jueves, 7 de febrero de 2019

José Iglesias de la Casa

José Iglesias de la Casa (Salamanca, 1748 - 1791) sacerdote y poeta que fue conocido con el sobrenombre de "Arcadio". Destaca por su poesía bucólica y amorosa, pero también por sus sátiras como esta letrilla suya en que elogia la vida alegre. Al final indico el significado de algunas palabras actualmente en desuso.


LETRILLA

En eso de que por tema
de no ceder a ninguno,
sin esperar premio alguno,
me ponga con mucha flema
a escribir un gran poema,
como el pobretón del Tasso, (*)
paso.

Mas en que por diversión
se suelte mi tarabilla (*)
en cantar una letrilla
donde saque a colación
tanto esposo chivatón
como a cada paso encuentro,
entro.

Que yo, cual camaleón,
esté a un gran sofí adulando, (*)
mil sobardadas pasando (*)
por lograr mi pretensión,
cautivo de ambición
de sueño y de gusto escaso,
paso.

Mas en que mis gustos ame
donde hallo fortuna cierta,
y cuando más me divierta,
ningún cuidado me llame,
pues buey suelto bien se lame
por defuera y por dedentro,
entro.

Que quieran que a una función
vaya yo en diciembre helado,
a beber, de convidado,
aguas de agraz y limón (*)
que dejen mi corazón
tan helado como el vaso,
paso.

Pero que con mi vecino
y otras amigos, de broma,
sentado en un corro coma
buenas lonjas de tocino,
y un gran pellejo de vino
haya por copa en el centro,
entro.

En que vestido de gala
dance yo en serio un amable, (*)
sin que toque y sin que hable
a las damas de la sala,
pues me echarán noramala (*)
si a algo de esto me propaso,
paso.

Mas en el ir a enredar
a los bailes de candil,
donde pueda yo entre mil
con las chicas retozar,
apagar la luz, y andar
a esta cojo, a la otra encuentro,
entro.

José Iglesias de la Casa


Torcuato Tasso compuso un extensísimo poema sobre la conquista de Jerusalén.
Tarabilla: hablar mucho sin orden ni concierto
Sofí: majestad persa antigua.
Sobarbadas: Reprensión a alguien con palabras ásperas.
Agraz: zumo de uva no madura.
Amable: baile cortesano del siglo XVIII.
Noramala: en hora mala.



En el siglo XVIII no abundan los buenos poetas, pero tampoco hay que olvidarlo y José Iglesias de las Casas es una muestra de que la poesía pervivió en esa época. En la Real Academía de la Historia hay una biografía del autor. En la Biblioteca virtual Cervantes se pueden encontrar unas cuantas letrillas más y en A media voz unos cuantos poemas bucólico amorosos

viernes, 25 de enero de 2019

Ester Bueno Palacios

Ester Bueno Palacios (Piedrahíta, Ávila, 1966) ha comenzado a publicar poesía en solitario hace poco. Además de poeta, es periodista y experta en la enseñanza de español para extranjeros. Yo la descubrí hace años en la antología "Enésima hoja" y os la traigo al blog junto con la información de los dos poemarios que ya ha publicado.



COBARDE

¿Eres tú la que está detrás
escondida en los gestos de siempre?
¿Eres quién dices ser?
¿O respondes a un nombre imaginario?
¿Has sido abandonada por ti?
¿O sólo te has dejado por un tiempo?

No quieres responder, no quieres encontrarte.
No quieres asomarte, de nuevo, al vértigo de ahora.
¿No cederás ni un día?

Los demás, sin embargo, parece que te miran
como si aún estuvieras.

Dos caras, dos sentidos,
dos herrumbres clavadas en el cuerpo
a la altura del torso.
Dos latidos revueltos,
infectados.

¿Eres tú la que está detrás
de la voz que conocen los pasos de tu casa?
¿Eres quien dices ser?
¿O has matado a quien fuiste?
¿Has sido relegada por ti?
¿O sólo te has dejado por un tiempo?

No quieres responder, no quieres responderte.
No quieres asomarte, de nuevo, al vértigo de entonces.
¿No cederás ya nunca?

Ester Bueno Palacios (de La velada impaciencia)


Aquí os dejo información de su primer poemario en solitario Nada es lo que debías (2014) que incluye un poema y videos en que interviene la poeta. Del segundo, La velada impaciencia (2017) os dejo un poema y unas reseñas.


Adenda de noviembre de 2022: El pasado año ha publicado otro libro de poemas, De herméticos lugares, aquí tenéis una reseña y uno de sus poemas:



NACER II

Remedo en la distancia.
Mis zapatillas blancas de niña danceante,
horquillas maltratadas por el pelo salvaje,
latente rebeldía,
llena la calma de furibundos cielos,
lleno el orgullo de sonatas vibrantes.
Cada cosa yacía en su dominio pulcro
y nada parecía salir de su canasto,
para el que estaba hecho.
Pero el crecido grito de deseos,
de sueños y de alcances,
de puentes ya trazados y no erguidos,
de cuerdas que trasladan a otro lado del río,
estaban,
allí estaban.
La cruz de los días claros en el frente del monte.
El agua recurrente por los caños parados entre noches.
El estío dorado con los dedos desnudos
en las manos de amigas.
Los canchales rugosos, extraños por calientes.
El musgo, Peña Negra…
Así estuve naciendo… mucho tiempo.

Ester Bueno Palacios (de Herméticos lugares)


























lunes, 7 de enero de 2019

Las islas Kufonisia: Pano y Kato (la alta y la baja)

Las KUFONISIA (Κουφονήσια) son dos islitas de unos 4 km. cuadrados cada una que forman parte del archipiélago de las Pequeñas Cícladas, situado al sur de Naxos en el centro del Egeo griego. Dos islas parecidas en tamaño y belleza pero muy distintas en ocupación. Pano (la alta) tiene una cierta infraestructura turística y además recibe barcos de otras islas con turistas que van a pasar el día. Kato (la baja) está casi deshabitada y sólo llegan visitantes de día desde la cercana Pano.

A Pano le dediqué hace años un poema rimado, cosa única en mis "Cuadernos de las islas griegas" cuyos poemas son mucho más libres; sería por esa contradicción entre su belleza y la relativa invasión turística que la asalta. He vuelto años después, espero volver a repetir pronto, y sigue igual con sus luces y sus sombras.

Pano Kufonisi. Al fondo Keros y la derecha Kato Kufonisi

Playa puerto de Pano Kufonisi

PANO KUFONISI

En la mañana despunta el día,
isla tan leve
que caminando la circunvalas
en tiempo breve.

Pano preciosa, pequeña Jora
junto al canal,
puerto en la cala, casas pintadas
de azul y cal.


Hay tamariscos y muchas flores:
geranios rojos,
damas de noche, rosas de china,
miles de antojos.

Hacia otras islas, puentes de brillos,
y en la ribera
aguas turquesas, playas doradas,
dulce frontera.


Pero las joyas si son preciosas
tienen adictos
y al poco tiempo muere la calma,
nacen conflictos.

Tribus de “guiris” llenan la arena,
por barca y bus;
¿de dónde vienen tantos turistas
de repelús?

Busco cobijo, mas no hay taberna
sino snack bar,
por suerte al menos sigue reinando
el mismo mar.

Sigo el camino y entre las rocas
hay paraísos
donde la costa le da refugio
al insumiso.

No todo es bueno, no todo es malo
y la belleza,
por mi desgracia, no es solitaria
naturaleza.

Isla minúscula, isla magnífica.
Quizá invadida,
quizá turística, pero aún no eres
isla perdida.

Ricardo Fernández Esteban ©



Playa en Pano Kufonisi
Rocas en Pano Kufonisi



Bahía en Pano
Bahía en Pano










A Kato Kufonisi, la isla hermana de Pano que está prácticamente deshabitada, le dediqué otro poema, también hace años y sin el corsé de la rima. Entonces quedé deslumbrado por su pureza y tranquilidad. No he vuelto a desembarcar en Kato (si que he fondeado en alguna cala), pero espero hacerlo pronto y ojalá mantenga lo que me sedujo.

Enbarcadero en Kato Kufonisi

La iglesia (Panagía) de Kato Kufonisi

KATO KUFONISI

Kato, poco que ver con Pano,
sólo doscientos metros de canal,
sólo doscientos metros de agua azul,
aíslan esta isla de su hermana.

Un simple embarcadero de hormigón,
la taberna, la iglesia,
y unos restos de casas en el campo
reciben a pocos y diurnos visitantes;
lo demás es la isla, la isla en bruto,
lo de menos nosotros,
que tomamos la senda de las playas.

No hay más, ni carreteras,
ni bares en las playas, ni pensiones,
no hay nada más en Kato que “volver”:

Volver a disfrutar de azules infinitos,
a veces blanqueados por crestas de “meltemi”.

Volver a andar sus campos, ver sus flores,
perderse en sus arenas o en sus rocas.

Volver a recorrer puentes de plata
que tiende el sol de tarde sobre el mar.

Volver a sumergirse en esa luz
que es pura y simplemente transparencia.


Volver a contemplar ese horizonte roto
por perfiles de islas que ocultan otras islas.

Volver a una isla griega que se mantiene pura,
volver al paraíso, desembarcar en Kato.

Ricardo Fernández Esteban ©


Kato Kufonisi 
Kato Kufonisi

En este enlace encontraréis información sobre Por las islas griegas, revisado y ampliado en 2023, que es una guía poética de mis últimos 25 años por más de 70 islas, en la que, además de poemas, encontraréis mis anotaciones sobre mis playas, restaurantes, hoteles y otros lugares que prefiero. Aquí lo podéis conseguir en Amazon; si preferís las librerías físicas, hay ejemplares en Altaïr (Gran Vía 616, Barcelona).


miércoles, 26 de diciembre de 2018

Cristóbal Mosquera de Figueroa

Cristóbal Mosquera de Figueroa (Sevilla, 1547 - Écija, 1610) poeta y escritor, además de corregidor y alcalde, no es demasiado conocido, a pesar de su amplia obra que ha sido recogida y comentada recientemente en un libro por Jorge León GustàVamos a tratar en esta entrada de paliar algo este desconocimiento transcribiendo alguno de sus sonetos. Comienzo con dos de temática amorosa.


SONETO A DOÑA JUANA DE MENDOZA

Rayos de eterno sol son tus cabellos,
vivas flechas de amor tus bellos ojos;
tu boca y rostro tierno son despojos
de los colores celestiales bellos.

Si el que se siente atormentado dellos
halla deleite en ásperos abrojos,
dichoso el que sin pena y sin enojos
los goza, pues nació para querellos.

Tú serás otro Alcides, ¡oh Menoro!,
que por el alto premio de la gloria
venció trabajos y domó el profundo;

y dirás, enlazado en trenzas de_oro,
que es poco por gozar de tal victoria
sufrir prisiones, circundar el mundo.

Cristóbal Mosquera de Figueroa

Alcides es el nombre griego de Hércules y Medoro el personaje de Orlando el Furioso amante de Angélica. Como indica J. León, el soneto no se dirige a la amada sino que se centra en el amante camuflado bajo el pseudónimo de Menoro. El el verso 12º el poeta hace sinalefa en "trenzas de oro", hoy en día pronunciamos mejor en hiato "de- o-ro" por la fuerza del acento principal del verso en "oro"; la señalo con _ para facilitar la lectura.


SONETO AL NOMBRE DE UNA DAMA

¡Oh clara crüeldad de Amor airado!
¡Oh clara turbación de suerte mía!
No es clara, sino oscura, mi alegría,
y es clara la ocasión de mi cuidado.

Entonces era clara, y bien librado
yo me pudiera llamar, pues que tenía
la remuneración de mi porfía
con clara luz hermosa prosperando.

Ahora en esta sombra de la ausencia
apartado de ti siento mi clara
razón de me acabar como perdido.

Pero si he de penar sin tu presencia,
ya que la muerte fiera no sêa clara,
vendré a morir a manos del olvido.

Cristóbal Mosquera de Figueroa

Un soneto muy bien estructurado, en torno al nombre de la supuesta amada Clara, con encabalgamientos en el segundo cuarteto, que en mi opinión no desmerece ante otros sonetos de este género de los poetas más famosos de los siglos de oro. En el primer verso existe una diéresis "crüeldad" (cru-el-dad) bastante frecuente en esa época. Se observa una rima asonante en "prosperando" (-ando) frente a las otras en (-ado). En el verso 13º hay una sinéresis "sea" como monosílabo, que marco con circumflejo ^ patra facilitar la lectura; este subjuntivo bisílabo ha sido utilizado por bastantes poetas como monosílabo hasta la actualidad y creo conveniente que en los poemas las sinéresis de este tipo se indiquen con este signo diacrítico para facilitar la lectura.

Y cierro con otro soneto de temática religiosa.

ESTANDO CANSADO DE PRETENDER Y DETERMINANDO RECOGERSE

Déjame ya, Fortuna y Esperanza,
que en mi cuerpo y mi alma has hecho el daño
-de hoy a mañana, de uno en otro año-,
debiendo en Dios poner mi confianza.

¡Oh padres que acudisteis con bonanza
a mis tormentas, tiempo y desengaño!
Pudiera Dios tratarme como a extraño,
pues fuera justa en mí cualquier venganza.

Ángel divino, inspiración del cielo,
nuncio de aquella antigua hermosura:
entra en mi corazón y hazte fuerte.

Apártate ambición, hija del suelo,
que ya me está mejor la sepultura,
sueño de justos, apacible muerte.

Cristóbal Mosquera de Figueroa
 
Destaco una curiosidad fonética en este soneto que nos permite saber como se pronunciaban algunas palabras en las fronteras de los siglos XVI y XVII. Las "h" de "hermosura" y "hazte" todavía no eran mudas y se pronunciaban aspiradas, ya que es así como se mantiene el impecable ritmo de este soneto y sus versos endecasílabos. Un ejemplo de como la poesía permite conocer como pronunciaban nuestros antepasados.


Hay poca información de Mosquera en la red, más alla de la entrada de Wikipedia, y muy pocos poemas colgados, por ello si estos poemas os han sabido a poco, os recomiendo el libro que os he citado antes de Jorge León Gustà que recoge su biografía y su obra poética completa, con interesantes anotaciones que nos ayudan a comprender mejor la obra de este injustamente poco conocido poeta.



Y si queréis profundizar en la construcción métrica de este poema, podéis consultar mi "Métrica poética del idioma español", tratado actualizado en diciembre de 2023, donde descubriréis los porqués de los ritmos poéticos armónicos de estos endecasílabos.




martes, 11 de diciembre de 2018

Poema de Navidad, 2018

Llegan tiempos navideños y con ellos el poema que cada año dedico a mis amigos y conocidos. No suele ser muy navideño al uso, pero sí que intenta ser crítico y aprovechar estas fechas para hacer unas reflexiones deseando un utópico mundo mejor. Ojalá que así sea, o así me gustaría.


¿POEMA NAVIDEÑO?
 

Navidad y poesía
juntas pueden combatir,
dejando que la utopía
sea la estela a seguir.

Se acaba un año más, y ya son muchos
los gastados bajando por el río
que inexorablemente lleva al mar.
No demasiado curso le queda a este trayecto
y temo arribaré cargado de equipaje,
sin el consuelo de falsas esperanzas,
porque quien ama a la razón
desconfía de fes, que siempre ciegan.

Quizá por eso, en tiempos navideños
se impone examen de conciencia,
y hasta los no creyentes entonamos plegarias
en el lugar común en que la ética
reúne a todos los humanos.
Es ésta una oración sin destino en el sobre
y, si lo hubiese, se atienden quejas en remite:

"Busca ser solidario, pero crítico
con buenismos que sólo alimentan conciencias,
olvídate de pueblos que separan,
rechaza los mensajes de voz supremacista,
no creas en caudillos, ni menos en vicarios,
hay que escoger un líder que hable claro
y actúe en el bien común
—buscando hacer posible lo imposible—
e implicarse en el cambio, las creencias no bastan.
No sé si existe dios, pero sí que hay diablo
y el arcángel caído viste de populismo
para atraer al pueblo a su redil:
Miente para agradar a quien le escucha,
promete lo que sabe no dará,
o a veces ni lo sabe, porque él
ha caído en su red y es otra víctima.
Gurú que enfrenta a unos contra otros,
para sacar provecho propio o de su idea,
tanto monta, o monta tanto,
su codicia o su falso idealismo.
Ante ello no valen medias tintas,
combate a ese satán, porque el silencio es cómplice
y la comodidad se paga, y luego es tarde.
Adelante, no esperes, reacciona
el futuro se forja mejorando el presente,
si muchos hacen algo multiplicas valor
y la suma global permite la utopía.
Ojalá que así sea, o así me gustaría."


Ricardo Fernández Esteban ©


Aunque critique la Navidad por su consumismo y por haber perdido su espíritu de paz (si es que lo tuvo alguna vez), he de reconocer que estas fiestas sirven para compartir buenos momentos y deseos con familia y amigos. ¡Brindemos para que os sean muy felices estas fiestas y para que el año próximo nuestros utópicos deseos puedan ser un poco más realidad!



Brindemos por nosotros, por la gente querida,
por familia y amigos, por los que ya no están, 
por los desconocidos, por los que no vendrán 
y porque la utopía mejore nuestra vida.

Un fuerte abrazo


lunes, 3 de diciembre de 2018

Abate Sancho Baile. ¿Es posible la amistad entre el hombre y la mujer?


El Abate Sancho Baile, aquel que fue "fullero y mujeriego antes que fraile" y ahora se nos ha reconvertido en poeta, se me queja de que sus poemas están escondidos por las profundidades de este blog y si niega a enviar más, si no los saco un poco a la luz. Para contentarle, aquí tenéis un soneto con estrambote sobre si es posible la amistad entre el hombre y la mujer.



¿ES POSIBLE AMISTAD DE HEMBRA Y VARÓN? 

¿Opinas que es posible la amistad
entre sexos opuestos, si intención
de rematar pasión tuvo el varón
y no lo consiguió? Pues, de verdad,

difícil es en la realidad
que se dé tan extraña situación.
Debe de consumarse el revolcón
para aceptar la posibilidad.

Si se grabó la muesca en la pistola
y el tiro hizo mal blanco en la diana,
podría ser que a ambos interese

reconducir el tema y, ¡carambola!,
ser amigos probablemente fuese
la mejor solución de buena gana:

La tratas como hermana,
ya no  tienes por qué tirarle tejos
y, si repites, huelgan los cortejos.

del Abate Sancho Baile



Aunque el Abate tenga, entre otros muchos, el vicio de quejarse, no es cierto que sus poemas estén tan escondidos. En este enlace está su antología erótica con poemas propios y ajenos, y en esta etiqueta iré colocando los suyos con entrada propia.



domingo, 18 de noviembre de 2018

Ida Vitale: Premio Cervantes, 2018

Ida Vitale (Montevideo, 1923) acaba de ser galardonada con el Premio Cervantes por su larga obra poética que busca la simplificación (Para expandirse ya está la prosa) y el trabajo más que la inspiración (La imagen del poeta inspirado... Yo no estoy ahí. A mí la poesía me sale mal, tengo que trabajarla. Todo es perfeccionable, mejorable). No es una poesía cómoda ni fácil, hay que profundizar por dentro de su aparente simplicidad.


EXILIOS


tras tanto acá y allá yendo y viniendo (Francisco de Aldana)

Están aquí y allá: de paso,
en ningún lado.
Cada horizonte: donde un ascua atrae.
Podrían ir hacia cualquier fisura.
No hay brújula ni voces.

Cruzan desiertos que el bravo sol
o que la helada queman
y campos infinitos sin el límite
que los vuelve reales,
que los haría de solidez y pasto.

La mirada se acuesta como un perro,
sin siquiera el recurso de mover una cola.
La mirada se acuesta o retrocede,
se pulveriza por el aire
si nadie la devuelve.
No regresa a la sangre ni alcanza
a quien debiera.

Se disuelve, tan solo.


Ida Vitale. Arder, callar. Procura lo imposible (1998)


En sus inicios poéticos ya se plantea "lo que queda por decir o no decir", a lo que luego ha ido volviendo en toda su obra.

CANON

Ya todo ha sido dicho
y un resplandor de siglos
lo defiende del eco.
¿Cómo cantar el confuso perfume de la noche,
el otoño que crece en mi costado,
la amistad, los oficios,
el día de hoy,
hermoso y muerto para siempre,
o los pájaros calmos de los atardeceres?
¿Cómo decir de amor,
su indomable regreso cotidiano,
si a tantos, tantas veces,
han helado papeles, madrugadas?
¿Cómo encerrarlo en una cifra
nueva, extrema y mía,
bajo un nombre hasta ahora inadvertido,
y único y necesario?
Tanto haría falta la inocencia total,
como en la rosa,
que viene con su olor, sus destellos,
sus dormidos rocíos repetidos,
del centro de jardines vueltos polvo
y de nuevo innumerablemente levantados.

Ida Vitale. Palabra dada (1953)

Y 60 años después nos dice dos breves poemas sobre la pintura y la música

El sol ha vuelto.
Sólo Matisse lo supo
al notar el preciso retorno
de aquel matiz perdido
—aunque no para él—
sobre una hoja.

Sube el órgano,
nota a nota profundo,
crece su bosque
con banderas
de reflejos y sombras,
inapelable pulsa:
dichoso corazón,
nunca en la periferia:

cálido centelleo
insaciable en lo bello,
Haendel.

Ida Vitale. Vértices, vértigos. Mínimas de aguanieve (2015)


Yo conocía poco su vida y obra y la concesión del premio ha sido el motivo que me ha acercado estos días a su poesía. En A media voz tenéis una antología de sus poemas, pero esta autora requiere ir a su Poesía Reunida publicada el año pasado. Yo lo estoy haciendo, si queréis dentro de unos días compartimos experiencias, como os he dicho no es fácil, pero no os desaniméis, poco a poco los poemas se van abriendo como esas rosas que ella tanto cita.


En este vídeo Ida Vitale recita algunos  de estos poemas y habla sobre temas poéticos y literarios.



domingo, 4 de noviembre de 2018

Manuel Vázquez Montalbán, poeta

Manuel Vázquez Montalbán (Barcelona, 1939 - Bangkok 2003) es muy conocido como novelista y periodista, pero menos como poeta, que quizá es como el querría ser recordado, ya que la poesía fue muy importante en su vida. Publicó su primer poemario "La educación sentimental" en 1967 y en 1970 ya apareció como uno de los 9 novísimos en la antología de Castellet.


REFLEXIÓN MORAL SOBRE LA ANATOMÍA

Hay mujeres que hacen daño
en el pecho del que muere
                                  al contemplar
la contención exacta de su carne
                                         la refrigeración
blanda de sus cabellos limpios
y el pretexto caedizo de sus ropas

                                      otras
tienen los ojos tristes pero hermosos
o un bello lomo para un torpe frente
                                                o dos piernas
sin cansancio que musculan columnas
                                         de seguro cielo

otras sólo tienen
dos senos a punto de abrirse por su peso
de fruta para labios agostados
                                         para manos
sin otro mundo que llevarse al alma

                                               y en ocasiones
sólo un seno es hermoso sólo un hombro
sólo un vencimiento de la piel
                                        sólo los labios

pero siempre hay un hombre enamorado de tanto o de tan poco
enamorado fugaz o consecuente ama
las pequeñas patrias de una noche
                                               sin clarines
frente a unos párpados cerrados murmullos
fracasadas sintaxis

                                  respetad las plantas
y los cuerpos donde el deseo se descansa
del infinito miedo a todos los olvidos.

M. Vázquez Montalbán. 
"A la sombra de las muchachas sin flor" (1973)


VERANO Y HUMO

Ya sabemos lo que cuesta
vencer la resistencia tenaz
de dos piernas unidas
                                  el sabor
de algún aliento amargó el aire
de madrugada en nuestras fauces
y el cuerpo resultó torpe al despertar
o se quejó triste por un frío olvidado

y sin embargo
más de una vez se nos otoñizan los árboles,
brilla la calle bajo la lluvia amarilla,
damos lumbre a un paseante solitario
por el puerto
                        y silbamos una melodía
ramplona, ya tarde, cuando los veleros
mienten puertos ansiados y el aire
salino no pregunta
                                 ¿quién,
quién no teme perder la que no ama?
Nunca desayuné en Tiffany
ese licor fresa en ese vaso
Modigliani como tu garganta
                                       nunca
aunque sepa los caminos
                                      llegaré
a ese lugar del que nunca quiera
regresar

                  una fotografía, quizás
una sonrisa enorme como una ciudad
atardecida, malva el asfalto, aire
que viene del mar
                                 y el barman
nos sirve un ángel blanco, aunque
sepa los caminos nunca encontraré
esa barra infinita de Tiffany
                                           el juke-box
donde late el último Modugno ad
un attimo d'amore che mai piu ritornera...
y quizá todo sea mejor así, esperado

porque al llegar no puedes volver
a Ítaca, lejana y sola, ya no tan sola,
ya paisaje que habitas y usurpas
                                                    nunca,
nunca quiero desayunar en Tiffany, nunca
quiero llegar a Ítaca aunque sepa los caminos

lejana y sola.

Manuel Vázquez Montalbán."Una educación sentimental" (1967)


Inútil escrutar tan alto cielo
inútil cosmonauta el que no sabe
el nombre de las cosas que le ignoran
el color del dolor que no le mata

inútil cosmonauta
el que contempla estrellas
para no ver las ratas.

Manuel Vázquez Montalbán. "Pero el viajero que huye" (1990)

Aquí podéis escuchar este último poema cantado por Loquillo


He de reconocer que he sido lector devoto de las novelas de Vázquez Montalbán, pero había pasado superficialmente por su poesía, hasta que con ocasión de unas Jornadas poéticas que dedicó  la ACEC (Asociación Colegial de Escritores de Cataluña) tuve la ocasión de efectuar un recorrido por su obra que fue un grato redescubrimiento. Os aviso, que sus poemas no son de fácil lectura, por su especial, disposición, falta de puntuación y su especial ritmo; por lo que precisan de una lectura lenta y atenta para que el poema nos muestre todo su contenido.

Os dejo un enlace al Archivo de poetas de la ACEC grabado con el autor el año  de su muerte en que recita 10 de sus poemas . Aquí tenéis el primero "Conchita Piquer" , al resto accederéis por el enlace anterior.


 


No siempre los autores son los mejores lectores de sus poemas y menos cuando lo hace un rapsoda como Josep María Pou. Aquí os dejo un video de esas Jornadas poéticas de la ACEC donde Pou presentado por David Castillo recita magníficamente esos poemas y demuestra la importancia de la oralidad en la poesía.



Como siempre, mi recomendación es que acudáis a la fuente, a los libros del poeta, a través de los que se tiene una visión mucho más completa de su obra, que desde sólo unos poemas sueltos como los que os he colgado. Aquí tenéis toda su bibliografía, una reseña de su "Poesía completa" y un artículo de Manuel Rico en que habla de la poesía de Vázquez Montalbán.




domingo, 21 de octubre de 2018

Soneto encabalgado

Escribir un soneto es mucho más que trasladar al papel unos conceptos métricos, aunque también deben estar esas normas presentes. Éste, que tiene estrambote, está muy encabalgado y rompe la estructura habitual con puentes sintácticos los versos y estrofas. Además, quiere transmitir la necesidad de que haya un fondo y una forma en la obra poética. Los lectores deben decidir si lo consigue o se queda en un ejercicio de estilo.


SONETO ENCABALGADO

Escribir un soneto es más que métrica

Con sólo normas métricas, no pidas
que se escriban sonetos. Escribir
necesita mirar, oler, vivir,
tocar. Por mucho que los versos midas
y el ritmo de las sílabas oídas
sea perfecto, deberás sentir
antes en tu interior la historia; ir
liberando las cárceles vividas
para que tu palabra crezca, vuele
y se transmute en lírica; la meta-
morfosis cuyo catalizador
algunos llaman "musa" y les demuele
decir el "me abandona". Pura treta
de poeta falaz y embaucador
que ni tiene pudor,
ni reconoce que le falta raza
y de hacer poesía, ni una traza.


Ricardo Fernández Esteban ©


Aunque a primera vista no lo parezca, este es un soneto en endecasílabos con dos cuartetos, dos tercetos y un estrambote. Lo que pasa es que la mayoría de los versos están encabalgados, por lo que las frases y cláusulas sintácticas desbordan el marco del verso y se encabalgan con el siguiente. Por eso, se enmascara la estructura clásica del soneto, y hasta se ha partido entre dos versos una palabra "meta-morfosis".

El texto intenta explicar lo dicho al inicio. La métrica debe estar presente en un soneto, pero además de la forma (el ritmo poético que se crea por las acentuaciones de las palabras, la medida de los versos y las rimas) debe transmitirse una idea. En este caso, este fondo es "metapoético", o sea trata de la confección del poema y de la necesidad de que las palabras transmitan sentimientos. Esto no se consigue por arte de magia de las musas, sino por la inspiración y trabajo del autor.

Los encabalgamientos diluyen las pausas del final de los versos e incorporan sus pausas sintácticas en otros lugares. Para que esto sea posible, el poema tiene que tener otro sostén que es el metro, el ritmo de los versos y, si existe, la rima. En este caso hay ritmo acentual armónico, endecasílabos y rimas consonantes, lo que ha permitido desconfigurar los versos y estrofas del soneto. 

Por si tenéis interés en profundizar sobre los encabalgamientos, y en general sobre la métrica, os dirijo a mi libro Métrica poética del idioma español que explica con numerosos ejemplos como se forman los ritmos poéticos que distinguen a los poemas de la prosa. En el enlace anterior tenéis una amplia descripción del libro y cómo se puede adquirir.

Por último, aquí tenéis el texto del soneto escrito sin cortarlo en versos, para ver si lo reconocéis o los renglones son una condición indispensable para mantener esas leves paradas versales que deben convivir con las sintácticas

Con sólo normas métricas, no pidas que se escriban sonetos. Escribir necesita mirar, oler, vivir, tocar. Por mucho que los versos midas y el ritmo de las sílabas oídas sea perfecto, deberás sentir antes en tu interior la historia; ir liberando las cárceles vividas 
para que tu palabra crezca, vuele y se convierta en lírica. Metamorfosis, cuyo catalizador algunos llaman “musa” y les demuele decir que “me abandona”. Pura treta de poeta falaz y embaucador que ni tiene pudor, ni reconoce que le falta raza y de hacer poesía, ni una traza.