domingo, 27 de diciembre de 2020

Jesús Aguado

Jesús Aguado (Madrid, 1961), poeta, traductor, periodista y crítico literario. Comenzó a publicar en los 80's y ganó el premio Hiperión de 1990 con Los amores imposibles. Vivió en la India y ha publicado unos diarios y antologías sobre la poesía de ese país.


ALGO DICE DE MÍ...

Algo dice de mí
la labor del orfebre,
el arcoiris doble, los anzuelos,
las diecisiete formas que tiene el esquimal de nombrar
                 a la nieve y el tibetano a la conciencia,
los pechos comparados con cúpulas o cántaros,
la barra de los bares, las películas,
los cables de la luz parcelando el paisaje,
las etimologías inventadas,
la tala de las selvas, las bombas nucleares,
la estupidez, el odio, la mentira,
el mal gusto, el dolor, las equivocaciones,
las hambrunas, las guerras,
el asombro, el camino, la retama,
la piedad, la emoción, la fiebre de un bebé,
el aguardiente, el sol, la desmemoria,
los delfines, el saxo.

(Algo dice de mí cada ser, cada cosa
que ocurre, todo dice
un aspecto de mí
                                   y lo señala,
y quiere despertarlo y que yo aprenda
a llegar hasta el nido donde incuba sus ojos,
y me invita a probarme
                                                        esos ojos,
a mirar de otro modo lo que soy.)

Algo dice de mí
el ruido, el brutal ruido
que hace casi imposible escuchar lo que dicen
de mí las cataratas o el silencio.

Jesús Aguado. "Lo que dices de mí" (2002)


NO LAMENTO TU AUSENCIA...

No lamento tu ausencia‚ no me alegro tampoco:
esta paz de tenerte como siempre en las manos
es parte de mi amor‚
de este nuevo sentido que has puesto en mis sentidos‚

y no es que estés muy lejos‚
es que madura lento lo que más nos importa
y el tiempo y el espacio son frutas delicadas·

Jesús Aguado. "Semillas para un cuerpo" (1988)


Esta es una antología de sus poemas publicada en A media voz. Además, tenemos la suerte de complementar los textos del poeta con su voz en el archivo de poetas de la ACEC. Aquí tenéis sus opiniones sobre la poesía y su poética y aquí los once poemas que recita. Como muestra el primero de ellos "El viaje7".


Como siempre, mi recomendación es ir a las fuentes, a los libros del poeta. Aquí los tenéis en todos tus libros y os dejo unas muestras de carátulas.



domingo, 20 de diciembre de 2020

Jesús Royo. Sonetos de Navidad

(entrada actualizada en diciembre de 2023) Jesús Royo Arpón (Barcelona, 1949), además de muchas cosas más, es un buen y satírico sonetista, pero que sabe ponerse serio cuando quiere, como en estos sonetos de Navidad que suele enviarnos. Aquí tenéis cinco, comenzando con el de este año. 



Por el mismo cielo que surcaron los ángeles de la Buena Nueva
hoy circula la impunidad de los misiles

“Gloria a Dios”, dijo el Ángel, “en el cielo,
y paz entre las gentes de la tierra”.
Hoy, ¿qué vemos en ese cielo? Guerra,
misiles, drones de certero vuelo.

Gaza es la patria del horror y el duelo,
es el miedo sin fin (que al miedo aterra),
es la maldad (que todo el mal encierra),
donde el llanto es la ley, y el desconsuelo.

Gaza, Jerusalén, Jenín, Belén,
por vosotras van estas Navidades
de champán triste y tristes villancicos.

Brindaremos por no sabemos quién,
que vuelva la alegría a las ciudades
y el mundo no se vaya a hacer añicos.

Jesús Royo Arpón (2023)


NAVIDAD DE PANDEMIA (2020)

Los abrazos que NO nos hemos dado, 
las canciones que nadie nos ha oído, 
los besos que se nos llevó el olvido 
y las citas que habríamos tramado, 

los retozos soñados sobre el prado, 
lo que, juntos, habríamos reído, 
los sofocos que hubiéramos sentido 
y los bailes que hubiéramos bailado, 

todo eso, acuérdate, nos lo debemos. 
No sé yo si lo recuperaremos, 
o se lo irá a tragar el sumidero. 
Nuestras carnes reclaman ya venganza: 
montaremos saraos de risa y danza 
sin fin, cuando salgamos del "aujero". 

Jesús Royo Arpón


NAVIDAD 2018

El caótico azar nos trajo aquí
y al final el misterio nos espera.
Todo rueda, en estúpida carrera
y se entrecruza en loco frenesí.

Nos preguntamos ¿qué será de mí,
qué razón hubo de que yo existiera?
Si todo es al final nada y quimera,
¿por qué me late el corazón así?

Dicen que han visto, no sé qué pastores,
ángeles, cantos, luces de colores
-alguna cosa, creo, se metieron-
y que un bebé al nacer les sonreía,
y que la noche más que el sol lucía,
y que, muy dentro, algún calor sintieron...

Jesús Royo Arpón


NAVIDAD 2016

En esta cueva oscura que es el mundo,
un punto entre infinitas soledades,
un instante en el cúmulo de edades,
sumidos en lo inmenso y lo profundo,

de pronto, este planeta vagabundo
se detiene y enciende las ciudades.
Nos decimos “Felices Navidades”
y nuestro abrazo es cálido y rotundo.

Un niño nace en medio del escombro.
La Galaxia lo observa con asombro
llorar, reír, mover ojos y manos.

Todo se mueve a base de sonrisas:
cerrad los ojos, suspended las prisas
y celebrad el ser seres humanos.

Jesús Royo Arpón


MEDITACIÓN DE UN PASTORCILLO ANTE EL PESEBRE, CON EL CALVARIO AL FONDO (2013)

Nada hay más débil que un recién nacido.
Nada hay más ruin que un hombre ejecutado.
Uno no es nada, el otro es demasiado.
Aquel entra en el mundo, este ha salido.

Ambos comparten lágrima y gemido,
pues duele por igual cambiar de estado,
el todo-por-hacer y el consumado,
el nada-aún y el todo-ya vivido.

Queremos que Dios sea omnipotente,
eterno, infinito y providente,
y resulta que llora y tiene frío.

Y es que Dios, por lo visto, es poca cosa,
pues nace pobre, en una noche hermosa,
y muere en un crepúsculo vacío.

Jesús Royo Arpón


Como os he dicho en general la obra poética de Jesús Royo es satírica, pero es difícil encontrarla. Que yo sepa, ni la ha publicado en ningún libro ni mantiene un blog, y sólo circula por algunos caminos restringidos de la red en la que van apareciendo sus sonetos satíricos. Aquí tenéis como muestra algunos sonetos de Jesús Royo de 2014 junto con la noticia que los inspiró.

Yo he ido publicando algunos en la página de este blog dedicada a los poemas de tema humorístico y satírico, donde los podréis encontrar junto a los de otros maestros del género.

lunes, 14 de diciembre de 2020

Poema de Navidad, 2020

Llegan los tiempos navideños y con ellos el poema que dedico cada año a mis amigos y conocidos. No intenta ser un poema al uso y este año está mediatizado por esta pandemia que nos ha hecho replantearnos muchas cosas. Como siempre, puede pecar de utópico, pero estoy seguro de que si hay pecados, la utopía no estará en el catálogo.


POEMA DE NAVIDAD, 2020

En esta cura de humildad de descubrir
que la fragilidad del hombre es mucha,
quien se creyó que dominaba al mundo
ha sido golpeado por algo microscópico,
que se duda posea vida propia,
pero es capaz de eliminar la ajena.
En este año atípico y difícil,
las navidades lo van a ser también.

En mis poemas, hablando de estas fiestas,
he criticado mucho
al consumismo y otros “ismos”,
y a las falsas y buenas intenciones
que se quedan en poco,
en fuegos de artificio que se queman sin lumbre,
sin hogar que reúna toda la raza humana,
sin conseguir pasar de palabras a hechos.

Pero este año difícil, reconozco
que añoraré las fiestas familiares,
y el brindar con amigos cuando se acabe el año.
En este año difícil, cuando no estemos juntos,
ni compartamos uvas, ni cava, ni turrones,
y los besos y abrazos no puedan ser reales,
este año las promesas serán mucho más firmes.

Cuando le has visto al virus las múltiples orejas,
piensas en lo que importa, y en que la vida es breve
y no vale la pena quemarla en tonterías.
La lucha será dura y también será larga,
pero se hace camino soñando en el destino;
si no alcanzas la meta no debes preocuparte,
esto es una carrera de relevos,
busca otro corredor y cédele el testigo.

¡Felices navidades, aunque sean virtuales!

Ricardo Fernández Esteban ©


Aunque este años muchos brindis y abrazos deban ser virtuales, repito este con vosotros y ojalá que el próximo año nos sea mejor que éste.

Brindemos por nosotros, por la gente querida,
por familia y amigos, por los que ya no están, 
por los desconocidos, por los que no vendrán 
y porque la utopía haga mejor la vida. 



Un fuerte abrazo virtual que añora la normalidad. 

domingo, 22 de noviembre de 2020

Rafael Montesinos

Rafael Montesinos (Sevilla, 1920 - Madrid, 2005) puede definirse como un poeta sevillano y bequeriano. Tiene una amplia obra desde Balada del amor primero (1944) a La vanidad de la ceniza (2005), esta última publicada poco antes de su muerte. Dejemos hablar a los versos del poeta.


MADRIGAL DE INVIERNO

Ciudad clara, serena,
¿por qué, dime, me estás mirando ahora
con tu rostro más triste?
Si tan felices juntos fuimos siempre,
¿por qué me dejas aterido, a oscuras
el luminoso pasear de entonces?

Déjame que te limpie
esas lágrimas tuyas, esa lluvia,
ciudad mía, amor mío tan lejano.
Una caricia tuya bastaría
para salvarme, el roce de un recuerdo,
los jardines aquellos, las palmeras
meciéndose en la brisa,
a la orilla del río traicionado.
Un silencio de luz me bastaría;
aunque invernal y triste, sigues siendo
la más bella de todas.

Muéreme tú, pues yo no sé vivirme
lejos de ti,
y aunque sea entre lágrimas
—borrosa de jardines y palmeras—,
ya que llueves así, mírame al menos.

De la niebla y sus nombres (1985). Rafael Montesinos.

YO ESTOY SOLO EN LA TARDE

Yo estoy solo en la tarde. Miro lejos,
desesperadamente lejos. Quedan
por el aire las últimas palabras
de los enamorados que se alejan.
Las nubes saben dónde van, mi sombra
nunca sabrá dónde el amor la lleva.
¿Oyes pasar las nubes, dime, oyes
resbalar por el césped mi tristeza?

Nadie sabe que amo. Nadie sabe
que si llegó el amor trajo su pena.
Yo estoy sólo en la tarde y miro lejos.
No sé de dónde vienes a mis venas.

Te me vas de las manos, no del alma.
Nos separan montañas, vientos, fechas.
El amor, cuando menos lo pensamos,
se nos viste de ausencia.

Estoy en soledad. Miro a lo lejos
oscurecer la tarde y mi tristeza.
Estoy pensando en ti y estoy pensando
que acaso en soledad también me piensas.

Rafael Montesinos.


Montesinos fue un gran sonetista, aquí tenemos una muestra:

QUIÉN

¿Quién me dio este país y este momento
transitorio de un siglo a la deriva?
¿Quién me puso en la frente pensativa
esta alegría y este sufrimiento?

¿Quién dejó entre mis labios este acento
de dolor? ¿Quién me tiene en alma viva?
¿Quién decretó a la dicha fugitiva?
¿Quién al dolor -¿por qué?- lo hizo tan lento?

El alma hacia los cielos se dirige,
velocísimamente enamorada,
descarnada del cuerpo que la rige.

Pero el amor, de pronto, da la vuelta,
y el alma da en el pecho alicortada.
yo no sé quién me tiene y quién me suelta.

País de la esperanza (1955). Rafael Montesinos.


Os recomiendo este artículo de José Ángel Cilleruelo sobre La poesía de Rafael Montesinos y en A media voz podéis encontrar una antología de sus poemas. Siempre insisto en la importancia de la trasmisión oral de la palabra poética y en el Archivo Audiovisual de la ACEC encontramos una entrevista y al poeta recitando 19 de sus poemas, aquí tenéis como muestra el anterior soneto Quién. Estos vídeos se grabaron en 2002 y la voz del poeta estaba un poco deteriorada, pero siempre es bueno escuchar la obra de labios del autor.


Por suerte, tenemos los poemas de Montesinos recitados por dos magníficos rapsodas Enrique Gracia Trinidad y Andrea Navas, y al ver el vídeo descubro que recitan dos de los poemas anteriores Quién y Yo estoy solo en la tarde entre 3'30" y 5'50". En un auténtico lujo escuchar los poemas en sus voces, además Enrique es un gran poeta al que le dediqué una entrada en este blog



Me despido con una de las magníficas Soleás de Montesinos:

Lo de Dios ni Dios lo entiende,
que al par que nos da la vida
le pone fecha a la muerte.

Y solo me queda recordaros que a un autor se le lee mejor en sus libros que en algunos poemas sueltos.



sábado, 7 de noviembre de 2020

¡Habemus President!

Los poemas críticos de temática política siempre son complicados, porque los seguidores del criticado se lo toman a mal. Pero este no querría ser un poema de contenido político sino ético, se puede ser conservador, liberal o socialista, pero creo que en política por encima de todo se debería ser ético, y hasta estético por aquello de las formas. Y en este aspecto si que deberíamos estar de acuerdo que Trump no ha sido ni lo uno ni lo otro. 


HABEMUS PRESIDENT

“Habemus President”, “Fumata blanca” 
en esa extraña América que Europa
no acaba de entender, se nos atranca
la forma de pensar con que esa tropa

ha estado a punto de elegir a un tipo
arrogante, que miente cual bellaco,
que se salta las normas del equipo,
que acosa a las mujeres, que es opaco

en ingresos, que burla los impuestos,
que desprecia al rival, que es prepotente…;
resumiendo, un compendio de los gestos
que nunca ha de mostrar un Presidente.

Esto da que pensar, pues las razones
no cuentan, si se enfrentan a emociones. 

Ricardo Fernández Esteban ©

Ya sabéis que creo que no hay que constreñir a los poemas al género lírico y que también pueden y deben transmitir contenidos éticos, políticos, humorísticos o de muchos temas más. A mí particularmente me gustan los de contenido ético político serios como estos o más satíricos como estos otros.

domingo, 25 de octubre de 2020

José María Micó

José María Micó (Barcelona, 1961) es poeta, filólogo, traductor, catedrático de literatura y músico. Su obra es poliédrica y amplia, su última aportación poética a sido la traducción de "La Comedia" de Dante en magníficos versos endecasílabos blancos, sin duda la mejor traducción de esta obra junto con la que efectuó hace 40 años Ángel Crespo en tercetos rimados. Pero vamos a centrarnos en la poesía original de José Mª Micó:


MUCHACHA VIEJA

Muchacha, ven aquí. Voy a decirte
lo que nunca te han dicho, voy a hacerte
lo que jamás te han hecho, lo que nadie
sino yo puede hacerte,
porque yo estuve el dieciséis de enero
abrazado a otros ojos
y eran los tuyos los que merecía.
Los ojos que tenías
cuando solo eras tú,
larva a la espera de animosas alas,
ansiosa por cambiar los libros de aritmética
por la ciencia aplicada de la vida.
Fíjate,
es hoy el primer día,
parece que habrá tiempo para todo
y tus padres te ponen
alambres en la boca
y un profesor de inglés para el futuro.

Y yo me aproveché de tu inocencia.
Mejor que tú sabía
lo que inventan las piernas
cuando las bocas queman
y mueren de deseo como peces sin aire,
como aquel pez sin sombra que en los sueños
brilla como una llama,
arde como en los sueños arde el agua.
Mejor que tú sabía
las posibilidades de una alcoba,
las consecuencias de una noche en vela,
la maldición de una promesa en falso...

Y estoy mirando ahora
tu cabeza perfecta.
Al tocarla percibo
que el pez de la ilusión sigue brillando
y de puro brillar ya se consume,
dejando en la penumbra
los desperfectos de mi anatomía.
Tú también has crecido,
muchacha vieja,
y hoy te he citado para confesarte
que me vales así,
deteriorada y todo,
porque así te tomé, porque sabía
que tu esplendor de las primeras noches
iba cargado con tu podredumbre.

Y he de volver al baile
una noche más negra,
cogerte una vez más por la cintura,
ecuador de otro mundo,
mundo creado y brote de otro mundo,
descerrajado vientre del que salen
otros viejos más viejos que nosotros
y acuden a la luz como polillas.
A la luz engañosa que nos pide:
salid a respirar,
venid y respirad con otros seres,
que es vida lo que veis.

Vieja muchacha, ven, no tengo nada
que tú no tengas, salvo el modo extraño
con el que digo y hago este poema.

José Mª Micó (de La sangre de los fósiles. 2005)


Como suelo repetir, indagando en la obra de un buen poeta siempre aparece algún buen soneto. Este está dedicado a Joaquín Sabina por su libro de sonetos "Ciento volando"

PÁJARO EN MANO

Tras el naufragio de mis soledades,
cuando el tiempo nos da los malos días
y se acaba el alcohol en las ciudades,
lleno el vaso de roncas melodías

y escucho sin parar a aquel andoba
que algunas veces vive y otras veces
nos invita a deshoras a su alcoba
y apura el corazón hasta las heces;

que antes de hacerse al mar quema las naves,
que huele las espinas de las rosas
y se ilusiona con las ilusiones;

porque quiero una copia de esas llaves
que encierran las mentiras más hermosas
en la pura verdad de sus canciones.

José Mª Micó (de Verdades y milongas. 2002)


Micó tiene una web bien ordenada donde nos muestra su obra poética , así como sus traducciones y ensayos, pero quiero detenerme un momento en su música donde podemos descubrirlo como compositor e intérprete de tangos junto con su mujer Marta. He tenido la suerte de verlos actuar en directo y os lo recomiendo.

En poesía siempre es importante la realización oral del poema, su recitado. En este enlace podéis acceder al archivo audiovisual de poetas de la Asociación Colegial de Escritores de Cataluña (ACEC). Este es el apartado dedicado a José Mª Micó y podéis encontrar una entrevista y al autor recitando quince de sus poemas. Como muestra aquí tenéis uno de ellos, Muchacha vieja, cuyo texto os he copiado al inicio:



Pero además tenemos la suerte de que José Mª Micó haya musicado este poema y lo cante su mujer Marta Boldú mientras él la acompaña a la guitarra. Una vez más, poesía y canción caminan juntas. 


Pero a los poetas hay que leerlos en su contexto. Aquí tenéis sus libros a un golpe de clic. ¡Qué los disfrutéis!







Y recordad que en este enlace de ayuda para navegantes están los distintos apartados del blog con una pequeña explicación

lunes, 12 de octubre de 2020

Miguel Sánchez Robles

Miguel Sánchez Robles (Caravaca de la Cruz, Murcia, 1957) es catedrático de historia, escritor y poeta. Lo he conocido en la entrega de los premios de poesía de la "Fundación Jesús Serra" en los que ha sido ganador con el poema que os copio. Uno de los objetivos de este blog es difundir a los buenos poetas actuales, como sucede especialmente en este caso. Aprovecho para agradecer a la Fundación Jesús Serra el gran trabajo que está haciendo para difundir la poesía especialmente entre los jóvenes con recitales en los colegios, y categoría infantil y juvenil en sus premios.



A VECES VEO BRILLAR LOS OJOS DE MI MADRE

I

Mamá, un instante en la sed fue tu existencia
y ahora huele mucho
a incendios que se comen el monte por la noche.

Me acuerdo, mamá,
del día en que viniste del mercado
con una bolsa llena de peces tranquilos.

Si estuvieras aquí, si vivieras, mamá,
me acostaría a tu lado
como se acuesta un perro para verte vivir
y me estaría así siempre:
como en los terremotos los móviles de los muertos
siguen sonando bajo las ruinas eternas.

II

Mamá, todas las cosas tristes vinieron tras tu muerte
y las locas palabras del dolor y la nada
vinieron tras tu muerte
y el sentido de mi vida suda ahora de miedo
en la oscuridad de las habitaciones vacías,
pero no siento lástima, yo ya no siento lástima
porque fui entrenado para correr hacia un cable de alta tensión,
para decirle al viento:
¡Venga, vamos a olvidar que la vida es muy triste!
¡Venga, vamos a rescatar cadáveres de pan en los aljibes!
¡Venga, vamos a imitar todos a esos jóvenes rubios
que se van a los parques por la noche
y vomitan debajo de los árboles
y le rompen el sueño a los gorriones,
a esos muchachos núbiles que están en todos partes
y no creen en la muerte, y no creen en la muerte!

III 

Mi madre me enseñó a acariciar el pelo,
saber besar el pan y a persignarme
con las manos enteras manchadas de merienda.
Te recuerdo, mamá, toser ceniza púrpura
y recuerdo también las semillas sin peso que vuelan en la luz
y cómo las mirábamos sentados en el porche
surcando por el aire de los bellos veranos de mi infancia.
Y recuerdo a una monja tejer sudarios grises
y en su rostro una leve sospecha ensimismada
de que la vida ocurre inútilmente.

IV

A veces veo brillar los ojos mi madre.
Mi madre tan enferma que se murió muy joven,
mi madre junto al mar, mi madre en los quirófanos,
tan frágil y sublime como un mirlo temblando entre la nieve,
mi madre y el perfume de los ángeles.

Así es como la vida se llena de tristeza.
Mi madre amortajada. Los ojos de mi madre.
Mi madre y esa manía que tienen las cosas de agarrar siempre polvo.
Mi madre y esa serenidad que hay en los ojos de las reses.

El dolor y el recuerdo son una misma llaga
que tiembla en mi garganta.

Si vieras, mamá, se curaría
toda esa sed de Dios que hay en las cosas.

Miguel Sánchez Robles


Aquí tenéis al autor recibiendo el premio del concurso de la Fundación Jesús Serra y recitando el anterior poema que, como os he dicho, ha sido el ganador de la edición de este año.

Esta es una bio y bibliografía del autor , en el siguiente enlace tenéis una pequeña antología de poemas suyos, este es su blog Escenas de la especie y aquí tenéis algunos de sus libros.

En este vídeo el autor y actores del grupo "Entrementes", recitan sus poemas.


Os dejo con las portadas de algunos de sus libros




 

domingo, 27 de septiembre de 2020

Julia Uceda (actualizado VII-24)

(act 21-VII-24) Julia Uceda (Sevilla, 1925 - Ferrol, 2024) acaba de fallecer a los 98 años de edad. Fue una gran poeta con más de sesenta años de fructífera trayectoria, ganadora en 2004 del Premio Nacional de Poesía y en 2019 del Premio Lorca de Poesía Ciudad de Granada. Vamos a leer varios de sus poemas y la podremos escuchar recitando algunos.


Este poema es de su primer libro publicado en 1959:

LA EXTRAÑA

Siempre fui una extraña.
A veces me creía de la mano de todos,
entre luces y sombras,
mi voz entre las voces.
Una amistad de corazón de pájaro
empapaba mis manos.
 
Y de pronto las cosas me volvieron la espalda,
dejándome en el centro de una luz
tan pálida, tan fría…
como de huesos.
Como peces recién muertos.
Temblaba allí. Miraba
el detrás de las cosas, las nucas, las espaldas,
los talones extraños,
el confuso revés de las sonrisas,
el secreto más triste y polvoriento
que nadie se confiesa. No podía
salir de aquella luz en la que nada
parecía – ni era – como antes.
¿Por qué yo?
Se me helaban
los labios de tristeza.
¡Si existiera
sin mirarme existir!
Tal vez para tan poco…
 
Cuando de nuevo la luz se hacía
y mi cuerpo giraba de la mano de todos,
entre luces y sombras,
mi voz entre las voces,
un lejano recuerdo me oprimía.
Sigo siendo una extraña.

Julia Uceda. Mariposa en ceniza (1959)

En este vídeo la autora nos recita este poema y, antes, nos cuenta como fueron su juventud y sus inicios poéticos.

El siguiente poema que he escogido no pertenece a ninguno de sus poemarios y está recogido en "El viento hacia el mar" una antología publicada en 2002 por la que recibió en Premio Nacional de Poesía 

DRIVING  

Me pregunto si alguien, alguna vez,
podrá imaginarme, como yo no puedo,
formando parte de estos bosques, en los que no pienso,
de este mar, que a veces ignoro y del que huyo, a veces
-driving and driving and driving alone-: necesito
en otra lengua porque su sonido
pone el punto de soledad, de aislamiento, mejor,
a las tres partes: mujer en un coche, bosques, mar.

Siempre creo estar en otra escena
Y encuentro mi lugar en la que ya he perdido. Y eso significa
tal vez, que nunca estoy en parte alguna.

                                                               Pero alguien,
alguna vez, supongo con excesivo optimismo
sobre el valor posible de unos cuantos poemas, tendrá curiosidad
por saber cómo fui. Y pintara un atractivo cuadro si contempla
los hermosos paisajes que me acogieron
y que tan fielmente, aunque ya perdidos,
se pueden entrever en toda mi escritura.

Puede que el conjunto resulte hermoso.
Me gustaría verlo, pero será imposible.
De todos modos, quiero hacerle un favor al curioso futuro:
nada estará completo si se olvida
-driving and driving and driving alone-
de este verso extranjero.

Julia Uceda. 
En el viento hacia el mar. (2002)

Lo escuchamos en la voz de su autora con una pequeña explicación previa.


Como suelo decir, en la obra de un gran poeta, derive por donde haya derivado su estilo, suele haber en alguna época como mínimo un buen soneto. En este caso he encontrado este:

RAÍCES

Si ya soy una vela estremecida
colmada por tu viento. Si has llegado
al último escalón. Si me has tomado
por la raíz más honda y más henchida.

Si yo soy ya tu colmo y tu medida
y estás dentro de mí, secreto, hallado.
Si ya sobre la frente me has soplado
para hacerme vivir, ciega y ardida,

antes de irte rompe mis raíces.
Quiero que las arranques, que las trices
al alba con tu mano firme y fuerte.

De no hincarse en tu tierra poderosa
no quiere mi raíz ninguna cosa
si no es andar y andar hacia la muerte.

Julia Uceda

Para ampliar la visión de la obra de Julia Uceda os dejo unos enlaces:

Un completo artículo de Daniel J. Rodríguez en Zenda: Julia Uceda: La libertad está dentro

Un recorrido por su vida y obra de Marta Reig en "Los ojos de Hipatia": La poeta y su poema: Julia Uceda.

Una entrevista de de cuando gano el Premio Lorca en 2019: "No hay que ser obediente; yo nunca lo fui".

Un artículo de Jacobo Cortines en Ínsula: La mirada interior de Julia Uceda.

Y en el portal "A media voz" podréis leer una selección de sus poemas.

Pero sigo pensando que la voz y la explicación del autor es muy importante para la recepción de su obra. En este caso, tenemos los vídeos que grabó la ACEC (Asociación Colegial de Escritores de Cataluña) en 2005, donde responde a una entrevista y recita y comenta once de sus poemas de sus distintos libros.

En el Archivo Audiovisual de la ACEC se conservan más de mil videos de más de cien poetas españoles, grabados en el último cuarto de siglo, y os recomiendo encarecidamente su visión ya que hay auténticas joyas poéticas.


lunes, 14 de septiembre de 2020

¿Qué fue lo que me atrajo de Folégandros?

Volver a Folégandros siempre es una fiesta. La pequeña isla en medio del Egeo mantiene un encanto especial, a pesar de que el turismo la cerca y la convierte en demasiado multitudinaria. Este año, a causa de la pandemia, la isla está inusualmente vacía sín las aglomeraciones de los últimos tiempos. Pero no creo que eso nos deba alegrar, porque el motivo es nefasto; hay cosas que no tienen vuelta atrás, y la prefiero más llena y sin pandemias.


¿QUÉ FUE LO QUE ME ATRAJO DE FOLÉGANDROS?

¿Qué fue lo que me atrajo de Folégandros?

¿El recorrer la Jora que no tiene peldaños,
la de las siete plazas entre viejas capillas
donde cenas y compartes las copas
con las flores y estrellas?

¿O fue el Kastro, el castillo habitado,
el de la calle-patio y estrechos pasadizos
del tiempo detenido e historias de piratas,
que tiene por muralla la roca vertical?

¿O esa bahía a la que llaman
“la estación de los barcos”,
donde conviven veleros, ferrys y bañistas
frente a la casa blanca que está rozando el agua
y la luna que crece con su estela en el mar?

¿O el blanco monasterio que preside la Jora
en la colina, junto al acantilado, 
con su largo camino de zigzags y escalones 
desde donde contemplo como se oculta el sol?

¿O el resto de la isla cuajada de bancales
en la que ves azul a babor y a estribor,
y donde todavía encuentras “kalderimia”
con burros que transportan la vida en sus alforjas?

Supongo que sumé algo de cada cosa 
en los lejanos tiempos de ser bisoño en islas,
de descubrirlo todo porque sabía muy poco.
Luego “Fole” se fue turistizando, yo repetí visitas
y comencé a sentirla de forma diferente,
aunque tengo por ella un enganche especial
que siempre la sitúa en mi póker de ases.

Este año es distinto, el miedo y la pandemia
han dejado a la isla con mucho menos público
y vuelve la visión de los tiempos pretéritos,
sin aglomeraciones ni en su calles ni playas.
Por una vez, quizá deba ser cierto
que “del mal surge el bien”, 
pero no, eso no es cierto, la prefiero normal 
y me sería muy triste dar por buena
esta imagen antigua que nos muestra Folégandros.

Ricardo Fernández Esteban ©

Las Joras (χώρες) son las pequeñas capitales de las islas, de calles y casas blancas, normalmente escalonadas (excepto la de Folégandros) y situadas sobre alguna colina para defenderlas de los antiguos piratas.
Los Kastros son los castillos o zonas amuralladas que presiden las Joras y que han sido reconvertidos en viviendas.
El puerto de Folégandros σe denomina Karavostasis (Καραβοστάσης) que en griego significa "estación de barcos".
Se denomina kalderimia (καλδερίμια) α los antiguos caminos de herradura empedrados que recorren las islas.

Este poema es mi pequeño homenaje a esta isla a la que he vuelto muchas veces desde la primera vez que la visité hace dieciséis años. En esa primera visita ya le dediqué un poema  a "Folégandros" y otro unos años más tarde "A pesar de mis quejas, no se está nada mal aquí en Folégandros" . Los años pasan y se va aumentando el inventario de islas, pero algunas dejan un poso especial en nuestros recuerdos y en los deseos de repetir. Aquí tenéis unas cuantas fotos para abrir boca


La Panagia que preside la Jora
La Panagía que preside la Jora

La calle-patio del Kastro

Karavostasis

Una de las 7 plazas de la Jora

Unas capillas en Galifos

Aghios Nikolaos

Vista general de la Jora

Estos poemas están incluídos en mi libro "Por las islas griegas" , revisado y ampliado en 2023, que recoge más de 25 años y más de 70 islas visitadas, con mis anotaciones sobre los lugares y establecimientos que prefiero. Aquí lo podéis conseguir en Amazon; si preferís las librerías físicas, hay ejemplares en Altaïr (Gran Vía 616, Barcelona).