentación de su libro de poemas, Educación Nocturna, en El Laberinto de Ariadna (tertulia que recomiendo a los que vivís por Barcelona). Los protagonistas del libro son, según su prologuista J. L. García Martín, el tiempo y el deseo y añade: Pocos poetas han sabido describir con tanta minuciosa sensualidad, la aparición de los primeros deseos eróticos, su gozosa realización en la juventud y el ultraje de la vejez. Este es el poema que cierra el libro:



















PLAZA DE SAN MARCOS, VENECIA.

Sentados en un banco, bajo los soportales,
dos jóvenes se miran incendiados de la misma manera
que el agua veneciana se estremece cuando la mira el sol.
Son dos cuerpos en armas: ligeros de equipaje,
coraza de algodón, pantalones vaqueros
y la fresca insolencia de sus escasos años.
Tienen todo el día y la noche para amarse por plazas y pensiones,
toda Venecia para mostrar su amor.
Uno de ellos se tumba
y apoya la cabeza en el regazo amigo
como un cristo yacente ofrecido y vivísimo
coronada de luz la cabeza rapada.
Se inclina el compañero y le besa
mordiéndole en los labios como quien come una fruta madura.
Curva la espalda, tensado el cuello, la barbilla encajada
y las bocas unidas, se quedan un momento sin moverse:
gloriosa imagen en mármol de Carrara.
Los contemplan dos viejos sorprendidos,
mil palomas, un bosque de miradas
y una tarde gloriosa de septiembre.
A uno de los viejos se le corta la sangre
y siente un navajazo en las entrañas
al recordar que hace ahora casi cincuenta años
en esta misma plaza, una mochila por toda compañía,
alguien que al preguntarle “Vai solo”?
le enseñó el camino hacia lo oscuro.
Cuando volvió a su casa no le reconocieron
y tuvo que marcharse lejos de su ciudad a vivir en tinieblas.

Educación nocturna. Hilario Barrero


Este otro poema es uno de los preferidos de Hilario: 

ELVIRA 
                 Ove andò Elvita? Ove andò? Ove andò? I Puritani

Perdóname, Elvira, por esconderte
la caja de cerillas
y cambiarte las cosas de su sitio;
Elvira solitaria,
vieja Elvira enredados tus ojos
en una telaraña de luto y abandono,
te perdías, olvidándote
del nombre de tus muertos, del sonido
del tiempo, y yo, apenas siete años,
descubría tu rostro, comenzaba mi vida
(que ahora se acaba un tanto a la carrera)
sin entender qué era lo que me sucedía
cuando la luz me ahogaba mi tragaluz de niño.
Era la vida, Elvira, lo que llaman poesía,
lo que empieza a diario y nunca cesa,
que una vez es espada, otra vez es incendio,
siempre guerra, cilicio que desgarra la piel
de la razón, oscura cicatriz de sombra y sexo.
Años más tarde, cuando tú eras ceniza,
un navajazo, Elvira, me traspasó mi pecho,
y desde entonces vivo afilando
la cuchilla que rasga a diario mis sentidos.
Para poder amarnos sin que la inquisición
de tu mirada nos mandara a la hoguera
tuvimos que huir por siempre desterrados
a países de pestes, confusión y abandono.
¿Qué habrá sido de aquella golondrina
que oscureció los ojos de mis huesos
cuando se reflejó la aguja de su vuelo
en mi última tarde de inocencia?
Yo sé de ti, Elvira, yo sé que estás
reseca, cosida de silencio, esperando
mis flores que nunca te he llevado.
Yo no sé donde vives ahora, Elvira Muerte,
quién te esconde la vasija del alba,
o quién te pone de barro tus pupilas.
Yo sólo sé que ahora la noche está cavando
con su azada de acero raíces en lo oscuro
mientras la Bestia va ordenando
las cosas en su sitio y apagando la luz
y no puedo encontrar la llama de la vida,
que tú, Elvira Love, me ocultas en venganza.

Educación nocturna. Hilario Barrero

Para ir conociendo más a Hilario, os recomiendo su blog "Por hache o por be" y aquí tenéis en Wikipedia una bio y bibliografía suya. Si queréis leer más poemas aquí hay unos cuantos en Círculo de poesía .

Pero como siempre, lo mejor es acudir al original, a este libro del poeta a la vez antología y libro nuevo, Educación Nocturna o al resto de su obra.



Adenda de septiembre de 2020:

No tengo noticias de que Hilario Barrero haya publicado en este periodo ningún libro de poesía propia. Pero sí ha publicado en 2019 otro tomo de sus diarios: "Prospect Park : Diarios, 2014-2015"; y en 2018 "A quien pueda interesar" una antología de poesía en inglés traducida por él al español. Esperemos que no tarde mucho en ofrecernos otro poemario propio.




Adenda de octubre de 2021

Hilario Barrero ha publicado este año "Tiempo y deseo. Poesía 1971 - 2021" Su poesía completa, aquí tenéis la entrada que le he dedicado nada más recibir el libro.



miércoles, 26 de abril de 2017

Juan Boscán

Imagen atribuida en  Internet
Conocemos a Juan Boscán (Barcelona, 1492 - Perpiñán, 1542), además de por su obra, por haber introducido la lírica italianizante en la poesía en castellano y haber animado a Garcilaso a esa misma tarea que incorporó definitivamente el endecasílabo en nuestra lengua.

Aunque sus poemas no tienen la altura lírica de los de Garcilaso, muestran ya esa nueva estructura al tratar los tópicos de la poesía de la época. Además, hay que agradecer a su viuda que publicase prontamente a ambos, permitiendo su difusión.


SI LAS PENAS QUE DAIS (Soneto LXV)

   Si las penas que dais son verdaderas,                  
como muy bien lo sabe el alma mía,                     
¿por qué ya no me acaban, y sería                        
sin ellas mi morir muy más de veras?                   

   Mas si por dicha son tan lisonjeras                      
que quieren retozar con mi alegría,                      
decid, ¿por qué me matan cada día                      
con muerte de dolor de mil maneras?                 

   Mostrarme este secreto, ya, señora,                
y sepa yo de vos, pues por vos muero,                
si aquesto que padezco es muerte o vida;                         

porque siéndome vos la matadora,                      
mayor gloria de pena ya no quiero                        
que poder yo tener tal homicida.

Juan Boscán 


SONETO LXXXV

   Quien dice que la ausencia causa olvido
merece ser de todos olvidado.
El verdadero y firme enamorado
está, cuando está ausente, más perdido.

   Aviva la memoria su sentido;
la soledad levanta su cuidado;
hallarse de su bien tan apartado
hace su desear más encendido.

   No sanan las heridas en él dadas,
aunque cese el mirar que las causó,
si quedan en el alma confirmadas,

que si uno está con muchas cuchilladas,
porque huya de quien lo acuchilló
no por eso serán mejor curadas.

Juan Boscán 

Nota técnica: En el verso 13º de este soneto en" ...porque huya..." no hay sinalefa y es un endecasílabo, lo que nos lleva a confirmar que en esa época la "h" aún se aspiraba.

En la entrada que dediqué a Garcilaso comento estos "argumentos de amor" de nuestra poesía clásica y su carácter ficticio que no suele relatar vivencias personales. 

En Cervantes virtual, tenéis una biografía y cien de sus sonetos. Y en el portal Sonferrer otra reseña biográfica y varios poemas del autor.

miércoles, 12 de abril de 2017

Manuel Altolaguirre

Manuel Altolaguirre (Málaga, 1905 - Burgos, 1959) fue poeta, guionista y cineasta. Miembro de la generación poética del 27 es uno de los que ha pasado más desapercibido, quizás porque le ha perseguido su fama de simpático, pícaro y embaucador. He seleccionado unos poemas de amor, género donde creo que destaca y en que su poesía se mantiene fresca pese al paso de los años. Dijo él que: su poesía se sentía hermana menor de la de Salinas. Y algo hay de ello, pero es que la comparación con Salinas siempre es muy difícil.



















AMOR OSCURO

Si para ti fui sombra
cuando cubrí tu cuerpo,
si cuando te besaba
mis ojos eran ciegos,
sigamos siendo noche,
como la noche inmensos,
con nuestro amor oscuro,
sin límites, eterno...
Porque a la luz del día
nuestro amor es pequeño.

Manuel Altolaguirre

AMOR, SÓLO TE MUESTRAS...

Amor, sólo te muestras
por lo que de mí arrancas,
aire invisible eres
que despojas mi alma
manchando el limpio cielo
con suspiros y lágrimas.
Al pasar me has dejado
erizado de ramas,
defendido del frío
por espinas que arañan,
cerradas mis raíces
el paso de las aguas,
ciega y sin hojas la desnuda frente
que atesoró verdores y esperanzas.

Manuel Altolaguirre


En el Instituto Cervantes, podéis encontrar su biografía y bibliografía, y en la web de la Residencia de estudiantes una selección de sus poemas. En el Cultural de El Mundo, José Luis García Martín publicó un artículo Manuel Altolaguirre, 100 años de soledades que os recomiendo.

Por último, esta conocida foto donde aparecen en 1937 de izquierda a derecha: Víctor María Cortezo, Blanca Pelegrín, Luis Cernuda, María del Carmen García Lasgoity, Manuel Altolaguirre y María del Carmen Antón.





viernes, 17 de marzo de 2017

Romance de la doncella guerrera

Conviene de tanto en tanto volver a los orígenes de nuestra poesía. Este es un "Romance viejo", anónimo, del siglo XV, del que circulan muchas versiones. Ésta es la que recoge la Antología Española e Hispanoamericana de Jose Mª Valverde y Dámaso Santos. Trata del tema de la doncella que va a la guerra disfrazada de hombre, de las pruebas a que la somete el enamorado hijo del rey para descubrir si es hombre o no, de su huida y del presumible final feliz cuando éste la sigue.



ROMANCE DE LA DONCELLA GUERRERA

    —Pregonadas son las guerras
de Francia con Aragón,
¡cómo las haré yo, triste,
viejo y cano, pecador!
¡No reventaras, condesa,
por medio del corazón,
que me diste siete hijas,
y entre ellas ningún varón!—
    Allí habló la más chiquita,
en razones la mayor:
—No maldigáis a mi madre,
que a la guerra me iré yo;
me daréis las vuestras armas,
vuestro caballo trotón.
—Conocerante en los pechos,
que asoman bajo el jubón.
—Yo los apretaré, padre,
al par de mi corazón.
—Tienes las manos muy blancas,
hija no son de varón.
—Yo les quitaré los guantes
para que las queme el sol.
—Conocerante en los ojos,
que otros más lindos no son.
—Yo los revolveré, padre,
como si fuera un traidor.—
    Al despedirse de todos,
se le olvida lo mejor:
—¿Cómo me he de llamar, padre?
—Don Martín el de Aragón.
—Y para entrar en las cortes,
padre ¿cómo diré yo?
—Bésoos la mano, buen rey,
las cortes las guarde Dios.—
    Dos años anduvo en guerra
y nadie la conoció
si no fue el hijo del rey
que en sus ojos se prendó.
—Herido vengo, mi madre,
de amores me muero yo;
los ojos de Don Martín
son de mujer, de hombre no.
—Convídalo tú, mi hijo,
a las tiendas a feriar,
si don Martín es mujer,
las galas ha de mirar.—
Don Martín como discreto,
a mirar las armas va:
—¡Qué rico puñal es éste,
para con moros pelear!
—Herido vengo, mi madre,
amores me han de matar,
los ojos de Don Martín
roban el alma al mirar.
—Llevárasla tú, hijo mío,
a la huerta a solazar;
si don Martín es mujer,
a los almendros irá.—
Don Martín deja las flores,
una vara va a cortar:
—¡Oh, qué varita de fresno
para el caballo arrear!
—Hijo, arrójale al regazo
tus anillas al jugar:
si don Martín es varón,
las rodillas juntará;
pero si las separase,
por mujer se mostrará.—
Don Martín muy avisado
hubiéralas de juntar.
—Herido vengo, mi madre,
amores me han de matar;
los ojos de don Martín
nunca los puedo olvidar.
—Convídalo tú, mi hijo,
en los baños a nadar.—
    Todos se están desnudando;
don Martín muy triste está:
—Cartas me fueron venidas,
cartas de grande pesar,
que se halla el Conde mi padre
enfermo para finar.
Licencia le pido al rey
para irle a visitar.
—Don Martín, esa licencia
no te la quiero estorbar.—
    Ensilla el caballo blanco,
de un salto en él va a montar;
por unas vegas arriba
corre como un gavilán:
—Adiós, adiós, el buen rey,
y tu palacio real;
que dos años te sirvió
una doncella leal!—
    Óyela el hijo del rey,
tras ella va a cabalgar.
—Corre, corre, hijo del rey
que no me habrás de alcanzar
asta en casa de mi padre
si quieres irme a buscar.
Campanitas de mi iglesia,
ya os oigo repicar;
puentecito, puentecito
del río de mi lugar,
una vez te pasé virgen,
virgen te vuelvo a pasar.
Abra las puertas, mi padre,
ábralas de par en par.
Madre, sáqueme la rueca
que traigo ganas de hilar,
que las armas y el caballo
bien los supe manejar.—
    Tras ella el hijo del rey
a la puerta fue a llamar.

Anónimo (siglo XV)


Estos romances se transmitieron oralmente hasta que fueron recogidos en algún cancionero y como os he indicado hay de ellos numerosas versiones. Como ejemplo este vídeo del grupo Mansaborá en que cantan otra de ellas. 


O esta otra canción sefardí, inspirada en este romance, que ha recorrido el mundo con los judíos expulsados de España.


Estos romaces son estructuras poéticas sencillas, dado su origen popular. Versos octosílabos con rima (normalmente asonante, aunque en este hay bastantes consonantes) en los versos pares. Si estáis interesados en saber más de Métrica, o sea de los principios y porqués de esa armonía versal que distingue al poema de la prosa, podéis consultar mi tratado "Métrica poética del idioma español", ampliado en diciembre de 2023, que los explica de una forma sencilla, pero rigurosa. Aquí os dejo una sinopsis del libro.



miércoles, 1 de marzo de 2017

Victor Sánchez (TheVicVlogs): "Harto"

He descubierto en la red en un vídeo; un poema de protesta que demuestra que la poesía no muere, sino que revive y rebrota si está llena de fuerza. Poco sé del autor, creo que se llama Víctor Sánchez (TheVicVlogs) y ha sido muy activo en YouTube con desenfadados vídeos. Voy a buscar más información. Os transcribo la letra de "Harto", pero es mucho mejor oírla en su voz.


HARTO

Puedo decir que no soy de los que se quejan,
que prefiero ganarme el cambio y cada poco cuenta;
y es por eso que quejarme hoy tanto me cuesta,
pero no hay más que pueda hacer, siento impotencia.

Estoy harto.
Harto de políticos corruptos y de bancos;
de ladrones de traje, corbata y guante blanco;
de recortes, de rescates y de embargos.
Harto de avergonzarme de ser español y de España,
de dictaduras teñidas de democracia;
rojas antes, luego azules y a saber mañana.

Pero hay cosas que detesto
—y que no cambian—, que un concejal de festejos
cobre más que un maestro,
que un catedrático de universidad o que un médico;
que nuestro sueldo mínimo no llegue a setecientos euros
y el de un diputado no baje de los tres mil quinientos.

Harto de pagarles viajes, chóferes, cenas
en restaurantes de gran lujo; y tú, mientras,
sudando sangre, trabajando, pasando penas
para poder llenar así otra vez la nevera.

Harto de coronas, de príncipes ladrones y princesas,
de reyes que acaparan maldades inconfesas.
¡Su majestad! símbolo de unidad y permanencia,
más bien símbolo de malestar y decadencia.

Me da rabia
que la gente se mueva por otras cosas,
por el Madrid, por el Barça, por la Eurocopa,
por enseñar que buenos somos a toda Europa.
Con el futbol nos engañan y nos ciegan con la roja.

Muy harto de escuchar que mil jóvenes se marchan
cada día a Reino Unido, a Noruega, o a Alemania;
que hoy en día tres carreras ya no bastan,
que hoy en día se premia la ignorancia.
Cansado de paquirrines, julianes y pantojas;
empachado de tragar tanta salsa rosa,
fulanas, chorizos, yonkis, idiotas,
de repente son ahora gente famosa.

No lo entiendo,
que todavía intenten que me trague el cuento
de que la fiesta de los toros es algo bueno;
de que matar por hobby en la plaza es algo nuestro.
¡No es mío!, eso seguro, y es triste que sea vuestro.

Harto de escudos, de porras, de cargas,
de piedras y de los que las lanzan,
de que los puños ganen siempre a las palabras
y de que al final nadie gane nada.

Estoy harto,
—podría decirlo más alto pero no más claro—
del hambre, desahucios, de robos, del paro,
de que me obliguen cada día a aguantar tanto;
y hoy ya no puedo más, hoy ya no aguanto.
Qué más da lo que diga, no cambiará nada,
me acusaran de vivir en un mundo de hadas.
No pido riquezas, ni halagos, ni otras bobadas,
sólo lo que es mío y ellos me arrebatan.

Estoy harto.

Víctor Sánchez. TheVicVlogs

Este el el vídeo donde recita el poema "Harto".


Como os he dicho, no he podido encontrar de momento mucha más información sobre el autor, salvo que nació en Barcelona en 1982 y es Ingeniero y Youtuber aficionado. Colgó este vídeo hace unos tres años en su canal TheVicVlogs donde tiene todo tipo de desenfadados vídeos, unos cuantos en formato de poema-rap. En este enlace veréis los que él califica de "Poesía"

Últimamente, parece bastante ausente y en éste video de ese título "Ausente" da algunas explicaciones del porqué.  


Adenda de julio de 2020: Pues Víctor Sánchez sigue desaparecido de las redes. Buscando he encontrado esta antología de poemas suyos con el título de Poemas de un poeta muerto, esperemos que reviva o que alguno de vosotros me sepa dar razón de él. Aquí os cuelgo una rumba suya de hace 6 años.


miércoles, 1 de febrero de 2017

Leopoldo Alas Mínguez

Leopoldo Alas Mínguez (Arnedo, Logroño 1962 - Madrid 2008) escritor y poeta desaparecido prematuramente. Vicente Molina Foix reprodujo en un obituario en El País un fragmento de Los Andenes, que escribió a los 18 años, como muestra de su temprana lucidez poética.

Los trenes sólo pasan / cuando no se los espera, y nos sorprenden: / hay que agarrarse a los trenes con las uñas / cuando pasan por delante, / aunque te den la espalda, / hay que montarse en marcha / porque los trenes no paran, / eres tú el que estás parado / con la maleta cerrada


Os copio dos de sus poemas de amor de su poemario La posesión del miedo.  para que comprobéis que un poema de amor no tiene por qué ser cursi y puede utilizar un lenguaje simple a la vez que potente.


RAZÓN DE AMOR

No es sólo la pasión de los abrazos,
la saliva, el aroma, el vértigo, los besos
o el plácido desvelo de la ausencia.

Mi amor es la fábula y la trama,
el relato interior que sigue a cada encuentro,
la glosa que acompaña los adioses,
el minucioso examen de las frases
y el eco que tu voz le pone a mi silencio.

Mi amor es ser feliz y no engañarme
anticipando el daño del negro desengaño,
cuando el sexo se esfume en el recuerdo
remoto y resentido de un orgasmo.
El consentir la calma en las mareas
y atesorar las horas y los días
de la fiesta de luz que celebramos,
del banquete voraz de los sentidos.

Y abolir la frontera de los cuerpos,
detenernos, subiendo la escalera,
a besarnos en todos los peldaños.

Leopoldo Alas (La posesión del miedo) 1996


PASIÓN DE AFECTO

En el amor fatal no brilla el pensamiento.
La mente se coagula cuando la sangre estalla.
Vuelve sombrío el ingenio y sin gracia
la fatuidad fanática del fuego.
Yo creo en un amor clarividente,
una efusión borracha de prudencia,
el fruto que se alcanza, las fuentes del desierto.

El riesgo y la pasión están en el afecto,
en un miedo común al abrazarse.
Dormidos, compartir el mismo sueño.
Despiertos, afilar las diferencias.
Amor que no se abisma ni se engaña,
amor que se resuelve en transparencia.

Leopoldo Alas (La posesión del miedo) 1996


En este enlace podréis acceder a una antología de sus poemas publicada en A media voz. Y, por si os animáis a leerlo más, aquí tenéis las portadas de algunos de  sus libros de poemas.





lunes, 2 de enero de 2017

Gabriel Celaya

Gabriel Celaya (Hernani, 1911 - Madrid, 1991). Poeta de la generación literaria de posguerra y uno de los más destacados representantes de la denominada poesía social. Paco Ibañez, cantando su "La poesía es un arma cargada de futuro", ayudó a que muchos nos interesásemos en su obra. 

No todo el mundo está de acuerdo en esa convivencia de música y poemas, pero yo creo que ha sido una magnífica puerta para descubrir mundos poéticos y todo lo que se haga para popularizar la buena poesía es positivo.

Aquí tenéis dos de sus poemas:


LA VIDA, AHÍ FUERA

Esa vida que no es mía y me rodea,
el misterio de la muerte, lo que llamamos la muerte
y el misterio de la vida siempre abierta,
lo que llamamos la vida
en el árbol, en las nubes y en el agua,
y en el viento y en el mundo que es quien es sin ser humano,
y en la inmensa transparencia que no se dice, se muestra
en eso que busqué tanto y ahora encuentro regresando:
La infancia, quizá, la infancia, nuestro final seguro,
nuestro cuento, nuestro canto, nuestra mágica conciencia:
El total de lo sin fin y de la vida abierta.

"Poemas órficos", 1978. Gabriel Celaya.


DEDICATORIA FINAL (Función de Amparitxu)

Pero tú existes ahí. A mi lado. ¡Tan cerca!
Muerdes una manzana. Y la manzana existe.
Te enfadas. Te ríes. Estás existiendo.
Y abres tanto los ojos que matas en mí el miedo,
y me das la manzana mordida que muerdo.
¡Tan real es lo que vivo, tan falso lo que pienso
que -¡basta!- te beso!
                               ¡Y al diablo los versos,
y Don Uno, San Equis, y el Ene más Cero!
Estoy vivo todavía gracias a tu amor, mi amor,
y aunque sea un disparate todo existe porque existes,
y si irradias, no hay vacío, ni hay razón para el suicidio,
ni lógica consecuencia. Porque vivo en ti, me vivo,
y otra vez, gracias a ti, vuelvo a sentirme niño.

"Función de uno, equis, ene", 1973. Gabriel Celaya

En esta web de la Diputación Foral de Guipuzkoa encontraréis su biografía, bibliografía y mucha más información, además de algunos de sus poemas. Y en A media voz otra selección más amplia de sus poemas.

He citado al inicio su La poesía es un arma cargada de futuro y a Paco Ibañez y aquí los cuelgo en un vídeo para que podamos recordarlo:


Este vídeo es de hace pocos años y la voz le flaquea algo a Paco Ibañez, pero no el sentimiento y la fuerza con la que canta este poema. Aquí tenéis la letra del poema

martes, 22 de noviembre de 2016

Carmen Plaza y los sonetos de "Cautivas palabras"

Carmen Plaza, nació en Burgos y vive desde hace muchos años en Barcelona. Ella es economista y, además, una excelente poeta a la que le dedicamos esta entrada por la publicación de su libro de sonetos Cautivas palabras. Se dice que quien no ha escrito un buen soneto es difícil que pueda escribir buen verso libre, pues aquí tenemos 44 y en otros libros de Carmen buen versolibrismo, lo uno potencia o otro. 


He seleccionado dos sonetos, pero copio primero un magnífico terceto que cierra otro de ellos:

El tiempo hunde sus garras en la historia,
mas, sin nosotros, nunca será nada.
Aunque le pese, somos su memoria.


INCENDIO

Está ardiendo mi casa, vieja cera,
panal que se deshace lentamente
y deja el frío hueco del ausente,
resplandor de la llama pasajera.

Alcanzado el final de la carrera,
cansada de vivir sólo el presente,
obedezco una voz incandescente
que me conmina a ser lo que no era.

El camino se vuelve a oscurecer
y en mitad de la duda me detengo
aferrada al espectro del ayer.

No puedo discernir si voy o vengo,
si atravieso la luz, y no sé ver
el tiempo que he vivido y que no tengo.

Carmen Plaza. Cautivas palabras.


Y este otro, que cierra el libro, en el que borda la difícil suerte de mantener la misma rima sin cansar y remata de una certera estocada.

EPITAFIO

Aquí yace mujer. Amó deprisa,
pago el reclinatorio, oyó la misa,
mantuvo el gesto leve, voz concisa,
el alma soterrada e indivisa.

Agradar al varón fue su divisa,
con un suave bosquejo de sonrisa.
Obedeció al dictado muy sumisa
guardando su virtud como Artemisa.

Quería ser poeta o poetisa,
hereje, capitán, sacerdotisa,
pero quedó atrapada en la impresisa

fragancia del ser viento o de ser brisa.
Bordó su desconsuelo en la camisa,
comió pan duro y se murió de risa.

Carmen Plaza. Cautivas palabras.


Debo recordar que Carmen Plaza ya había aparecido en este blog, precisamente con un soneto, entonces inédito y que ahora publica. Ese soneto acompañó a unos endecasílabos blancos de José Florencio Martínez y a una décima mía, en el homenaje que dedicamos unos amigos en 2013 a Enrique Badosa, por sus fructíferos 60 años de poesía.

Aquí podéis encontrar una bibliografía de Carmen Plaza en la que veréis su amplia producción de los últimos años y unos cuantos de sus poemas para comprobar lo que dije acerca de la relación del buen soneto con el buen versolibre. Por si queréis saber más de sus sonetos, éste es el enlace en la Casa del libro de Cautivas palabras.





Adenda de abril de 2010: Carmen Plaza ha seguido publicando después de esta entrada que efectué a finales de 2016. Aunque estemos confinados, los libros pueden llegar a nuestras casas. Aquí tenéis los enlaces de de los libros de Carmen en Amazon, La casa del libro y Editorial Carena.