jueves, 2 de abril de 2020

Esteban Torre y sus sonetos

Esteban Torre Serrano (Sevilla, 1934) es poeta, doctor en Filosofía y Letras y en Medicina, catedrático emérito de Filología en Sevilla, director de la revista Rhythmica, y ha publicado numerosos libros y artículos sobre esa olvidada disciplina que es la "Métrica poética". Lo traigo al blog en su doble condición de práctico y teórico, poeta y tratadista de métrica, porque sigo pensando que sin experiencia poco se puede explicar de los ritmos y metros poéticos. Me detengo en sus sonetos, en los que especialista. 



ABRIL

El aire, claro. El cielo, azul y frío.
Más blancas que el jazmín y que la nieve,
se deshilan las nubes. No se atreve
ya la rosa a cubrirse de rocío.

El almendro, el laurel, el griterío
de las aves. El sauce no se mueve.
La gaviota, con su vuelo breve,
traza un arco de sueño sobre el río.

Silba el mirlo y arrulla la paloma.
Y, entre las ramas del naranjo, asoma
su dulce despertar la primavera.

Luego la lluvia, el sol, la nube, el viento,
las sombras y la luz. Por un momento,
late una paz profunda y verdadera.

Esteban Torre.


Y después de este soneto, en el que juega muy bien con algunos encabalgamientos que dan alas a los versos, otro ecfrático, o sea que se inspira y recrea una obra de arte, en este caso el cuadro de Velázquez "Inocencio X".

La poesía ecfrática siempre me ha interesado, por la antigua relación entre pintura (poesía muda) y poesía (pintura que habla) ya citada por el lírico griego Simónides de Ceos (siglo V a.C) y tengo un libro, "De museos por Madrid", que pronto reeditaré en digital y permite ver las imágenes de los cuadros que lo inspiraron.



INOCENCIO X

Pinceladas de púrpura y armiño
matizan la acritud de su semblante.
Sobre un rojizo cutis, desaliño
de la barba. Mirada penetrante.

Nariz aguda, cejas arqueadas,
prominente mentón. Rojo bonete,
sillón rojo, cortinas coloradas,
roquete blanco, rojo mantelete.

Ceño fruncido y expresión alerta
de quien vigila sin cesar la puerta
que le separa allí del mundo entero.

Velázquez nos legó con su pintura
la más exacta y lúcida figura
del espejo del alma. Troppo vero!

Esteban Torre

Aquí tenéis una reseña de este libro publicada en Nueva Revista. No he encontrado antologías de sus poemas en la red, pero en este enlace a la Casa del Libro (que funciona con entrega a domicilio a pesar del confinamiento) podéis encontrar sus "LXII Sonetos" que ha publicado recientemente.




1 comentario:

J.R.Infante dijo...

Gracias, Ricardo, por tu aportación. un abrazo