Llegan los tiempos navideños y con ellos el poema que cada año dedico a mis amigos y conocidos. No es un poema al uso, sino que intenta ser crítico y aprovechar estas fechas para hacer unas reflexiones en busca de un utópico mundo mejor. Ojalá que así sea, o así me gustaría.
POEMA (EN VERSOS) DE NAVIDAD DE 2021
¿Versos de Navidad, si uno es incrédulo?
Pues por qué no, aunque ande mal de fe,
sigo creyendo aún en la esperanza,
y en cuanto a caridad, pues combativa.
Con estos mimbres voy a hacer un cesto,
siguiendo con la moda, reciclable,
que sea tanto cubo de basura
como ofrenda de Rey o Papa Noel.
Respecto a los políticos, al cubo:
con discursos vacíos, falsedades,
sus ansias de poder, su poca ética,
el pensar hacia dentro y no hacia afuera,
el prometernos mucho y cumplir poco…;
si seguimos votando es por defecto,
porque una dictadura aún es peor;
pero he de recordar que no confíen:
ni olvido ni perdón, para los más.
Hay alguna excepción, hay esperanza
en los pocos que van de buena fe
dentro de tanto alud de populismo,
aunque sin estructura ni recursos
poco se puede hacer, salvo intentarlo.
Y en cuanto a religión, pues muchas dudas;
siempre el monoteísmo es excluyente,
y más si va de ombligo de este mundo
y arroja a los demás al fuego eterno.
Aunque ya sea un tópico el decirlo,
en el nombre de Dios se mató más
que en el de Satanás o en el de un Rey;
y si nos referimos al escándalo
de multitud de curas pederastas
y de tanto prelado encubridor,
es de vergüenza ajena que no tienen.
Dentro de este alipori, de esta farsa,
he de reconocer que hay caridad,
y que "entre tanta ganga queda mena",
personas que se entregan por los otros,
que no precisan hábito ni anillo
y cuya religión solo es amor;
para ellos es el cielo en esta tierra,
y a los que pontifican los condeno
al cubo que ellos llaman purgatorio.
Y qué decir de los nacionalismos,
no son malos “per se”, pero en la práctica
muchos acaban en supremacistas.
Recelo de los pueblos excluyentes
y más de quienes hablan en su nombre
y levantan fronteras con la lengua;
el idioma es un medio de diálogo
y nunca debe ser una herramienta
de separar personas y culturas.
Ya lo dijo John Lennon: “Imagina
un mundo sin países, no es difícil”
Al cubo pues con quienes dicen “pueblo”
y piensan en ventajas para ellos.
Y quedamos nosotros, no creáis
que “vamos de rositas” sin pecado.
Al mirar a otro lado, al consentir,
somos reos de culpa, hay que luchar.
Ya lo dijo el filósofo, tenemos
-aquí que hay libertad- a los políticos
que merecemos o, lo que es peor,
a los, o las, que más se nos parecen.
Y en cuanto a religión, no es suficiente
decir que eres agnóstico o ateo,
o que las diferencias culturales
justifican las prácticas de quien
en el nombre de dios humilla al hombre,
y donde digo hombre digo humano,
sin distinción de género o deseo.
De los nacionalismos, en mi tierra,
sabemos demasiado, o sea que “al loro”
mira a tu alrededor y sé sincero:
es buena cosa amor por el terruño
y muy malo es el ser supremacista.
Ahora haz examen de conciencia
y juzga si mereces el regalo
o caer en el cubo de basura.
Advertimos estamos, Navidad,
puede ser una excusa, reflexiona
si estás actuando bien como persona,
en cuanto a fe, esperanza y caridad.
Nuestra tribu se llama humanidad
y no pienso en virtudes teologales,
sino en acciones mucho más reales
que conduzcan a mejorar la vida,
pues lo que haya después de la partida
no es tema de estos versos personales.
Ricardo Fernández Esteban (XII-2021) ©
Aunque piense que la Navidad ha perdido su espíritu de paz y de busca de mejora de la humanidad (si es que los tuvo alguna vez), he de reconocer que estas fiestas sirven para compartir buenos momentos y deseos con familia y amigos. Por eso, os propongo un brindis:
Brindemos por nosotros, por la gente querida,
por familia y amigos, por los que ya no están,
por los desconocidos, por los que no vendrán
y porque la utopía haga mejor la vida.
Feliz Navidad y que nuestro mejor regalo sea que el próximo año desaparezca esta pandemia que nos asola y que nos impide disfrutar plenamente de estas fiestas.
Gracias, Ricardo, feliz Navidad.
ResponderEliminarFrancesc Cornadó
Ricard, tot el poema és una declaració de principis i com a tals són bons per a tothom. Com ja saps no estic d’acord amb la teva opinió sobre el tractament de la llengua, no sóc supremacista ni excluient només vull que no es perdi el dret d’ensenyar el català a tothom que vingui a estudiar aquí. El castellà l’aprendran sense cap esfors com ens va passar a tots nosaltres. La feina va ser aprendre el català, jo el vaig estudiar després de jubilar-me.
ResponderEliminarFelicitats per el bon ofici que tens per escriure i expresar les teves idees.
Francesc, no estic parlant en absolut del dret a ensenyar el català a les persones que estudien a Catalunya, que el tenen, sinó de tot el contrari, del dret a rebre una part de l'ensenyament en castellà a totes les persones que estudien a Catalunya, en especial a les que ho tenen com a idioma matern que són moltes. Avui dia la llei exigeix que aquest percentatge de castellà sigui d'un mínim del 25% i això no es compleix. L'actitud de la Generalitat és similar a la del govern franquista en l'època dura i no permet, o dificulta tot el possible, l'ensenyament en castellà i s'intenta obligar als nens petits castellà parlants a que utilitzin sempre el català. En això estan incomplint, a més de les lleis, les recomanacions de la UNESCO sobre ensenyament en llengües maternes i el que ells mateixos defensaven per als catalanoparlants fa anys. El cas recent de Canet de Mar frega actituds feixistes i no hi ha dret la pressió que s'està exercint contra una família i un nen de 5 anys.
ResponderEliminarLa utilització política de la llengua és clara i jo com a lingüista i progressista no puc estar d'acord amb això, ja que les llengües han de servir per a comunicar-nos i no per a separar-nos.
Una abraçada
Para los que no entendéis el catalán y para que los idiomas no sean una barrera sino una forma de comunicación, os traduzco el comentario anterior. Mi amigo Francesc, dice que no está de acuerdo sobre mi opinión sobre el tratamiento de la lengua y defiende el derecho a enseñar el catalán a todos los que vengan a estudiar a Cataluña. Yo le respondo:
ResponderEliminar“Francesc, no estoy hablando en absoluto del derecho a enseñar el catalán a las que personas que estudian en Cataluña, que lo tienen, sino de todo lo contrario, del derecho a recibir una parte de la enseñanza en castellano a todas las personas que estudian en Cataluña en especial a las que lo tienen como idioma materno, que son muchas. Hoy día la ley exige que ese porcentaje de castellano sea de un mínimo del 25% y eso no se cumple. La actitud de la Generalitat es similar a la del gobierno franquista en la época dura y no permite, o dificulta todo lo posible, la enseñanza en castellano, y se intenta obligar a los niños pequeños castellano hablantes a que utilicen siempre el catalán. En eso están incumpliendo, además de las leyes, las recomendaciones de la UNESCO sobre enseñanza en lenguas maternas y lo que ellos mismos defendían para los catalanohablantes hace años. El caso reciente de Canet de Mar roza actitudes fascistas y no hay derecho la presión que se está ejerciendo contra una familia y un niño de 5 años. La utilización política de la lengua está clara y yo como lingüista y progresista no puedo estar de acuerdo con ello, ya que las lenguas deben servir para comunicarnos y no para separarnos.”
Feliz Navidad
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