Conocí a Fernando de Orbaneja en 2011 en la feria del libro de Madrid ya que compartíamos editor y caseta. Tenía ochenta y muchos años, las ideas muy claras sobre política, sociedad y religión y seguía luchando para cambiar y mejorar este mundo. Conversamos largamente, y a partir de entonces nos intercambiamos escritos, libros y opiniones. Se podía estar de acuerdo con él (en la mayoría de las cosas lo estaba) o no, pero siempre se tenía que reconocer su fuerza e interés por dignificar la vida y la política.
El 20 de junio de 2016 falleció en Madrid, justo después de depositar su voto a los 92 años. Aunque me apena mucho su desaparición, creo fue que en un momento muy significativo y con todo el respeto podemos decir que "murió con el voto depositado" y con la esperanza de cambiar el mundo.
En 2014 se le concedió el premio de pensamiento y ensayo "Aristóteles" y unos 200 amigos le homenajeamos. Este es el soneto que le dedique:
Fernando, recibiendo el premio en 2014. Foto: Daniel de la Fuente
Sé que descansa en paz con la conciencia tranquila de haber luchado hasta el final. Este fue el último articulo que publicó pocos días antes de fallecer sobre el estado del bienestar en el Magacín.com y en esta entrada, Fernando de Orbaneja nos ha dejado , esta web nos habla sobre Fernando, sus libros y los artículos que publicó.
Aquí podéis ver una reseña que publicó El País cuando publicó su libro "Opus Dei: la Santa coacción" en 2007. Y esta es su entrada en wikipedia con su biografía y obra. Aquí lo podéis ver en una entrevista en 2010 sobre su libro "España. El miedo a la verdad"
Ya no podemos contar con la presencia de Fernando, que tanto agradecí, pero sus ideas y sus deseos de mejora del mundo permanecen en sus libros.
La poeta Montserrat Doucet (Madrid, 1962) comenzó a publicar en este siglo ya que Culpable de Milagros (2001) fue su primer libro de poemas. En estos años nos ha entregado varios más que muestran la profundidad de su palabra poética. Comencemos con uno de los poemas de ese primer libro:
JIRÓN DE NOCHE
Asomada en las tardes al laberinto blanco de la ciudad de arena, mi dolor se deshace en pequeñas estrellas sentenciadas que harán aún más honda la noche. Y me pregunto, hiriendo los silencios, si cada estrella antigua que persuade mis pasos tan sólo es eso: un jirón dolorido de Dios asomado al espejo de arena de la noche. Montserrat Doucet. Culpable de milagros (2001)
Este otro poema da título a otro libro que, además, contiene una antología de otros poemarios.
ARQUITECTURA ENTRE LOS CAMPOS
Traté de recordar
cómo era antes la lluvia,
cuando los besos eran sólo
una punta de humedad entre el tabaco,
cuando los parques eran un esbozo
de arquitectura entre los campos.
Trate de recordar el mundo,
nuestro mundo ajeno
al llanto de las selvas,
al sueño curvado del arco iris,
al lento laberinto de los caracoles,
al gozo de la muerte.
Y tan sólo encontré
esa larga humedad
en el viento y sus moldes
que vaticinan la noche y sus nieblas.
Montserrat Doucet. Arquitectura entre los campos (2008)
En este enlace podéis encontras una mplia reseña de otro de sus libros "Mar de la China" de 2014
Por último uno de sus haikus:
Rumor de hojas:
el miedo tiene voz
bajo la lluvia.
ADENDA DE AGOSTO 2023:
A partir de 2014 es difícil seguir la trayectoria literaria de Motserrat Doucet ya que la información en redes es muy escasa y fragmentaria. Según parece ha publicado sus últimos libros en el Perú:Conciertos desde Aranjuez (2014),El Oscuro(2017), yQue no a la noche (2020). Os dejo el poema que da título a este último y aquí os podéis descargar todo el poemario.
QUE NO A LA NOCHE, AMOR
Ahora irás corriendo, mi amor, ay, gemelo del viento y aire solo, y buscando la noche de la que huyes siempre porque no pudo hacerse mar.
Ha de gozar la vida bajo tu peso Ahora más liviano, —casi espuma del tiempo—. Tu vida hilada hebra a hebra por la alada paciencia del destino. Tú, ya casi luna, tocado, tan desnudo, por tu estrella.
En tanto ya la noche se ha expandido en tu sombra, y se vacía en lentas letanías de aguas y caricias reflejadas.
Corre, corre, amor, no te detengas, antes darás la vuelta a todo el tiempo tuyo. ¡Que no a la noche, amor, que no a la noche!
Montserrat Doucet. Que no a la noche (2020)
La generosidad de la poeta ofreciendo su obra merece que además de en digital la tengamos en papel. Si alguien tiene más información actual de la poeta, os pido que me la paséis en comentarios.
Este poema dedicado a la Barcelona preolímpica y preturística de los de los sesentas a los ochentas tiene muchos guiños, unos más fáciles y otros más difíciles de reconocer. Tienen ventaja quienes vivieron en esta ciudad y en esa época, por si acaso os perdéis os los desvelo al final. Por si os apetece más escuchar, en este vídeo recito el poema.
Foto: Xavier Mirerachs
HUBO UNA VEZ UNA CIUDAD CANALLA
Hubo una
vez una ciudad canalla
que mojaba
la pluma en el alcohol
para
escribir directamente en vena:
"como todos los jóvenes yo vine
a llevarme la vida por delante";
una ciudad
en la que el bardo
rechazaba
el papel e improvisaba:
"versos de amor nunca serán literatura
si no me dejas escribir sobre tu piel";
una ciudad
en la que ella,
adivinad
su nombre, unos años atrás:
"abriéndose su blusa — Neno, no digas nada—
le ofreció los durísimos botones de sus pechos".
Hubo una vez
una ciudad canalla
en que un
tono del azul era más que un color
era un
templo pagano celestial
donde un
gato argentino
maullaba
en clave de rumba catalana
y un
cantautor galáctico
consiguió
hacer salir el sol a medianoche.
Hubo una
vez una ciudad canalla
donde la
sexta flota, en vez de hacer la guerra,
hizo el
amor en territorio chino;
izas,
rabizas y colipoterras
en traje
de faena les tiraban los tejos
mientras
agujereaban mármoles a golpes de tacón.
Hubo una
vez una ciudad canalla,
mucho
antes del turismo y de los juegos,
donde la
izquierda se divinizó
bebiéndose
las noches en la “boite”
de rojos
terciopelos, de copas infinitas,
de
taburetes que aún dominan escenarios;
una ciudad
que hacía equilibrios sobre sus propias luces,
mientras
un pijoaparte montaba un viejo Cadillac.
Hubo una
vez una ciudad canalla
con
cabaret travesti como playa de río,
con Piaf y
la Carme recordando a su hombre,
con los
niños terribles, con molinos sin viento,
con local
de voyeurs en tacita de plata,
con el
baile del tigre entre chulos y arrugas,
con el
arco kiosco en que el anís ardía,
con
aquella bodega donde el arte era eterno
y una cava
de jazz que por suerte aún resiste,
porque el
otro el frontón, que era pista de baile,
ya pasó a
mejor vida y es un sano gimnasio.
Hubo una
vez una ciudad que hoy
merece
nuevo nombre: Barcelolandia eres
pasto
turístico de masas, puro producto Disney.
Perdiste tus raíces, te has vendido hasta el alma,
y de
canalla nada, opositas a cursi.
¿Cualquier tiempo pasado fue mejor? No sé.. O es la ciudad, o es que nosotros ya no podemos aguantar el canalleo. Abierto queda el tema, se aceptan opiniones, yo acabo con canción, como empecé, y disculpad que desafine: …jóvenes…, éramos tan jóvenes…
Aquí tenéis otro poema dedicado a la Barcelolandia actual, pasto turístico que nos alimenta, pero que muchos digerimos mal. Y respecto al poema canalla, para no desafinar al final , aquí está Jóvenes cantada por Los Mustangs y unas cuantas fotos de aquellos años.
Posdata: Pasados unos días, os aclaro los guiños que no hayáis sabido desvelar. Aunque algunos habéis desvelado bastantes.
1ª Estrofa: Unos versos de No volveré a ser joven de Jaime Gil de Biedma. Un fragmento de la canción de Joan Manuel Serrat Míramé y no me toques y otros versos de Conchita era su nombre del poemario Poeta en Barcelona de José Agustín Goytisolo. Los tres fueron piezas importantes de la canallesca literaria barcelonesa de esa época.
2ª Estrofa:Zeleste era la mítica discoteca de la calle Platería, donde actuaron muchos canallas entre ellos el Gato Pérez, argentino que renovó la rumba catalana y Jaume Sisa, también conocido como Ricardo Solfa, el galáctico cantautor de Qualsevol Nit Pot Sortir El Sol.
3ª Estrofa: Los buques de la 6ª flota norteamericana fondeaban en Barcelona y los marineros se solazaban en el "barrio chino" con las profesionales del sexo. Hay un libro de la época "Izas, rabizas y colipoterras" (título sacado de un soneto de Quevedo) con fotos de Joan Colom y textos de Camilo José Cela, sobre la actividad sexual del barrio. En el restaurante Amaya de las Ramblas se conservan los umbrales de mármol del portal del edificio, que tienen unos agujeros producidos por el taconeo de las prostitutas mientras esperaban clientes en la puerta de la "Casa de Habitaciones María".
4ª Estrofa: La "Gauche divine" fue un grupo, denominado así por Joan de Segarra, de intelectuales y artistas de izquierdas, la mayoría pertenecientes a familias burguesas y un típico lugar donde se reunían era Bocaccio, la emblemática "boite" de ojos terciopelos, altas copas y característicos taburetes como el que sigue utilizando Serrat en sus conciertos. Más tarde se abrió otra disco Equilibrio, en la ladera del Tibidabo sobre las luces de la ciudad, frente a otro local emblemático, el Merbeyé donde sitúa Sabino Méndez, letrista de Loquillo su canción Cadillac solitario, cuyo protagonista podría ser otro pijoaparte venido a más en un guiño a las Últimas tardes con Teresa de Juan Marsé.
5ª Estrofa: El cabaret de travestis, extrañamente tolerado en la época, era el Copacabana.
En el bar Pastís, Carme la propietaria ponía música de Piaf mientras recordaba a su marido Quimet al que Josep Maria Espinàs (uno de los fundadores de Els Setze Jutges) le dedicó una canción. Les enfants terribles era otra típica disco junto a la calle Conde del Asalto y el también emblemático bar London.
El teatro cabaret El Molino, reinaba en el Paralelo con Johnson y Mary Mistral. El Cádiz era un local especial, bar en la planta baja, baile en el sótano y en el primer piso una cama rodeada de sillas donde se representaban espectáculos pornográficos. La Paloma en la calle del Tigre era un baile clásico con sillas alrededor de la pista y "macarras" que sacaban a bailar a profesionales ya entradas en años.
El diminuto kiosco La Cazalla en el Arco del Teatro servía y sirve copas de ese licor de anís.
La Bodega Bohemia, "donde el arte era eterno" porque quienes actuaban hacía ya mucho que habían pasado su buena época artística.
La cava de jazz Jamboree aún resiste en la plaza Real los embates de turismo que ha hecho naufragar su sala contigua flamenca Los tarantos a pasto de masas.
Cerca del final de las Ramblas el Jazz Colon (junto al frontón Colón) era él local con la mejor música disco de la época, frecuentada por "progres" de zona alta, marinos americanos y gente de toda ralea amante de la buena música para bailar.
Por último, cierro el poema con Los Mustangs y su "Jovenes", un icono de los que recuerdan esas épocas.
Bueno, creo que ya os he desvelado los guiños del poema que contando me suman 27. Había muchos más lugares y personajes "canallas" en aquella Barcelona que se me han quedado en el tintero, mejor así para que si os apetece me los recordéis. Y por aquello de que la oralidad es tan importante como la palabra escrita, aquí me tenéis recitando este poema:
Delmira Agustini (Montevideo 1886-1914) una poeta cuyos versos reflejan un profundo erotismo, lo que no era usual para una mujer y menos de su entorno social. Eso, y quizá su trágico final, ha hecho que se la considere una trasgresora de su época.
LA CITA
En tu alcoba techada de ensueños, haz derroche de flores y de luces de espíritu; mi alma calzada de silencio y vestida de calma irá a ti por la senda más negra de esta noche.
Apaga las bujías para ver cosas bellas; cierra todas las puertas para entrar la ilusión; arranca del misterio un manojo de estrellas y enflora como un vaso triunfal tu corazón.
Y esperarás sonriendo, y esperarás llorando!... Cuando llegue mi alma, tal vez reces pensando que el cielo dulcemente se derrama en tu pecho....
Para el amor divino ten un diván de calma, y con el lirio místico que es su arma, mi alma apagará una a una las rosas de tu lecho. Delmira Agustini. Otros poemas.
Este otro poema se presenta en este formato en sus obras completas, pero parecen dos versiones sobre un mismo tema.
EL SURTIDOR DE ORO
Vibre, mi musa, el surtidor de oro
la taza rosa de tu boca en besos;
de las espumas armoniosas surja
vivo, supremo, misterioso, eterno,
el amante ideal, el esculpido
en prodigios de almas y de cuerpos;
debe ser vivo a fuerza de soñado,
que sangre y alma se me va en los sueños;
ha de nacer a deslumbrar la vida,
y ha de ser un dios nuevo!
Las culebras azules de sus venas
se nutren de milagro en mi cerebro...
...
Selle, mi musa, el surtidor de oro
la taza rosa de tu boca en besos;
el amante ideal, el esculpido
en prodigios de almas y de cuerpos,
arraigando las uñas extrahumanas
en mi carne, solloza en mis ensueños:
-Yo no quiero más vida que tu vida,
son en ti los supremos elementos;
déjame bajo el cielo de tu alma,
en la cálida tierra de tu cuerpo!-
-Selle, mi musa, el surtidor de oro
la taza rosa de tu boca en besos!
Delmira Agustini. Cálices vacíos (1913) La mayor parte de sus poemas son rimados, pero en éste se rebela contra esa tiranía de la rima, probablemente en un ejercicio de estilo.
REBELIÓN La rima es el tirano empurpurado, es el estigma del esclavo, el grillo que acongoja la marcha de la Idea. ¡No aleguéis que es de oro! ¡El Pensamiento No se esclaviza a un vil cascabeleo! Ha de ser libre de escalar las cumbres entero como un dios, la crin revuelta, la frente al sol, al viento. ¿Acaso importa que adorne el ala lo que oprime el vuelo?
¡Él es por sí, por su divina esencia, música, luz, color, fuerza, belleza! ¿A qué el carmín, los perfumados pomos?... ¿Por qué ceñir sus manos enguantadas a herir teclados y brindar bombones si libres pueden cosechar estrellas, desviar montañas, empuñar los rayos? ¡Si la cruz de sus brazos redentores Abarca el mundo y acaricia el cielo! Y la Belleza sufre y se subleva... ¡Si es herir a la diosa en pleno pecho mermar el torso divinal de Apolo para ajustarlo a ínfima librea!
¡Para morir como su ley impone El mar no quiere diques, quiere playas! Así la Idea cuando surca el verso quiere al final de la ardua galería, más que una puerta de cristal o de oro, la pampa abierta que le grita “¡Libre!”
El monje Gonzalo de Berceo (Berceo, ¿1198? - San Millán, ¿1264?) es el primer poeta conocido en lengua castellana y de los más destacados del Mester de Clerecía. Copio las primeras estrofas de un largo poema suyo:
G. de Berceo. Casa de
los Chapiteles
VIDA DEL GLORIOSO CONFESOR SANCTO DOMINGO DE SILOS
En el nomne del Padre, que fizo toda cosa,
Et de don Ihesuchristo, fijo de la Gloriosa,
Et del Spiritu Sancto, que egual dellos posa,
De un confessor sancto quiero fer una prosa.
Quiero fer una prosa en roman paladino
En qual suele el pueblo fablar a su veçino,
Ca non so tan letrado por fer otro latino,
Bien valdrá,commo creo,un vaso de bon vino.
Quiero que lo sepades luego de la primera
Cuya es la ystoria, metervos en carrera:
Es de Sancto Domingo, toda bien verdadera,
El que diçen de Silos, que salva la frontera.
En el nonne de Dios, que nombramos primero,
Suyo sea el preçio, yo seré su obrero,
Galardón del laçerio yo en él lo espero,
Que por poco serviçio da galardón larguero.
Sennor Sancto Domingo, dizlo la escriptura,
Natural fue de Cannas, non de bassa natura,
Lealmente fué fecho a toda derechura,
De todo muy derecho, sin nulla depresura.
Parientes ovo buenos, del Criador amigos,
Que siguien los ensiemplos de los padres antigos.
Bien sabien escusarse de ganar enemigos:
Bien les venie en mientes de los buenos castigos.
Iuhan avie nomne, el su padre ondrado,
del linnage den Manns un omne sennalado,
Amador de derecho, de seso acabado,
Non falsarie su dicho por aver monedado.
El nombre de la madre deçir non lo sabria.
Commo non fué escripto non devinaria;
Mas vayala el nombre Dios,e Sancta Maria:
Prosigamos el curso, tengamos nuestra via.
La çepa era buena, emprendió buen
sarmiento,
Non fu´commo canna, que la torna el viento,
Ca luego assi prendió, commo de buen çimiento,
De oir vanidades non le prendie taliento.
Servie a los parientes de toda voluntat,
Mostraba contra ellos toda humildat,
Traie, maguer ninnuello, tan gran simplicidat,
Que se maravillaba toda la veçindat. (.../...)
Gonzalo de Berceo
Si queréis proseguir, aquí tenéis las 777 estrofas (cuadernas vías) del poema completo que glosa la vida de Santo Domingo de Silos en medievales estrofas de verso alejandrinos, también conocidas como "tetrásforos monorrimos". Salvando las distancias y los tiempos, yo escribí un poema en cuadernas vías, El catador de amores, acerca de un tema mucho más jocoso y en homenaje a otro gran poeta medieval, El arcipreste de Hita. Volviendo a Gonzalo de Berceo, en la Biblioteca Cervantes Virtual hay amplia información sobre su el autor, su obra y ensayos sobre la misma. Además, podéis acceder a los textos de sus poemas. También hay completa información en la biblioteca Gonzalo de Berceo
En los últimos meses
he publicado en mi página de sátiras políticas tres poemas sobre nuestras últimas elecciones.
Dos en diciembre sobre cómo votar y cómo pactar, y otro en marzo, harto de que los
partidos no supiesen ponerse de acuerdo. Ahora, agotado el plazo legal, se vuelven a convocar elecciones cuyos resultados parece que serán bastante similares.
Ante el año perdido y los gastos extras que pagaremos los contribuyentes, creo que toca ser más rigurosos, y obligar a los partidos a que actúen de forma más eficiente. Si esto fuese una empresa privada, esos directivos se quedarían sin bono o estarían ya de patitas en la calle. Pues eso, reducción de sueldos, renovación de dirigentes y exigencia de excelencia en la gestión.
ANTE NUEVAS
ELECCIONES
No nos habéis hecho caso,
ha sonado la campana,
la negociación fue vana
y el resultado, fracaso.
Nos indignáis, el retraso
demuestra vuestra impotencia,
vuestra torcida conciencia,
el menosprecio a los otros,
—los que os votamos, nosotros,—
y acaba con mi paciencia.
Dicen que otras elecciones
van a costar al Estado,
—pagando el electorado—
ciento cincuenta millones.
Y digo yo: ¡Qué cojones!,
que lo paguen los culpables,
los tipos irresponsables
que, tras los meses perdidos,
piden votos repetidos
con sus sonrisas afables.
El mandato estaba claro,
vuestra obligación pactar
para poder gobernar
en vez de salirnos caro.
Mi propuesta, lo declaro,
es que os reduzcan la paga
ante una actitud tan vaga,
por no decir delincuente,
y me apoya mucha gente,
pues pongo
el dedo en la llaga.
Continúo: El Senado
lo vamos a suprimir,
y el Congreso a reducir
y con horario ampliado.
Hay que ahorrar y, por sentado,
ser eficientes, que el mundo
ha cambiado en lo profundo
y los políticos siguen
sin normas que les obliguen
a no perder ni un segundo.
Ya os lo hemos advertido,
en vuestros nuevos programas,
en vez de iros por la ramas,
más nueces y menos ruido.
Quiero votar a un partido
que excluya la corrupción,
que no le importe el sillón,
y haga gestión eficaz.
¿Creéis que seré capaz, que alguno pasa el listón?
Pues ya están planteadas la quejas y la pregunta final. Tanto unas como otra esperan vuestra respuesta que, evidentemente, puede ser discordante de mi opinión. Como siempre lo que importa es intercambiar pareceres e intentar razonarlos.
Nota
explicativa para quienes no estáis al tanto de la política española: El
pasado 20 de diciembre se realizaron Elecciones Generales en España y los
partidos con mejores resultados (PP, PSOE, Podemos y Ciudadanos) han sido
incapaces de pactar entre sí para conseguir una mayoría de gobierno, ya que
creo que han primado más los intereses personales que los de sus electores.
Consecuencia: se ha disuelto el Parlamento y el Senado la pasada semana y se
convocan nuevas elecciones el próximo 26 de junio.
Pablo
García Baena (Córdoba, 1923 - 2018) poeta que perteneció al grupo Cántico, con una amplia e importante obra parte la cual tenemos la suerte de poder ver y escuchar en el Archivo de Poetas de la ACEC (Asociación Colegial de Escritores de Cataluña)
SÓLO TU AMOR
Y EL AGUA...
Sólo tu amor
y el agua... Octubre junto al río
bañaba los
racimos dorados de la tarde,
y aquella
luna odiosa iba subiendo, clara,
ahuyentando
las negras violetas de la sombra.
Yo iba
perdido, náufrago por mares de deseo,
cegado por
la bruma suave de tu pelo.
De tu pelo
que ahogaba la voz en mi garganta
cuando
perdía mi boca en sus horas de niebla.
Sólo tu amor
y el agua... El río, dulcemente,
callaba sus
rumores al pasar por nosotros,
y el aire
estremecido apenas se atrevía
a mover en
la orilla las hojas de los álamos.
Sólo se oía,
dulce como el vuelo de un ángel
al rozar con
sus alas una estrella dormida,
el choque
fugitivo que quiere hacerse eterno,
de mis
labios bebiendo en los tuyos la vida.
Lo puro de
tus senos me mordía en el pecho
con la
fragancia tímida de dos lirios silvestres,
de dos
lirios mecidos por la inocente brisa
cuando el
verano extiende su ardor por las colinas.
La noche se
llenaba de olores de membrillo,
y mientras
en mis manos tu corazón dormía,
perdido,
acariciante, como un beso lejano,
el río
suspiraba...
Sólo tu amor
y el agua...
Pablo García Baena.
DÍA DE LA
IRA
Desnúdame,
no tengo ya otra cosa.
El labio
casi helado de besar tanta muerte.
Sájame la
mirada, deja el ojo sin lágrimas
como una
carne mísera, tibia para las moscas.
Sobre tu
piedra estoy, no vencido, ligado:
hiere y al
turbio caño de la sangre el impuro
animal de
vagido caliente perezca,
pues que amó
la carne y su comercio
y fue carnal
el llanto para él, como un miedo
cobarde de
pichones en las manos
y la oración
un pétalo manchado entre los dientes.
Raspa, rae
de mi lengua su nombre, si aún tienes
en el día
del rigor panales de dulzura
y opera con
tu largo bisturí de clemencia
el corazón,
la entraña que no tuvo cansancio
ni olvido en
el sopor del vino y de las noches
y que
implacablemente perseguías
por las
angostas calles de la antigua tristeza.
Rebana de
los dedos su urdimbre de caricias
y deja que
mis manos palpen ciegas y ajenas
la larga
tela fría del desengaño.
Inerme sobre
el mármol escucho el viento tuyo
de las
trompas alzadas a la luna postrera,
cuando el
ángel apaga la lucerna del tiempo
y remueve
las vendas,
el sombrío
aposento de las urnas,
el agujero
oscuro, el cenotafio...
Porque
desnudo estoy ante ti y te temo.
Pablo García
Baena. Óleo (1958) Y aquí tenéis este poema recitado por el autor
Acaba de fallecer José Costero (Barcelona, 1935-2021), poeta, novelista, ensayista y sobre todo una magnífica persona. Todos los que fuimos sus amigos le recordaremos por sus obras literarias y por sus cualidades personales; yo tuve la suerte de poder hablar telefónicamente con él hace pocos días y la conversación me sonó a despedida. Descanse en paz.
Respecto a su obra, por la temática del blog, me centro en su más de medio siglo de actividad poética desde su primera publicación, Con sed y con miedo (1968) que sostiene en una foto que os cuelgo. Desgraciadamente, no tengo ese libro, pero sí el segundo Prohibida palabra (1970) del que extraigo este poema, ese Requiem personal escrito en su juventud.
REQUIEM PERSONAL
Sin lágrimas,
sin jaculatorias,
sin homilía de ninguna clase,
voy a desmentir una quimera más.
Un poema puede ser un buen féretro,
hecho a la medida de un latido,
y cada verso un cálido sudario
para esta voz sin estirpe ni eternidad.
Hay que exhumar la palabra
que repose en la fosa común,
llevar un crespón en torno a la herida
y decir esta cotidiana letanía.
Sin horario fijo para un dolor,
me diagnostico una incurable esperanza.
José Costero. Prohibida la palabra (1970)
Y ahora vamos a su último libro de poemas, Ambiguo Arlequín, del que me ha costado escoger, ya que copiaría muchos. Extraigo uno que toma el título de una cita de José Emilio Pacheco, poeta mejicano fallecido en el 2014.
YA SOMOS TODO AQUELLO
Ya somos todo aquello
contra lo que luchamos a los veinte años.
José Emilio Pacheco
Qué hacer cuando cada palabra o cada silencio es otra nueva impostura. Cómo roer ese hueso duro que es tu propio presente. Ningún manual de instrucciones te servirá de ayuda. Ni siquiera consultando tu horóscopo más favorable o buscando la obscena complicidad del olvido. Uno tras otro tendrás que asumir el cotidiano descalabro, mientras te afeitas ante el espejo, sagaz delator de tu indolencia, en el frugal desayuno de cada día, en el café con los amigos, leyendo a Camus o a Vallejo, embriagado por una melodía de Cole Porter o por un frívolo bolero, cruzando travesías sentimentales con semáforos siempre en rojo, en tu condición de ciudadano del asfalto, bajo la intemperie del invierno de tu memoria, sordo a las beatas admoniciones, republicano sin república, cofrade de la camada de perdedores, metamorfosis de jacobino irredento a sutil fariseo. Como tantos otros. Reconócelo. Amargo y falaz consuelo es. José Costero. Ambiguo Arlequín (2014)
Como os he indicado escogería muchos poemas de este libro. Podéis probar en el enlace de su editor Parnass por si aún está disponible.
No hay, que yo sepa, antologías disponibles de sus poemas en la red. Pero comparto con vosotros un regalo que he recibido: cuatro poemas de Costero en la magnífica voz de Jesús Gutiérrez: A mi generación, Para Anna, cuando me vaya, De un viejo retrato y Obituario (que cierra Ambiguo Arlequín).
Os he dicho al inicio que José Costero dominaba otros géneros literarios, además de la poesía, a mí me han gustado mucho sus ensayos, esos apuntes literarios de los que tanto he aprendido, y disfruto leyendo las andanzas del jubilado policía Ruano, protagonista de su serie de novela negra. Pero para saber más de su bibliografía en los distintos géneros, lo mejor es que os lleve a su entrada en Escritores recónditos, blog que ya os recomendé hace tiempo.
Os dejo unas espinelas que le dediqué, en nombre de la tertulia literaria del Laberinto de Ariadna de la que fue fundador, cuando le hicimos un homenaje en 2013 y nos dijo que quería jubilarse de sus actividades literarias.
A PEPE COSTERO (Poeta, escritor y magnífica persona)
Espinelas a un amigo
que se quiere jubilar.
Pues sabéis lo que os digo:
no lo vamos a dejar.
Querido amigo Costero
no acepto una despedida
ni que digas que cumplida
está tu obra, tu sendero.
Tu verso vuela ligero,
le queda mucho camino
para llegar al destino
enseñando a los demás
cómo se lleva el compás,
cómo se es un torbellino.
Por eso, en el Laberinto
no te vamos a dejar,
nos tienes que acompañar
versando en este recinto.
No digo más, que sucinto
es mejor que sea el mensaje,
quede claro el vasallaje
y la amistad más sentida.
Por tus obras y tu vida
mereces este homenaje.
Ricardo Fernández. Barcelona, doce de Julio de 2013
Descanse en paz.
Adenda de mayo 2022: El 27 de mayo presentamos el libro póstumo de relatos de José Costero "Mémora de voces". En este enlace a la entrada que acabo de publicar tenéis uno de los relatos.