viernes, 20 de junio de 2014

Anatema contra el mal versolibrismo

Este poema acaba con un anatema de expulsión del Parnaso de los malos versolibristas que creen que todo vale en un poema, ya que defiende que es indispensable conocer las normas métricas y sintácticas para saltárselas. Antes da un poco de doctrina, sin querer ser dogmático, a la espera de réplicas a favor o en contra, porque de la discusión surge el pacto.

El Parnaso. Nicholas Poussin. Museo del Prado

ANATEMA CONTRA EL MAL VERSOLIBRISMO

Aquí el autor, en el comunicado,
revindica la libertad del verso,
la métrica es muy amplia, un universo
de estructuras de armónico rimado.
Desde la que es más simple, el pareado,
a la altiva sextina todo cabe
si se etiqueta bien. Como se sabe,
es básico no dar gato por liebre,
que el ritmo del poema nunca quiebre
y que la rima en ripio no se trabe.

Mas dije libertad
que no libertinaje o anarquía,
pues algunos le llaman poesía
a la prosa cortada de mala calidad.
Decidme o no, si os digo la verdad:
El nuevo catecismo
de gente que no sabe es el versolibrismo.
Si algún pintor moderno prescindió
de su época de escuela, no creó
con alma un cuadro abstracto; pues versando es lo mismo.
 
Para romper las normas,
saberlas dominar es necesario,
ya que para vencer al adversario
debes primero trabajar según sus hormas.
La métrica y sintaxis, profundas plataformas,
siempre subyacen, reinan, por mucho que el poema
aparente engañarlas. Anatema
proclamo contra quienes sin entender de nada
quieren darnos lecciones de libertad errada:
¡Echarlos del Parnaso!, ha de ser nuestro lema.


Ricardo Fernández Esteban ©

Nota técnica: Las estrofas anteriores son décimas y la normativa recomienda un punto tras el cuarto verso, y que esa primera parte sea la exposición y los otros seis versos la explicación. La primera décima es de endecasílabos y las otras dos son polimétricas de endecas, heptasílabos, alejandrinos y hasta un tetradecasílabo de 9+5 (o tridecasílabo 4,8,10,12). Esta mezcla de estructuras de longitud silábica impar suele combinar bien rítmicamente y utilizo algunos encabalgamientos sintácticos entre versos para disminuir la consonancia versal.


Espero que no consideréis bíblico este Anatema, ni mucho menos dogmático. Sólo es mi opinión ante lo que algunos llaman verso libre y yo llamo prosa poética, y a veces ni eso, ni poética y ni siquiera prosa, sino un mal escrito separado en renglones. Lo que no quiere decir que no haya buenos versos libres, que los hay y muchos, pero en general sus autores han tenido escuela métrica y sintáctica, como la tienen de dibujo al natural y perspectiva los buenos pintores abstractos, y de danza clásica los bailarines de contemporáneo. 

Repito lo que dije inicialmente, para saltarse las normas hay que conocerlas, porque así se hace con consciencia, y no al tun tun, y siempre suele quedar un subyacente rítmico en el poema. Pero, como de dogmas nada, espero réplicas a favor, en contra o en otras direcciones, ya que uno no tiene nada que ver con la última imagen que os dejo.


Y ya que he hablado de métrica, de verso libre y de saltarse las normas, podéis consultar mi tratado "Métrica poética del idioma español" que lo explica de una forma sencilla, pero rigurosa. Aquí os dejo una sinopsis del libro


28 comentarios:

Francesc Cornadó dijo...

Ricardo, la belleza está regida por un orden riguroso. No todo es válido, no podemos decir que un sonido es música si no cumple un orden armónico y no podemos decir que una obra plástica es arte si no obedece a unas leyes de proporción, además todo esto podemos llegarlo a expresar matemáticamente. Puede ocurrir que un autor para favorecer la expresión se valga de licencias de ruptura, sí, pero debe conocer como es el objeto artístico antes de ser roto. Soy de la opinión que la ruptura en el arte atiende más a la expresión individual del artista que a la búsqueda de belleza "strictu sensu". No podemos proyectar un edificio bello si no sabemos dibujar, no podemos componer una sinfonía sin conocer las reglas de composición. No son tolerables escritos con faltas sintácticas e incluso ortográficas que se publican con el nombre de poemas.
Saludos

Sintagma in Blue dijo...

Buena poesía o mala poesía, ésa es la cuestión; que esté rimada o no, no tiene la menor importancia.

Augusto J. R. dijo...

Poesía elaborada sin rimas
es poesía de escasas miras.
Poesía carente de métrica
suena como ser herética.
Pero poema falto de ritmo
en poesía no tiene destino.

ÁNgel dijo...

Vaya matraca tienes. La poesía nada tiene que ver con el verso, la rima, el metro, el ritmo o la cadencia. Otra cosa es que gusten las palabras bonitas, rimadas, ritmadas, libres o anárquicas.
La poesía es otra cosa. Según Bécquer, es "esa aspiración melancólica y vaga que agita tu espíritu con el deseo de una perfección imposible"
Lo dice en Cartas literarias a una mujer. No te hagas más líos de si rimas o mides o ritmas.
La poesía es puro sentimiento. Los versos solo son la quincalla de la poesía, pero tú sigue.
Un abrazo,
Ángel

Enrique Gracia Trinidad dijo...

Querido Ricardo. Estoy, como sabes, de acuerdo contigo hasta no poder más. El versolibrismo es muchas veces el refugio de la ignorancia o la indolencia. Cierto que puede haber buena poesía con y sin rima, con o sin métrica reconocible, escandida, en prosa, a caja o como se quiera. Pero tienes razón. Estoy harto de ver mala poesía (o nada de poesía) amparada en la libertad de hacer lo que se quiera porque en el fondo se desconocen las herramientas del oficio.
Lo que por otro lado no garantiza que una buena estructura formal asegure un buen poema.
Hemos debatido tanto sobre esto que casi cansa. Pero hay que insistir para concienciar a los colegas despistados. Eso sí, como bien dices, sin dogmatismos academicistas que son la otra cara de la moneda de la mala literatura. Mi admiración.

Ricardo Fernández dijo...

Pues veo que la entrada merece comentarios y eso siempre es bueno estén a favor o en contra.

Francesc y Enrique, estoy de acuerdo absolutamente con lo que decís y gracias por decirlo mejor que yo.

Pura, estoy de acuerdo contigo en que lo que importa no es "con o sin rima" sino la buena poesía. Y aún te diría más, en el siglo XXI tenemos que reservar la rima para un tipo específico de poesía. De eso ya hablaré otro día. Lo que pasa es que hay que intentar dar alguna pista sobre lo que es buena poesía, ya que si no todo vale en este mundo poético, y aunque hay mucha subjetividad algunas pistas si se pueden dar.

Besos y abrazos

Abrazos y besos

Ricardo Fernández dijo...

Ángel, esta vez no estoy de acurdo contigo. Algo si que tiene que ver la poesía con el ritmo y la cadencia de lo que se escribe.

La poesía abarca mucho más que ese "puro sentimiento" que tú indicas. La poesía también puede ser épica, satírica, irónica, gnómica, etc.

Y luego tendríamos que distinguir entre poesía y prosa poética.

Un día lo comentamos con un café por en medio.

Un abrazo

Ricardo Fernández dijo...

Augusto, tu poema nos puede servir para encontrar fallos de ritmo:

Poesía elaborada sin rimas (11 dactílico)
es poesía de escasas miras. (10)
Poesía carente de métrica (10)
suena como ser herética. (8)
Pero poema falto de ritmo (10)
en poesía no tiene destino. (11 dactílico)

Por esas distintas longitudes métricas el poema pierde ritmo. Léelo en voz alta y lo comprobarás. Un abrazo

Ricardo Fernández dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
AT dijo...

Como dice Pura Salceda: "Buena poesía o mala poesía, ésa es la cuestión; que esté rimada o no, no tiene la menor importancia."

Hay muchos poetas que dominan el arte métrica, etc., y han llenado los estantes con libros de poesía horrorosa. También con el verso libre se han cometido muchos desastres poéticos. De todos modos, creo que en la poesía moderna (desde Walt Whitman y Rimbaud hasta Ezra Pound y T.S. Eliot, por no citar más nombres) es más importante el ritmo y el sentido musical de la palabra, que no la rima estricta, dogmática, gastada por el uso, más propia de los tiempos de antaño, cuando la rima era más fresca y tenía una función mnemotécnica entre los bardos y juglares. Sentido musical de la palabra, poéticamente necesaria, y no artificiosidad de la palabra impuesta por la rima, a menudo innecesaria. Por supuesto, también hay grandes poetas que han escrito poemas en prosa y en verso rimado, como Baudelaire, Rimbaud, Neruda, Vallejo, Cernuda, J.V. Foix, Brossa, etc.

Anónimo dijo...

Perdón, pues supongo que es una errata. "Más dije libertad..."
Ese "más" es sin acento, porque
está claro que quiere decir "pero
dije libertad.."

Ricardo Fernández dijo...

Cierto, ese "mas" es sin acento, porque tiene el mismo significado que la conjunción adversativa "pero". Gracias por avisarme, nadie está libre de culpa ni quien pretende dar doctrina.

Un anónimo abrazo.

julioverne dijo...

Muy de acuerdo. La belleza tiene que ver con la simetría, y si no se tiene este don puede suplirse con el humor, el ingenio o la estructura, pero el verso libre debe tener alguna gracia. En México tenemos un gran escritor que es un mal y rimbombante poeta, pero lo adoran, se llamó Octavio Paz, en cambio hay otro sencillo pero divertido y menos apreciado, Efraín Huerta

Ricardo Fernández dijo...

José Ruiz me envía este comentario para que lo publique:

Siempre leo tu poesía, y me gusta. Tienes un especial don para versificar; felicitaciones. En especial me ha encantado esta sobre el versolibrismo.
Me es muy difícil entender y comprender la poesía en verso libre. Me encantan algunas por sus ideas y su ritmo; otras son, para mí, sólo prosa. Pero también me pasa algo parecido con otras representaciones artísticas.
Cuando se llega al máximo, a la cumbre, sólo queda descender, es imposible ir más arriba. Cuando se llega a lo "perfecto" (si lo hay) hay que girar página y hacer arte con otras formas, pero sin cambiar la “constitución” de la poesía que es sagrada; ¿se deben crear otras nuevas métricas, y ser su creador? Es más fácil pasarse al bando de los que piensan y deciden “¡Yo hago lo que me da la gana!”.
Recuerdo siempre aquel cuento del rey que le gustaba vestir ricas telas y halló al fin una tan tenue que le encantó; le gustó tanto que mandó a su sastre hacer con ella un regio vestido. Cuando desfiló con su nuevo traje, sus cortesanos, para no parecer necios en la corte, aplaudieron la suntuosidad de aquella ropa, su caída. Sólo un niño, con la mente virgen, exclamó: ¡Pero si va desnudo, si no lleva nada!"
No se puede conducir un auto siempre en línea recta por la existencia de innumerables y desiguales curvas, y deben ser respetadas. Está prohibido circular por el arcén, circular siempre al margen.
Un cordial saludo, José

José Luis Giménez dijo...

¡Qué tontería, escribir para nadie!

A cualquier cosa llaman poema…
sólo por escribir en verso, o exponer una intención…
por exaltar los valores, vehementemente con su razón.

Se sienten identificados, reconocen la afinidad…
de una historia que, las mejores de las veces,
no ha pasado, no pasa, ni pasará.

Qué iluso el pobre poeta,
que piensa con ilusión…
que sus pocas, o muchas letras,
llegarán al corazón.

La realidad es bien distinta,
diferente, si se prefiere diferenciar.
Lo que realmente interesa,
es pavonearse y, si acaso,
impactar, y conseguir rimar.

Ya no importa el mensaje,
ni si el estilo es lenguaraz…
lo importante es que “pegue”,
que esté de moda, actual.

¡Qué pena tengo más grande…!
Yo que quería comunicar…
compartir mis inquietudes…
con los que quisieran escuchar.

Pero pronto te das cuenta,
que ya nada es igual,
la gente no se para en la calle,
ni para hablar, ni saludar.

Llegados a este momento,
te empiezas a plantear…
si escribir te recompensa,
el compartir con plenitud,
tus mayores intimidades,
tus ilusiones o tu inquietud.

¡Qué tontería, escribir para nadie!
Sentimientos, que sólo sientes tú.

© José Luis Giménez
www.jlgimenez.es

José Antonio Fernández dijo...

Sin ninguna duda la poesía debe de tener su ritmo. No se puede ir cortando el poema con tijeras como a uno se le antoje. Hay poemas que requieren un ritmo más acusado, y eso solo se consigue ateniéndonos a la forma clásica de contar sílabas. Eso consigue un efecto tal vez demasiado lírico para algunos lectores. El ritmo también lo pone el lector con su modo de leer...

Anónimo dijo...

No sé si saben vuesas mercedes que Don Rafael Alberti renunció a su sillón de académico porque, decía él, escribía con faltas de ortografía. Les puedo asegurar que la mayoría de los poetas (algunos muy buenos) no saben teoría métrica, qué es una cesura, un hemistiquio, cómo se escanden los versos, etc. Lo pueden poner en práctica pero no lo saben. En cuanto a definiciones de poesía, no me bastaría un libro para exponer tantas y distintas como han expuesto poetas y críticos. Y eso de que hay que saber escribir un soneto antes de escribir un poema en verso libre, es como decirme que hay que saber hacer fuego frotando dos trozos de madera antes que permitirse encender una cerilla. Además de que hay sonetos para tirarlos a la basura y poemas de verso libre magníficos. Y no me extiendo más, aunque mucho más podría extenderme. Saludos

Ricardo Fernández dijo...

Anónimo compañero, esta merced sabe que hay quien puede escribir un buen soneto sin saber ortografía ni métrica,pero sí que hay que tener oído musical para hacerlo, porque la armonía es la base de la poesía.
Por eso igual que algunos buenos músicos tocan de oído y ni siquiera saben leer el pentagrama, algunos pueden hacer buenos poemas sin saber métrica, pero la mayoría es conveniente que tengan nociones técnicas para que sus versos sean armónicos. El poeta nace y se hace leyendo mucho a los buenos poetas y conociendo los porqués del ritmo.
En lo del soneto me reafirmo. Hay que conocer las normas para poder saltárselas. Respecto a cerilla, no acabo de entender la comparación, pero poco mérito tiene encenderla y mucho oficio hacer fuego con dos palos.
Estoy de acuerdo en que hay malos sonetos y buenos versos libres, pero yo hablo de verso con ritmo y estoy cansado de leer cosas que se llaman verso libre y no son más que mala prosa cortada a renglones.
De cualquier forma, aunque parece que discrepemos, sé que hablando nos entenderíamos perfectamente. Un abrazo

Yhedra Yhomisma dijo...

Pones en práctica en este poema lo que predicas: hay que conocer las normas para poder saltârselas, pero que a modo...con la estructura de décima le vas cambiando el ritmo cômo y cuándo te da la gana. No puedo hacer otra cosa que darte la razón, el poeta nace y se hace, seguramente muchos de nosotros escribimos nuestro primer poema de oído , reproduciendo el ritmo de alguno que habíamos leído, pero por pura lógica, si el gusanillo poético nos duró más allá del primer sarpullido adolescente, lo normal es sentir una cierta curiosidad, leer y formarse, creo que quienes dicen que escriben poesía como les sale y que para eso no necesitsn aprender nada , muestran muy poco respeto por aquello que dicen amar. Indudablemente la poesía trasciende el metro y la rima , puede haber , hay, poemas excelentes que carecen de ellos, sobre todo la rima a mí no me hace demasiada falta , el ritmo es otra cosa....siempre dicho que si bien no es imprescindible en el poema, nunca he leído ninguno al que uuna métrica adecuada le estorbase...igualmente se puede encontrar poesía pura en muchísimas prosas poéticas, si digo Tagore, creo que no hace falta añadir más....aunque en muchas de estas, al menos en las que yo he leído en castellano, si se leen bien, encuentras escondido el ritmo, solo que el autor ha prescindido de versos y estrofas y ha preferido escribirlo en renglones seguidos. Hay mucha confusión respecto al verso libre y bajo la excusa de escribirlo se cometen trpelías inenarrables y en los últimos años con el nacimiento de la red encima se difunden sin límites. También ha ayudado en esta confusión el hecho de la difusión de traducciones de poetas extranjeros, pues en ellas es imposible respetar a la vez el sentido del poema y la métrica y la rima, primando el primero en detrimento de lss segundas, algo que ha mi me parece correcto, pero que ha inducido a algunos a pensar que carecían de ellas , siendo falso, Rimbaud y Bodelaire, por ejemplo escribieron con una musicalidad endiablada y una perfecta rima muchos de suss poemas y lo mismo ocurre con algunos poetas ingleses.Así es que luego nosotros, pues mâs papistas que el Papa, ala , escribimos li primero quee se nos pasa por la cabeza, lo presentamos cortándolo en líneas por donde nos da la gana y yastá, ya hemos escrito un poema...La priimera vez que escribí de este tema en las redes , un romance, hará unos 15 años, me llovieron palos por todas partes, hay que ver cómo se resiste el personal, se ve que es muy fuerte la necesidad que sentimos muchos de sentirnos excelsos poetas y muy poco el esfuerzo que estamos dispuestos a realizar para conseguirlo.Desaprender, esa es la clave de cualquier actividad humana que se quiera realizar con una aceptable solvencia, sea tocar el piano o hacer botijos, perovpara eso primero hay que aprender,doce años necesita un alfarero para saber' tocar" el barro , lo mismo que para dominar el piano, diez mil horas son precisas para hacerse con cualquier oficio y solo desde ahí se puedo uno permitir el lujo de olvidar todo lo aprendido y dejarse llevar por la inpiración cuando esta llegue, teniendo la seguridad de que todas las herramientas del oficio ya se han automatizado, se han interiorizado de manera que están presentes sin hacerse notar, sin pensar en ellas, pero impregnando todo el proceso.Siempre se ha dicho, el secreto de un buen trabajo, 10% de inpiración y 90% de transpiración. La poesía , por más que es un arte que se basa fundamentalmente en la inspiración, no es una excepción en esto , que cuando esa inspiracion llegue te encuentre bien " trabajado".Pues eso...Ya ves que este tema " me puede
" jajaja!!Besos

Ricardo Fernández dijo...

Ainaroa, lo explicas bien y con detalle. Mucha gente se cree que puede escribir prosa (buena o mala), cortarla en renglones y por arte de magia se convierte en un poesía, olvidando que el ritmo es imprescindible en un poema.

En este ejemplo, juego con una construcción polimétrica pero de versos acordes rítmicamente entre sí, ya que todos son de los que yo llamo de estructura impar (heptas, endecas, alejandrinos y hasta un trideca ternario). Luego añado algunos encabalgamientos sintácticos para quitar sonoridad a las consonancias versales.

Un abrazo

Yanka dijo...

Nicanor Parra, el poeta que desborda los límites de la poesía, el autor que convierte en poesía todo lo que toca y encuentra hasta en las postales un buen lugar para insuflarle vida a las palabras.
Parra ha derribado los tabúes que hicieron de la poesía el corralito de las vacas gordas y sagradas. "En poesía se permite todo", dijo, porque con él importa el cómo, no el qué, porque siempre ha sido crítico con la poesía hermética, porque con él se inicia el reinado de la antipoesía y acaba la larga y profunda sombra de los cánones de su compatriota y coetáneo Pablo Neruda (1904-1973), cuando parecía que todo lo que rimase debía estar hecho a imagen y semejanza del autor de Veinte poemas de amor y una canción desesperada. Curiosamente, la consagración de la antipoesía llegaría con el propio Neruda, cuando en 1952 capitula y asume el triunfo del rodillo imparable de Parra.
Parra ha devuelto la poesía al lugar que le había "usurpado la retórica y la academia"
Este es Nicanor Parra: el poeta que desmitificó a los poetas. ¿Lo primero? La negación de la autoridad. ¿Cómo? Dignificando el papel del humor en la poesía. "Durante medio siglo / la poesía fue / el paraíso del tonto solemne hasta que vine yo y me instalé con mi montaña rusa", escribe.
Él ha sido, incluso, uno de los primeros poetas ecologistas de la lengua, con sus ecopoemas: "Ni socialista ni capitalista / sino todo lo contrario: / ecologista". El primer disparo de desfachatez lo pega en 1954, con su segundo libro Poemas y antipoemas, con el que ya provoca un corte radical. Aparece la antipoesía: "No hay definición redonda para el triángulo. Podría ser la revelación de la zona invisible de la realidad, el nuevo significado de las cosas a la luz de la poesía", explica el poeta Juan Carlos Mestre, premio Nacional de Poesía 2009.
"En términos de física cuántica, Nicanor Parra es un accidente congelado de la literatura en castellano. Esos son los accidentes que determinan el curso de la historia. En pocos casos a la lengua de Cervantes se le ha dado la vuelta como a un traje usado. Parra es esencialmente la desobediencia y el discurso lúcido contra algo más que el poder, contra el aburrimiento", añade Mestre, para señalar que Parra ha devuelto la poesía al lugar que le había "usurpado la retórica y la academia".
García Valdés: "Nadie, después de Rubén Darío, ha puesto tanto peso en la lengua"
Un hereje de este calado no podía escapar de las críticas. Estaba, con su espontaneidad e inconsciencia, logrando desenmascarar el discurso atrofiado de la solemnidad. Pero Parra ya caminaba "libre de la virtuosidad" y al margen de las críticas, había cambiado a Lorca por Whitman en 1938 y heredó del norteamericano el versolibrismo, el lenguaje antipreciosista, el interés por la poesía narrativa. Hasta que se dio cuenta de que Whitman no tenía humor, que le faltaba ese distanciamiento irónico que haría de Parra un autor... un antiautor. "Entonces me bajé del carro", reconoció.
"Alguien que inventa la poesía es alguien antirrespetuoso con las convenciones. La figura de Parra fue irreverente. Su propuesta tiene un paralelismo, en los grandes temas del ser humano, con artes más avanzadas que la literatura", se refiere el poeta José María Parreño a sus vínculos con las artes plásticas. Concretamente, con su serie de los Artefactos, de 1972 (una caja de 200 postales con la que decía definitivamente adiós al lirismo). Parreño destaca su capacidad para la ironía, la poesía fronteriza con el chiste y la gamberrada. "En algún sentido podría tener que ver con los ejercicios de Joan Brossa. Pero la poesía española es especialmente seria y académica, asentada en el sentimiento desgarrado y dramática", explica. http://www.publico.es/culturas/poeta-libero-poesia.html

Yanka dijo...

Que cada palabra lleve lo que dice.
Que sea como el temblor que la sostiene.
Que se mantenga como un latido.

No he de proferir adornada falsedad ni poner tinta
dudosa ni añadir
brillos a lo que es.
Esto me obliga a oírme. Pero estamos aquí para decir
verdad. Seamos reales.
Quiero exactitudes aterradoras.
Tiemblo cuando creo que me falsifico. Debo llevar en
peso mis palabras. Me poseen tanto como yo a ellas.

Si no veo bien, dime tú, tú que me conoces, mi
mentira, señálame la impostura, restriégame la estafa.
Te lo agradeceré, en serio.
Enloquezco por corresponderme.
Sé mi ojo, espérame en la noche y divísame, escrútame,
sacúdeme.

Rafael Cadenas Ars poética (De Intemperie – 1977)

Ricardo Fernández dijo...

Juan Carlos, como digo en mi entrada, huyo de los dogmatismos y sólo pretendo clarificar un poco el amplio mundo poético que vive bajo esa genérica palabra que llamamos poesía. No lo voy a poder hacer en una entrada, ya que sería preciso todo un ensayo. Sólo unos apuntes.

Para mí, hay que distinguir entre poesía y prosa, y la prosa también puede tener contenido poético, o quizás sería mejor decir lírico, ya que uno de los errores es creer que toda la poesía debe ser lírica. Esa prosa lírica, o yendo más allá, esa prosa que adorna las palabras con imágenes, y figuras retóricas poéticas, podemos denominarla "prosa poética" y ese nombre no desmerece nada al contenido.

En lo que yo estoy en contra es en el partir la prosa, sea poética o no, en renglones y decir que son versos. Una condición indispensable del verso, tal cono dijo Octavio Paz y la mayor parte de los tratadistas es el ritmo, y otra la pausa versal. Sin ritmo y sin pausa no hay verso, hay prosa cortada, que puede ser muy buena prosa poética, pero a la que esos cortes no favorece en nada.

La mejor prueba es recitar un poema. La poesía nació oral y en la oralidad se nos muestra en su mejor rostro. Ahí descubrimos lo innecesario o equivocado de muchos renglones, cuyo único objeto es la estética y no la poética.

En el ejemplo de Cadenas, la primera estrofa tiene un buen ritmo de versos pares (dos dodecas y un deca). La división entre el verso 4º y 5º es equivocada.Yo diría:
No he de proferir /adornada falsedad // ni poner tinta dudosa / ni añadir // brillos a lo que es.
Así es como debe recitarse y ¡mira por donde! todos esos versos o hemistiquios son de longitud par y armónicos. Esos nos demuestra la armonía de su composición y que los cortes versales están mal distribuidos:

Saludos

Anónimo dijo...

Ricardo Fernández, sin duda alguna se las trae jajaja. Si bien no estoy de acuerdo en algunas cosas que se dicen, en otras, le doy mi parecer y respeto. "partir la prosa", es como cortar el aliento a una persona, y lo digo sin tener idea ni estudio de aquellas técnicas que en viejos tiempos, me imagino eran un lenguaje esencial para los poetas. Lo digo, porque en el humilde camino que he emprendido tratando de crear poesía, hecho de menos aquellas herramientas de las que habla.
Saludos y mis respetos

Erico Iturra
Un hombre en busca de la poesía

Ricardo Fernández dijo...

Erico, ¿qué herramientas echas de menos para escribir poesía? No digo para crear, porque en la creación está el aliento poético por encima de las herramientas, pero para escribir hay unas herramientas que son las que ayudan a mantener el ritmo de un poema y a cortarlo por donde toca. Esas herramientas se basan en unas estructuras métricas y acentuales, más o menos rígidas, pero que siempre subyacen en el fondo de un buen poema, sea versolibrista o no lo sea.

Es cierto que en la frontera entre la poesía y la prosa hay composiciones libres de ritmo pero muy ricas en imágenes poéticas. Más allá de esa frontera entramos en el mundo de la prosa, sea poética o no.

Cuando digo "partir la prosa" me refiera a aquellos que piensan que partiendo un texto en trozos ya tienen un poema.

Saludos

GRANADA SANDOVAL. dijo...

Acabo de recibir este enlace de tu Blog y me ha parecido interesante este debate que abres.
En mi opinión es necesario poner de vez en cuando algo así, es como dar un toque de atención a ese aluvión de "poetas" que se van otorgando galardones como el "Magic Andreu" sin tener noción de métrica ritmo o musicalidad.
Estoy totalmente de acuerdo contigo en eso de que hay quien piensa que "partiendo" la prosa se edifica un poema, creo que ya era hora de que alguien levantara la voz para decir que para el buen versar hace falta una preparación.
Es verdad que la expresión de la palabra y el sentimiento tiene la libre forma de decir de cada cual, verdad que nadie estamos lo suficientemente preparados para juzgar a nadie, pero si que es bueno "pinchar" un poco a esos que se escudan tras el plagio y la ignorancia para hacer "refritos" de versos ajenos y golpes de palabrería llamándose a si mismos poeta sin ningún pudor, pienso que Juan Ramón Jiménez tenía toda la razón cuando hacía aquellas críticas tan duras sobre estos "espontáneos" que saltan al ruedo sin respeto alguno atribuyéndose honores a diestro y siniestro.
Son respetables todo lo que hacen esta avalancha de escribientes que pululan por la red, pero ellos también deben preocuparse de respetar las normas en la escritura, y sobre todo ser humildes y legales,y sobre todo prepararse antes de colgar lo que escriben.
He leído los comentarios que te hacen sobre esto y tus contestaciones y me han parecido extraordinarias,mi enhorabuena a todos porque de todo se aprende.
Un abrazo amigo Ricardo Fernández, leerte siempre es un placer educativo.

Ricardo Fernández dijo...

Esperanza, se puede decir más alto pero no más claro. Estoy de acuerdo contigo, ya que muchos creen que cortando la prosa en renglones ya sale un verso, y lo de los contenidos sería otra batalla, esa ya más subjetiva, porque gustos los hay muchos aunque yo tenga el mío.

Un abrazo

Azpeitia poeta y escritor dijo...

No necesito gafas especiales para saber quién es poeta o no, escriba como escriba....lo que no son poetas escriben y no me enfado, ese es su problema....también hay puristas que su sonetos suenan como una carreta vieja...etcétera Sería interminable y sé que me entendéis perfectamente, yo escribí mi primer conjunto de versos sin más, cuando no me llegaban los pies al suelo en el pupitre del colegio....un abrazo a todos -azpeitia -