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domingo, 29 de septiembre de 2019

Ante nuevas elecciones: eficiencia o dimisiones

Publiqué estas espinelas satíricas en junio de 2016 cuando se convocaron nuevas elecciones, ya que los elegidos en diciembre de 2015 no supieron ni quisieron ponerse de acuerdo. Pues ahora más de lo mismo, no he cambiado ni una coma, sólo he tenido que modificar la foto porque uno de los cuatro es nuevo, es una vergüenza este desprecio a los votantes y este malgasto. En noviembre repetimos votaciones y esta minilegislatura sólo ha servido para comprobar ineficiencias, egos, partidismos, y para mantener a esos diputados y senadores que no se han ganado el sueldo.


ANTE NUEVAS ELECCIONES: EFICIENCIA O DIMISIONES

No nos habéis hecho caso,
ha sonado la campana,
la negociación fue vana
y el resultado, fracaso.
Nos indignáis, el retraso
demuestra vuestra impotencia,
vuestra torcida conciencia,
el menosprecio a los otros,
—los que os votamos, nosotros,—
y acaba con mi paciencia.

Dicen que otras elecciones
van a costar al Estado,
—pagando el electorado—
ciento cincuenta millones.
Y digo yo: ¡Qué cojones!,
que lo paguen los culpables,
los tipos irresponsables
que, tras los meses perdidos,
piden votos repetidos
con sus sonrisas afables.

El mandato estaba claro,
vuestra obligación pactar
para poder gobernar
en vez de salirnos caro.
Mi propuesta, lo declaro,
es que os reduzcan la paga
ante una actitud tan vaga,
por no decir delincuente,
y me apoya mucha gente,
pues pongo el dedo en la llaga.

Continúo: El Senado
lo vamos a suprimir,
y el Congreso a reducir
y con horario ampliado.
Hay que ahorrar y, por sentado,
ser eficientes, que el mundo
ha cambiado en lo profundo
y los políticos siguen
sin normas que les obliguen
a no perder ni un segundo.

Ya os lo hemos advertido,
en vuestros nuevos programas,
en vez de iros por las ramas,
más nueces y menos ruido.
Quiero votar a un partido
que excluya la corrupción,
que no le importe el sillón,
y haga gestión eficaz.
¿Creéis que seré capaz,
que alguno pasa el listón?

Ricardo Fernández Esteban ©



A pesar de las ganas de pasar de todo, hemos de ir a votar, porque la abstención (otra cosa sería un voto en blanco combativo) es lo peor en democracia. Espero que el programa de alguno incluya "mea culpas", propósitos de enmienda y propuestas de pactos claras sin absurdos "cordones sanitarios"  previos. Quizás sea mucho esperar...

Aquí tenéis otro poema que les dedique hace un mes "Consenso o dimisión" y como veis no me han hecho caso, ni consensos ni dimisiones, los cuatro principales repiten. Si es verdad aquello de que "todo pueblo tiene los políticos que se merece" somos un pueblo bastante impresentable. Ahora tenemos la ocasión de demostrarles que vamos a votar a quien nos plantee un programa coherente y con propuestas de pactos.

miércoles, 25 de septiembre de 2019

Fernando Ortiz

Fernando Ortiz (Sevilla, 1947-2014)​ fue un poeta, crítico literario y articulista considerado por varios antólogos como como muy importante para su generación, aunque desde el punto de vista popular no sea tan conocido como otros. Os dejo unos cuantos poemas suyos


EN LA PERFECTA EDAD

El sabor del café, el cigarrillo,
el pausado paseo de la tarde,
el olor de la tierra cuando llueve,
la grata charla con algún amigo
y alguna rara página gozada
son tu amor a la vida, tus sentidos.
Ahondan las heridas con el tiempo
aunque oculte a su vez las cicatrices.
La juventud pasó, y eso que tienes
es lo que llaman madurez los necios.


INTERIOR

Quién sabe si aquella luz viene de fuera o de adentro
de los alzados visillos. Ni a qué lado del espejo
surge esa mano de niebla que va dibujando un sueño
de relojes y almanaques, de puertas y verdinegros
salones acristalados que son del agua el reflejo.
Agua de un río muy hondo que viene desde muy lejos.
—Aquí las cosas nos miran con grandes ojos secretos—.

Con parsimonia el reloj suena en el patio en silencio.


LA SOLEDAD

La soledad, la lámpara, la mesa,
aquí el recado de escribir dispuesto.
¿Es eso compañía?
Quizá la solución sea el amor.
¿Y cómo se ama?
¿Lo supe alguna vez y lo olvidé?
Quizá nunca lo supe y ahora me doy cuenta.
Escribí libros de poesía.
Quise decir palabras bellas y a la vez verdaderas.
Pues el tiempo se acorta,
¿irreal fue mi vida, humo dormido, niebla?
Amargo es despertar, malgastado el pasado
si quedan menos horas
y en éstas sólo ves vacío.
¿Qué te dicen los años?:
Araña con tu pluma tu presente
y pon verdad
para que así ilumine tu pasado el futuro.
¿Dónde la compañía?:
La soledad, la lámpara, la mesa,
he aquí el recado de escribir dispuesto.


LA HORA

Lucha el poeta en contra de la nada
y a su fin sin destino llama Dios.
Que nadie piense de la vida en pos,
después el paraíso. Dije Nada.

Cuando llega la hora ya acotada
si acaso, despedirse, un“Adiós".
Qué inocencia pensar que después los
arcángeles esperan a la entrada.

Quevedo Otero, Brines… Así, todos
los que tal piensan, piensánse ceniza.
Mas muchos siguen la porfía en vano,

soñando en el vacío encontrar modos
de que la Parca sea olvidadiza:
El sueño de una noche de verano.

Fernando Ortiz 


Por si queréis leer más os dirijo a dos antologías suyas en la red, una en Poetas andaluces que incluye su bibliografía y otra en la revista Abel Martín.

Esta es una pequeña entrevista en El País cuando publicó en 2013 su antología Versos y años, y este el obituario que le dedicó el mismo periódico. Perdemos al poeta pero nos quedan sus libros.







martes, 10 de septiembre de 2019

Carmen Jodra

(actualizado en VII-23) Carmen Jodra (Madrid 1980- 2019) fue una poeta precoz ganadora del premio Hiperión en 1999 con Las moras agraces, libro que tuvo un gran éxito. Luego casi desapareció de los ambientes literarios, excepto por la publicación en 2011 Rincones sucios, que pasó mucho más desapercibido. Falleció el pasado mes de junio cuando tenía otro libro listo, El libro doce, que se ha publicado en 2021.


Por aquello de que todo buen poeta ha de hacer escrito un buen soneto antes de dedicarse a otros menesteres poéticos, comienzo con un soneto de "El ciclo satánico"


HOY VIENE A VERME. ÉL, ÉL EN PERSONA...

Hoy viene a verme. Él, Él en persona.
No intento resistirme, por supuesto.
Irónico y burlón, llega dispuesto
a "salvarme de lo que me obsesiona":

tal dice. Su belleza desentona
con el eterno universal denuesto
de que le han hecho objeto; aparte de esto,
me ofrece lo que nunca se perdona.

Tendiendo, en fin, el ominoso pliego,
me ha mirado con ansia tan humana
que chispean sus ojos como el fuego.

¡Un alto precio por una manzana!
Temblando igual que Él, respiro y niego,
pero no sé lo que diré mañana.

Carmen Jodra


Y ahora os dejo otros dos poemas, si queréis más podéis consultar la antología publicada en A media voz

IMPRESSION DU MATIN

Cuánta belleza nos reserva el mundo.
Ha helado ya sobre las hojas muertas.
Hay una chica con una melena
lisa y rubia, larguísima,
y otra chica con su gloriosa mata
de pelo pelirrojo.
El sol lanza chispazos sobre las hojas muertas.
Cuánta belleza nos regala el mundo.


FATIGA

Hay demasiadas cosas
de las que preocuparse,
siempre distintas, siempre imprescindibles,
y nunca se termina,
y apenas se respira... Y además
está el muchacho que jamás nos mira,
la chica que no sabe que la amamos
Y Platón predicando represiones...
Y a esto le llaman vida...

Carmen Jodra


No sabemos lo que la poeta hubiese dado de sí y siempre es triste referirse a alguien cuando ya nos ha abandonado, y a tan temprana edad. Aquí os dejo dos obituarios en El Cultural y el La Vanguardia, este último con algunos poemas suyos. Isabel Gamero en Letras libres creo que ha hecho un buen resumen de su trayectoria poética. Por otra parte, Juan Marqués nos deja una visión de la autora, en la que se acerca más a la persona sin descuidar su obra.

Aquí tenéis el enlace a la editorial La bella Varsovia donde aparece información de sus libros y concretamente del último póstumo El libro doce. Os dejo uno de sus poemas:


GABRIEL EL EFEBO

Qué hay en la voz del muchacho, 
que ha vuelto del verano con ángulos más duros
en el óvalo tierno de su cara, aunque apenas
perceptibles.
                 Hay en su voz ahora
algo áspero, que raspa, que no fluye tan suave,
que no acaricia lo mismo que antes.

de El libro doce (2021). Carmen Jodra