viernes, 24 de abril de 2015

Antonio Martínez Sarrión

Antonio Martínez Sarríón (Albacete, 1939 - Madrid, 2021) fue un poeta de largo recorrido, ya incluido en la mítica antología de Castellet Nueve novísimos poetas españoles de 1970 dentro del grupo de los seniors. Comencemos con un poema de su penúltimo libro Poeta en diwan, publicado en el 2004 donde nos habla del transcurso del tiempo en su poética.



CONFIDENCIA

Soy consciente del tono cuaresmal
de estos versos: ya no hay lujo,
ni vuelo de metáforas, ni riesgo.
Es muy amortiguada poesía de vejez:
lo más seguro
es que valgan bien poco.

A ellos me entrego con aplicación
de artesano maníaco,
al amparo del porche,
en un pueblo pongamos que con mar.
Acaso de maestro guitarrero,
probando sus maderas y barnices,
afinando las cuerdas,
dándole brillo al traste.

También yo me daría por pagado
si el compás se conserva (y la cadencia)
y una mano amigable,
al final, y con todo, me los toma.

Antonio Martínez Sarrión. Poeta en diwan (2004)


Y ahora saltemos hacia atrás hasta su poemario El centro inaccesible

ARRIBADA

¿Quién habla de una fácil travesía?
Las noches se poblaban de sirenas,
de cuartos donde ardía la revuelta,
de exilios que a tu cuerpo devastaron.
Mi amor fuerte, mi amor loco y profético
con vestidos que el puro azar cosía
y que eran desflecados por la bruma
entre las carcajadas repulsivas
de una Europa siniestra y satisfecha.
Son muchos los agravios, risueña. Pero algo
desatado y veloz, a mí te trajo a flote,
indemne, victoriosa, con el floral tesoro
de tu ternura oceánica, de tus ojos de miel.
Y en la tranquila tarde de este día de mayo
cruzas serenamente por tu sueño y yo velo,
mientras pasan los lentos veleros de la música,
tu tos de fumadora y tu jersey grandón.

Antonio Martínez Sarrión. El centro inaccesible (1981)



Además, en el Archivo de poetas de la ACEC podéis ver al poeta recitando en 2006 11 poemas de su plaquette "Maneras de oriente" y, como muestra, os dejo uno: "Dinamitera"



En Cervantes virtual podéis consultar su bio y blibliografía y una buena antología de sus poemas; y haciendo arqueología de textos, la revista Poesía en el campus le dedicó un monográfico en el curso 1993-94. Esta es la ficha de su último poemario El farol de saturno del 2011 que os recomiendo, ya que a los poetas es conveniente leerlos completos y no sólo en antologías.




Adenda de septiembre 2021: Martínez Sarrión acaba de morir en Madrid. Aquí os dejo su obituario en El Mundo


sábado, 11 de abril de 2015

Cuentas de Cuentos. ¿Cómo ha de ser un buen minirrelato?

(Actualizado en julio de 2022) Hace ya 7 años que publiqué  Cuentas de cuentos, un libro de minirrelatos para adultos, que luego he editado en digital y como audiolibro. Aquí os explico cómo lo podéis conseguir, leer dos relatos y más información. Buscando unir poesía y minirrelato os dejo un soneto sobre cómo creo que debería ser un minirrelato: conciso, que nos haga cómplices y que suela sorprender en su desenlace.


¿CÓMO HA DE SER UN BUEN MINIRRELATO?

Como un endeca, un buen minirrelato
ha de ser fibra q
ue mantenga el tono.
Ni permitas jamás el abandono
en palabras superfluas al relato,

ni debes reiterar explicaciones.
Igual que cambio rimas con cuarteto
por darle variedad a este soneto,
deberás ir al grano en tus renglones.

Sorpréndeme al llegar al desenlace.
“Clic” le llaman los técnicos; "alarde"
prefiero decir yo, si el texto arde
al leerlo, porque si no lo hace

es otro vulgar cuento: Una falacia
que no nos deja rastro, falta gracia.

Ricardo Fernández Esteban ©


Este es un booktrailer del libro, y luego os cuento algo más de su contenido.





Cuentas de Cuentos, fue publicado en papel por ÒNIX Editor y lo he autopublicado en digital y como audiolibro. El libro es una colección de minirrelatos que buscan captar al lector y sorprenderle. Un leve sedal argumental enlaza la primera con las últimas cuentas, y el resto completa un collar de pequeñas historias unidas por la vida de los personajes, sus amores, desamores, ilusiones, frustraciones, utopías e ironías.

Ningún relato supera las dos páginas, porque los quiero ágiles, con músculo y sin grasa innecesaria que distraiga la atención del lector. Todo menos la indiferencia es su lema, que espero se cumpla y esas comprimidas vivencias os atrapen y os dejen el buen sabor de boca de querer saber más de las mismas. Las cuentas están acompañadas por unas sencillas ilustraciones de Mª José Portolés, inspiradas en de alguna parte del cuento, que ayudan a su engarce y lectura.

En esta página de mi blog, podéis leer dos de las cuentas, ver dónde adquirirlo en papel, digital o como audiolibro, obtener más información y ver fotos de la fiesta donde presentamos el libro. 

viernes, 3 de abril de 2015

Teresa de Cepeda y Ahumada (Santa Teresa de Jesús)

En 2015 se conmemoraron los cinco siglos del nacimiento de Teresa de Cepeda y Ahumada (Ávila, 1515 - Alba de Tormes 1582) más conocida como Santa Teresa de Jesús, y este blog quiere recordarla como poeta. Copio su célebre glosa al poema popular Vivo sin vivir en mí, tema que también trató su compañero de fatigas San Juan de la Cruz













VIVO SIN VIVIR EN MÍ

Vivo sin vivir en mí,
y tan alta vida espero,
que muero porque no muero.

Vivo ya fuera de mí,
después que muero de amor;
porque vivo en el Señor,
que me quiso para sí:
cuando el corazón le di
puso en él este letrero,
que muero porque no muero.

Esta divina prisión,
del amor en que yo vivo,
ha hecho a Dios mi cautivo,
y libre mi corazón;
y causa en mí tal pasión
ver a Dios mi prisionero,
que muero porque no muero.

¡Ay, qué larga es esta vida!
¡Qué duros estos destierros,
esta cárcel, estos hierros
en que el alma está metida!
Sólo esperar la salida
me causa dolor tan fiero,
que muero porque no muero.

¡Ay, qué vida tan amarga
do no se goza el Señor!
Porque si es dulce el amor,
no lo es la esperanza larga:
quíteme Dios esta carga,
más pesada que el acero,
que muero porque no muero.

Sólo con la confianza
vivo de que he de morir,
porque muriendo el vivir
me asegura mi esperanza;
muerte do el vivir se alcanza,
no te tardes, que te espero,
que muero porque no muero.

Mira que el amor es fuerte;
vida, no me seas molesta,
mira que sólo me resta,
para ganarte perderte.
Venga ya la dulce muerte,
el morir venga ligero
que muero porque no muero.

Aquella vida de arriba,
que es la vida verdadera,
hasta que esta vida muera,
no se goza estando viva:
muerte, no me seas esquiva;
viva muriendo primero,
que muero porque no muero.

Vida, ¿qué puedo yo darle
a mi Dios que vive en mí,
si no es el perderte a ti,
para merecer ganarle?
Quiero muriendo alcanzarle,
pues tanto a mi Amado quiero,
que muero porque no muero.

Teresa de Cepeda y Ahumada (sobre 1571-73)


Parece que el poema del mismo título de San Juan de la Cruz se escribió entre 1572-78, pero los expertos no se han puesto de acuerdo sobre las influencias o contaminaciones entre los dos.


En la Biblioteca virtual Miguel de Cervantes encontraréis completa información sobre su vida y obra y aquí un facsímil de Poemas de Santa Teresa publicado en 1861. En este otro enlace a la web Los poetas hay una antología de su obra poética

viernes, 27 de marzo de 2015

Ramón de Campoamor

Ramón de Campoamor (Navia, 1817 - Madrid 1901) fue un poeta con textos realistas, pero con un cierto deje irónico, muy famoso en su tiempo y rara avis en la poética de la época. Se le ha acusado de prosaísta porque no practicó los excesos románticos ni la lírica desbordada muy común en la época. Sus textos suelen ser amenos, narrativos y utilizaba un lenguaje común. No obstante, comienzo con un soneto de reminiscencias barrocas.

Campoamor por Joaquín Espalter

















LA VIDA HUMANA

Velas de amor en golfos de ternura
vuela mi pobre corazón al viento
y encuentra, en lo que alcanza, su tormento,
y espera, en lo que no halla, su ventura,

viviendo en esta humana sepultura
engañar el pesar es mi contento,
y este cilicio atroz del pensamiento
no halla un linde entre el genio y la locura.

¡Ay!, en la vida ruin que al loco embarga,
y que al cuerdo infeliz de horror consterna,
dulce en el nombre, en realidad amarga,

sólo el dolor con el dolor alterna,
y si al contarla a días es muy larga,
midiéndola por horas es eterna.


Ramón de Campoamor



Unos octosílabos que destilan esa fina ironía ya comentada

LA OPINIÓN

¡Pobre Carolina mía,
nunca la podré olvidar!
Ved lo que el mundo decía
viendo el féretro pasar:
Un clérigo: ¡Empiece el canto!
El doctor: ¡Cesó el sufrir!
El padre: ¡Me ahoga el llanto!
La madre: ¡Quiero morir!
Un muchacho: ¡Qué adornada!
Un joven: ¡Era muy bella!
Una moza: ¡Desgraciada!
Una vieja: ¡Feliz ella!
¡Duerme en paz! -dicen los buenos-.
Un filósofo: ¡Uno menos!
Un poeta: ¡Un ángel más!

Ramón de Campoamor


En la Biblioteca Cervantes virtual, podréis tener amplia información sobre su vida, su obra y ensayos sobre la misma. Y en A media voz una antología de sus poemas, os recomiendo el célebre "El tren expreso" ...al arrancar el tren subió a mi coche, / seguida de una anciana, / una joven hermosa, / alta, rubia, delgada y muy graciosa, / digna de ser morena y sevillana... y el poema dialogado  "Quién pudiera escribir"  -Escribidme una carta, señor cura. / -Ya sé para quien es. / -¿Sabéis quién es, porque una noche oscura / nos visteis juntos?   -Pues...   


miércoles, 25 de marzo de 2015

A Rogelio Oficialdegui, in memoriam

Ayer cayó un avión en el que viajaba un buen amigo. Estos pobres versos se enriquecen al recordarlo. A uno le gustaría poder hacer mucho más que escribir un soneto en recuerdo de quien siempre le pareció una persona ética y excelente, de quien aprendió mucho y de quien siempre quiso aprender más. A uno le gustaría ponerle alas de pájaro a ese avión. Estés donde estés, descansa en paz Rogelio.


A ROGELIO OFICIALDEGUI, IN MEMORIAM

Siempre llega la muerte tras la vida,
pero a veces nos roba de repente
sin dejarnos siquiera despedida,
desvelando lo duro del presente.

Rogelio, buen amigo, quién pudiera
ponerle alas de pájaro a ese avión,
no dejar que cruzases la frontera,
volver a oír tu voz y tu razón. 

Nos queda tu nobleza, tu bondad,
esa fina ironía, esa prestancia;
buscando mitigar la soledad,
queriendo hacer cercana la distancia.

Lo que nos queda es mucho, compañero,
el recuerdo de todo un caballero.

Ricardo Fernández Esteban


Rogelio Oficialdegui viajaba en el vuelo de Germanwigs de Barcelona a Düsseldorf el 24 de marzo de 2015. El copiloto del avión se encerró en la cabina y lo estrello deliberadamente contra las montañas de los Alpes muriendo las 150 personas que viajaban a bordo. Todos los accidentes y las muertes que conllevan son terribles, pero éste además da mucho que pensar sobre la razón y la sinrazón humana. 


Aquí (a partir de 1':38'' de este vídeo) me tenéis recitando este poema con unas palabras que nunca hubiera querido pronunciar.




viernes, 20 de marzo de 2015

XII Encuentro de Poetas en Red en Barcelona

El sábado 25 de Abril se celebrarán en Barcelona el recital y los otros actos principales del XII Encuentro de Poetas en Red, ocasión inmejorable para hacer real lo que comenzó por virtual. Éste es un poema en el que os animo a participar y luego os cuento más del acto.


ENCUENTRO DE POETAS, YA SIN RED.

Hacer real el mundo de las redes,
sentir en propia piel aquel abrazo
tantas veces escrito a pie de página.
Ponerle vida al rostro de una foto,
a la imagen de un vídeo de YouTube,
o al negro sobre blanco de un escrito
cuando los versos broten de los labios
y no de las pantallas electrónicas.

Nunca rechazo las tecnologías,
pero han de ser un puente más que un fin.
El poema nació del mundo oral
y en él encuentra su mejor albergue,
en la corta distancia que propicia
compartir sentimientos cara a cara.

Pronto fusionaremos ambos mundos.
A través de la red nos conocimos
y cerramos un círculo virtuoso,
que sigue abierto en espiral de enganche.
¡Ven con nosotros, únete al Encuentro!,
que luego será fácil proseguir
esa amistad real por red etérea.

Ricardo Fernández Esteban ©


En éste blog y en la página de Facebook del Encuentro podréis encontrar información de los actos y cómo inscribirse o asistir a los mismos. Si podéis, animaros a participar, lo virtual ha facilitado que contactásemos y compartiésemos, pero lo real consolida. Además, recordad que como digo en el poema: la poesía nació oral y en esa proximidad encuentra su mejor albergue

Os esperamos.

viernes, 13 de marzo de 2015

Gavrí Akhenazi

Gavrí Akhenazi escritor israelita nacido en Argentina (Córdoba, 1956) es una persona polifacética: Profesor de Historia, Licenciado en Ciencias de la Educación y Militar, ha participado como voluntario en numerosas misiones humanitarias sobre todo en el África subsahariana. Él, literariamente hablando, se considera prosista, pero es un buen poeta como veréis por sus textos. Además, es uno de los impulsores del portal poético Ultraversal, que ya os he comentado en otras ocasiones.


CUNEIFORME

Yo puedo estar callado entre tus ojos.
Puedo estar tan callado que no notes
mi mirada en tus manos ni mi nariz ansiosa
del oscuro cimbreo de tu pelo.

Yo puedo estar callado
inaparente como una cosa más entre tus mundos
de pan y de papel,
de olivas y salitres
que espuman los contornos de la vida.

Yo puedo arder de ojos para adentro
todos los gritos y todos los deseos,
las cosas que pospongo bajo la luna llena
como viejas monedas carcelarias
y no hablarte del hambre en la que habito.

Yo puedo posponer mi desventura
de a pie por tu camino pedregoso
y hacer del aire un canto y un pájaro y un sobre
que no contenga cartas sin suspiros.

Yo puedo no ser malo y no ser recio
y no ser sólido y ser más cristalino
mientras cierro la boca de mis fosos
para formar lagunas con tus labios.

Yo te quiero callado y desde lejos
como hijo del rumor de tierra árida.

Yo te quiero callado
y como sé
o te quiero callado como puedo
desde la libertad del viejo idioma
que se hizo con silencios sin palabras.

Un idioma de gestos cotidianos.

Gavrí Akhenazi (publicado en Ultraversal)


Para saber más de él, qué mejor que hable el autor de sí mismo en un texto suyo Contrarreflejo:

Alguna vez fui un ruiseñor de plástico o un caballo de arena. Las ruinas de un templo sin dioses ni devotos que el desierto enterró por inservible y una gota de agua que se seca encima de una piedra calcinada. Se evapora y ya está.

Así mi infancia.

Una anécdota quieta en la contratapa que alguien le arrancó al libro de la vida. Una pavesa que no tuvo pabilo. Un rato de pasión entre dos sombras que jamás se vieron en la oscuridad.

Así mi infancia.

Una dulce migración de historias no protagonizadas y un canto a la deriva dentro de un caracol roto y desde el que se escapa el sonido del mar.
Igual soy mis ganas de vivir, aferrado a mí mismo como este huérfano que soy. No me dejo morir por mi conmigo ni que me mate a plazos para ayudar a que me tengan pena. No ando de suicida suicidándome sin suicidarme nunca por si acaso no vea el resultado que mis notas póstumas causan sobre la mesa de los otros.

Me gusta lo rotundo, lo que existe, lo que mantiene siempre el mismo status de cosa que sostiene. He visto tanta muerte que me aferro desesperadamente a honrar la vida.

Así mi madurez.

Un pensador de piedra que guarda en sí el corazón de sus caballos antes de que se disgregue la voz del ruiseñor clavado en la espina del silencio.

Gavrí Akhenazi


Y, por último, este otro poema dedicado a su hija Ionit: 

La tuya, Ionit, es una belleza agazapada.
Hay algo de gamo en tu belleza y algo que tiene que ver con los rinocerontes.

Tu belleza es invulnerable en su totalidad
y pertenece a las cosas nimias
como una flor tranquila al borde de un camino que no lleva al agua.

Para mis ojos que se han puesto miopes a fuerza de torpeza
tu belleza es una ecuación que resucita el sentido de la gravedad
es una manzana mordida por la boca de un patriota hambriento
y es un relato
un relato para dormir después de oír un relato en el que el mundo
se vuelve un hecho realizable

Tu belleza no está adscripta a la comunidad de todas las bellezas.
Es absoluta y fantasmal como la noche en que se pierde el rumbo
y zumban los oídos con las voces antiguas del desierto.

Tu belleza tiene la incipiente languidez del camello
y la resistencia de las grandes historias.
Es tuya, solamente, como los grandes ritos se destinan
a la sacerdotisa predilecta.

Un demonio con el vientre roto te observa embelesado
como si recién hubiera descubierto el mundo.

Pájaros de Ionit. Gavrí Akhenazi


Éste es su blog La maldad aparente y en Amazon y Lulu podréis encontrar sus libros y poemarios. Os dejo con su precioso vídeo poético Cruz y grama



viernes, 6 de marzo de 2015

Fray Josepho

Fray Josepho es el pseudónimo de un poeta que practica magníficamente el verso satírico-político y a el que suelo recoger en el apartado de mi blog dedicado a este tipo de poemasHoy lo traigo al muro del blog con un magnífico soneto que juega con las asonancias, dedicado al crítico y catedrático Ricardo Senabre desaparecido recientemente, en el que sabe demostrarnos que quien es un buen poeta satírico también lo es elegíaco y que el buen poeta no se encasilla en ningún género.


A DON RICARDO SENABRE, IN MEMORIAM

Hay críticos de ganga y de pesebre,
de chúpate la breva y trinca el sobre,
que en esta edad del cobro (o la del cobre)
no duermen más que el sueño de la liebre.

Hay críticos de tisis y de fiebre,
de solapada pesquis y alma pobre,
que intentan que en sus fárragos zozobre
lo que el lector sagaz quizá celebre.

Hay críticos que maman de la ubre,
con el afán mezquino e insalubre
de que cualquier rival se descalabre.

Y hay críticos, también, de otro calibre.
Hoy quiero levantar mi cubalibre
por el mejor de todos: por Senabre

Fray Josepho.


Aquí están los poemas que Fray Josepho va publicando en Libertad Digital y ésta es la entrada que dedicó al maestro Senabre cuando publicó el soneto:

      Pido perdón a los lectores por no ocupar mi espacio satírico de hoy con unos versillos jocosos sobre la actualidad o las majaderías del político de turno, pero es que me he enterado, con casi un mes de retraso, de que se ha muerto Ricardo Senabre.
    Ricardo Senabre fue catedrático de Teoría de la Literarura en la universidad de Salamanca, además de crítico literario. Para mí, el mejor crítico. Sus reseñas, primero en ABC y luego en El Cultural, no tenían desperdicio. Si un libro lo recomendaba Senabre, podía uno gastarse la pasta con la tranquilidad de que no le iba a defraudar. 
      No tuve la fortuna de ser su alumno, pero amigos míos que sí lo fueron me hablaban maravillas de él. Lo pude comprobar un día que asistí a una ponencia suya en un simposio de literatura. Dio una clase tan brillante sobre Juan Ramón Jiménez, que hizo desaparecer la injusta tirria que le tenía yo hasta entonces al poeta de Moguer. Sobre la tarima, o en el estrado, era un portento. Y sus libros no desmerecían un ápice ese magisterio. Ha sido, en fin, uno de los grandes, heredero de esa magnífica tradición filológica española del siglo XX, que arranca en Menéndez Pidal y pasa por Rafael Lapesa, Dámaso Alonso, Emilio Alarcos o Lázaro Carreter, entre otros. 
      Quiero transmitir a su familia mi pesar por su muerte, y dejar aquí un soneto que le escribí hace unos años. Un soneto con aliteraciones en las rimas, como a él le gustaban. 
       Descanse en paz, maestro.

Podemos estar o no de acuerdo con el contenido ideológico de los poemas satíticos de Fray Josepho, pero hay de reconocer su maestría versificadora y su fina ironía.


Adenda de septiembre de 2021

En este enlace de Wikipedia desvelaban su identidad como la de José Aguilar Jurado
filólogo, medievalista, poeta satírico, humorista, periodista y educador español, pero ahora veo que han eliminado esa entrada, será que quiere preservar su intimidad. 

Una noticia de última hora es que parece que ha sido despedido de "Libertad digital". Habra que ver qué ha pasado y dónde lo podemos seguir leyendo.




viernes, 27 de febrero de 2015

¿Dónde habita la buena poesía?

¡Vaya pregunta que me hago! El tema trata de la cantidad de escritos que proliferan por las redes sociales disfrazados de poemas sin contenido ni continente. Pero empiezo cuestionándome si en algo tan personal como es la poesía hay baremos para calificar algo de bueno.


¿Dónde habita la buena poesía? 

Es probable que sea pretencioso
querer calificar con lo de “bueno”
algo tan personal como un poema.
Mejor, orientaré mi ansiada búsqueda
hacia aquellas "palabras en que vibro”

Entro en materia y busco por las  redes.
Pesco mucha morralla y lo peor
no son los pescaditos de bajura,
que no engañan a nadie y saben bien
con ese alegre soniquete popular.
Peores son aquellos que se venden
con “salvaje” de epíteto, como excelsas lubinas,
y ni siquiera son de "piscifacto", son de plástico
cubierto de cursilería o falsa críptica.

¿Está entonces desierto el mar poético?
Por suerte no, pero tendrás que trabajártelo.
Deja la red y pesca con la caña
cerca del arrecife donde habitan los riesgos
y los poemas crecen sin plancton de “bonito”
ni “me gustas” tatuados en las branquias.
Ponles de cebo un verso que evite el oropel
y acudirán a ti para hacerte vibrar.
Luego, déjalos libres en sus rocas,
creciendo entre mareas y galernas,
pues no nacieron para ser domesticados.

No menciones a nadie el caladero,
salvo que sea de toda confianza,
muchos irían a pescar con dinamita
o con pienso de halago complaciente.
Los poemas se han de cobrar a pulso,
para que descubramos su esplendor
donde habita la buena poesía.

Ricardo Fernández Esteban ©


A pesar de la perorata no pretendo dar doctrina, sino sólo expresar una opinión particular. ¿Quiénes somos nosotros para dar doctrina poética? Todo lo más podemos enseñar a etiquetar el alimento poético, comentar por qué algo suena musical o no, e indicar si se respetan las normas gramaticales.

Los gustos son algo personal que no tiene por qué coincidir con la normativa. Ahora bien, para saltarse la normativa es conveniente conocerla para que sea una acción consciente y, por mucho que uno se la salte, siempre suele quedar un sustrato. Se dice que: La cultura es el poso que queda cuando se olvida lo que se ha aprendido. 

Bueno pues hablando de poesía, creo que el gusto se mejora con la lectura de buenos poetas, cuyas palabras nos hagan vibrar, y siendo receptivos a los comentarios que vayan más allá del halago fácil que a nada conduce. 

Me despido con un enlace a un soneto de vena satírica sobre este tema de la crítica: La crítica es necesaria para la mejora poética.

Y ya que he hablado de normativa, de "La métrica poética", he publicado un tratado sobre el tema, "La métrica poética del idioma español", revisado y ampliado en diciembre de 2023. Como os he dicho, opino que siempre es bueno conocer los porqués del ritmo poético, porque "hasta para saltarse las normas hay que conocerlas previamente, si no queremos que el salto sea al vacío..."