Nos ha dejado Julián Viñuales Solé (Barcelona, 1939-2022), editor, persona amena, divertida y con un "savoir faire" ya por desgracia poco usual. En estos últimos años un grupo de amigos hemos compartido cenas semanales y nos va a ser difícil no recordar sus chistes, ni sus anécdotas vividas de esas memorias que nunca quiso publicar. Su familia tuvo el acierto de organizar un acto en el bar jardín de la librería "La Central del Raval" y allí entre recuerdos compartidos, arias y palabras de sus allegados, nos despedimos de él en ese ambiente de libros y de copas que tanto le gustaba. Poco más podemos hacer que desearle, esté donde esté, que la alegría le acompañe.
A JULIÁN VIÑUALES, IN MEMORIAM
Cuando un amigo se va, queda un espacio vacío... (Alberto Cortez)
Despedir a un amigo siempre cuesta, nunca fue un buen lugar un tanatorio, es mejor recordarlo en una fiesta que en un desconsolado velatorio.
Por eso, la otra tarde en “La Central” brindamos en tu honor. Tu trayectoria,
sea la editorial o personal, quedará para siempre en la memoria.
Pero nos has dejado y nuestras cenas ya no serán lo mismo sin tus chistes, ni tus anécdotas de vida plena. Amigo, aún sin querer, estamos tristes.
Querríamos pensar que la alegría, en donde estés, será tu compañía.
Marianella Sáenz (San José, 1968) es una poeta costarricense, que no conocía y acabo de descubrir en la fonoteca de "Poesía recitada", web que os recomiendo, donde podéis hacer estos descubrimientos en entradas de varios textos de poemas que se escuchan en la voz del autor, y en esa conjunción de texto y recitado que es donde mejor se puede apreciar un poema.
ACEPTARME POETA
Compartir este rojo renglón de mi noche
el más intenso
de este lienzo beligerante que es el alma.
Que me atrape y me marque este pincel de olvido
incapaz de sobrevivir
en la indiferente palidez de los otros.
Repartir alas de sal
posar mi corazón entre los astros
vivir la osadía irreverente del artista
que las palabras agrieten el ocre
le hagan surcos al aire
para manchar cada gota de lluvia
y caminar contigo otra vez, descalzos,
sobre el absurdo gris de esta ciudad indolente.
Para llamarme poeta
bajo la piel de estos signos
que aún se desangran vibrando
en la agridulce trampa
de cada inédita posibilidad.
Marianella Sáenz
RECONOCER
«el sufrimiento es más didáctico que la felicidad»
E. Sábato
Aceptar que estoy herida
solo un poco, y que no depende de mí más que tomar el brote incipiente que se protege cauto de la duda.
Guarecerme en la introspección, en el acto revolucionario que me permita ver la luz, cuando otra vez sea mayo y tierra y piel, despierten
sus esperanzas de agua.
Reconocerse uno más, adherido a la esperanza anónima
y dogmática de las estadísticas
Marianella Sáenz
Ha publicado tres libros de poemas: "Migración a la esperanza" (2015) Editorial Poiesis, "Perspectiva de la ausencia" (2017), Editorial del Círculo de
Poetas Costarricenses y "Transgredir(se)"(2019) Editorial Torremozas y ha participado en varias antologías y revistas poéticas.
Por último, y porque lo mejor es leer los poemas dentro de su contexto, aquí tenéis cómo adquirir su último libro "Transgredir(se)" esperando que alguno más se una pronto a su bibliografía poética.
Jesús Munárriz (San Sebastián, 1940) es poeta, dirige la prestigiosa editorial poética Hiperión, y ha sido muchas cosas más, entre ellas autor de canciones grabadas y cantadas por Aute, Rosa León, Ana Belén, Massiel, Marisol, etc. Su obra, como autor o traductor, es muy numerosa y aquí la podéis encontrar en wikipedia. Su ultimo libro es "Y tan lejos de casa" (2022) con poemas ambientados en el ámbito navarro, en el que residió en su juventud y al que sigue sentimentalmente vinculado. He escogido el poema "Con pakol" (el gorro afgano) que recoge muy bien las intolerancias religiosas, sean por la supuesta orden del dios que sea.
(Foto "geosm, jesus munárriz")
CON PAKOL
Los mocetones esos montañeses que han entrado en Kabul son la versión islámica de mis viejos paisanos, que hace ya casi un siglo salieron de sus pueblos a domeñar vecinos por Dios y por un rey de pacotilla.
Llamados a la lucha desde el púlpito, igual estos que aquellos, ahora Dios es Alá, imán el cura, la cruz la media luna, y aunque aquéllos rezaban de rodillas, éstos andan descalzos, doblan el espinazo y se dan cabezadas contra el suelo. Y eso un siglo después.
Los requetés se cubrían la chola con boinas coloradas y éstos llevan pakol, gorro pardo, vistoso y abrigado.
Los de aquel viejo reyno usaban carabinas, fusiles, mosquetones, bayonetas, sables, navajas; éstos, los afganos, ahora disparan con fusiles de asalto abandonados por los gringos y recién fabricados.
Los carlistas pensaban ir al cielo tiroteando enemigos; éstos también, pero su cielo lo imaginan otro, más animado, con huríes y dátiles. Tras perder dos o tres, aquéllos ayudaron a ganar una guerra incivil; éstos, tan inciviles cuan fanáticos, han ganado la suya. De momento, porque en aquel país las guerras nunca acaban. Dios es grande.
Jesús Munárriz. Y tan lejos de casa (2022)
Y ya que os he copiado uno de sus últimos poemas publicados, veamos otro de su primer libro.
POR ESO ESTOY EN LAS PALABRAS...
Por eso estoy en las palabras.
Porque el silencio vive si la palabra calla
y el olvido se extiende donde el amor deserta,
y de las mordeduras gozosas o crueles
sólo queda la huella que arrancan a las prensas.
Por eso estoy en las palabras.
Porque el cerezo da sus frutos sin saberlo
y sin saberlo el cáñamo presagia las banderas,
pero el hombre conoce que entre nada y la nada
sólo puede dejar unos vocablos limpios.
Unos vocablos limpios o una voz iracunda
que arranque el velo hirsuto donde se oculta el sueño,
Adenda de diciembre de 2023: Os adjunto un audio de una hora de "Fonoteca de poesía" donde podréis escuchar cómo ensambla Jesús Munárriz sus vivencias con algunos de sus poemas, momentos literarios con fragmentos de la Historia del siglo XX.
Un homenaje a un cuadro de Joan Miró, perteneciente a mi libro de poemas "De museos por Madrid",escrito en dos visitas a la colección Thyssen: Estas visitas me hicieron recordar una temporal en su Fundación en Barcelona, donde vi la génesis del cuadro a través de recortes de periódico y bocetos.
GÉNESIS Sobre ese fondo azul, la barretina recuerda los inicios del trabajo. No queda mucho más del campesino, la pipa en llamas y su corazón que abajo e invertido parece un as de picas.
Pero eres —como siempre— honesto cuando creas, tan sólo simplificas la idea original quitando lo superfluo y dejando en el cuadro lo que tú consideras importante.
HOY ME DEJO DE HISTORIAS Hoy me dejo de vanos tecnicismos, y me abandono en ese mar azul, ¡qué importa la intención o si su origen fue un collage de recortes de periódico! Hoy día ya no intento defenderte ni discutir con esos detractores que dicen: “¡eso no, eso es de niño, me va a tomar el pelo con sus manchas!” Simplemente me pierdo por tus mares de colores profundos o de islas, o en esos cielos de constelaciones, o en esa simple estrella solitaria, o en esa línea que interrumpe nada, y soy feliz mirando..., y eso es todo.
"De museos por Madrid". Ricardo Fernández Esteban
Mi libro digital "De Museos por Madrid", que he revisado y ampliado en 2023, contiene poemas inspirados por las obras de arte que he visto en museos de esa ciudad en este siglo y permite contemplar esos cuadros a través de enlaces en cada poema. Lo podéis descargar en amazon.
El 7 de octubre de 2022 El Laberinto de Ariadna y la ACEC organizaron un homenaje a Enrique Badosa, gran poeta, ensayista, periodista, editor y una magnífica persona que que falleció en mayo de 2021. Participamos un grupo de amigos y admiradores de su obra poética y literaria: Margarida Trias, José Florencio Martínez, Felipe Sérvulo, Carmen Plaza, Jorge León Gustà, Dolors Fernández, Laureano Bonet, José Corredor Matheos y Ricardo Fernández. En la web de Enrique Badosa hay mucha información sobre su obra como poeta, ensayista y traductor, y en este apartado una antología de sus poemas.
En este vídeo tenéis acceso a las distintas intervenciones y a los poemas que recitó Dolors Fernández.
Este es el último poema que publicó Enrique Badosa:
PRÓXIMO YA EL SILENCIO INEVITABLE
Próximo ya el silencio inevitable
acaricio los libros cotidianos
del deber de vivir. Dejaré abierto
tan sólo el de las páginas solemnes
con el cual otra vez vengo a pedirte
que mi última palabra seas Tú.
Enrique Badosa. Segunda Silva
En junio de 2013, ya le rendimos otro merecidísimo homenaje en la Tertulia de El Laberinto de Ariadna, por sus más de 60 años de poesía. Yo también coordiné el acto, en el que sobrevolamos sus 18 poemarios, recitando poemas Pura Salceda y Domènech Duesa. En otras entradas de este blog ya he hablado de su Obra completay de nuestra común afición por Grecia.Unos amigos le dedicamos en ese homenaje unos poemas que os trascribo:
Equipado de sueños, soñador, transido de camino,
caminante, viajero fascinado y
fascinante, de las musas amado y amador. Por la rima salvado y
salvador, navegado en el ritmo y
navegante, enfermo de belleza,
delirante, de isla en isla voraz
descubridor. Sonrisa perspicaz, porte de
rey, cálida cercanía del hermano, guardián del arte digno y de
su ley, azote del falsete y verbo
vano. Una mezcla de Fausto y
Dorian Grey, con espada de arcángel en la
mano.
Siguiendo con la obra de Enrique Badosa, en su web hay amplia información sobre su bibliografía, su vida literaria y selección de sus textos, Aquí tenéis algunos poemas de cada libro suyo. Yo he publicado en "Las nueve musas" dos artículos sobre su obra completa. En el primero trato de sus nueve primeros libros publicados entre 1956 y 1986, y en el segundo de los ocho restantes entre 1989 y 2010.
Os dejo aquí algunas fotos de ese homenaje en el Aula d'els Escriptors del Ateneu Barcelonès.
Comentando un poema con Enrique
Foto de grupo
En el Aula d'els Escriptors del Ateneu
Pura Salceda y Domènech Duesa
Adenda de Junio de 2017: El 1 de junio se le efectuó un homenaje a Enrique Badosa con motivo de sus 90 años en el Aula Capilla de la Universidad de Barcelona, organizado por Margarida Trias. Fue un acto académico que repasó durante todo el día sus múltiples facetas literarias: poeta, crítico literario, ensayista, traductor, editor, periodista, etc. y a la vez fue un acto entrañable donde sus amigos lo pudimos felicitar y compartir con él anéctotas y recuerdos, en ese maravilloso marco del patio de letras de la Universidad donde hace 7 décadas Enrique estudiaba Filosofía y Letras.
Descubrí a Carlos Clementson (Córdoba, 1944) gracias a su poemario Archipiélagos (La sinfonía helénica), premio Jose Hierro de 1995, que me prestó y recomendó el buen poeta y amigo Felipe Sérvulo. Aunque Clementson tiene una larga trayectoria poética y ha publicado bastante, no es demasiado conocido y cuesta encontrar poemas suyos en internet. Os copio varios poemas de Archipiélagos, que como indica su subtítulo esta dedicado al mundo helenico, empezando por el que abre el libro.
I
Esta luz prodigiosa y este austero silencio... Esta dura caricia del sol sobre las rocas, y la espuma inocente, y el azul, sí, tan puro como cuando las aguas no sabían aún su nombre.
A escasos pasos del mar
XVIII
Qué limpia concisión tiene aquí todo. Qué tersa claridad de primer día. La cal sobre la cal y el mar al fondo -la vida elemental, el orden simple de todo lo real como destino-. Basta la luz para absolverlo todo.
Y todo lo real se hace divino.
El azul Egeo
XXIV Claridades del Egeo
Empapado de azul está el recuerdo, de un azul sin edad, como este mar, que es igual que mi mar, y cuyas olas con remoto rumor sobre otras playas me entonaron los ritmos que aquí os cuento.
Hijo soy de esta luz y de estos cielos.
Archipiélagos (1995). Carlos Clementson.
El Egeo desde la isla de Jalki
En este enlace tenéis información sobre la biografía y bibliografía del autor , en este otro unos versos bilingües (castellano - catalán) de su poemario inédito Paraules al mirallen el que dialoga con la poesía catalana contemporánea, ya que es traductor y profesor de literatura española y catalana, y en este una reseña de su obra Las olas y los años. Aquí tenéis un artículo de 2021 sobre la obra de Clementson publicado en La voz de Córdoba Esta entrada se efectuó originalmente en 2012 y le he renovado en 2022. En este tiempo he conseguido el poemario Las olas y los años y le dediqué una nueva entrada en el blog sobre este libro. También he recogido un poema de Clementson sobre Dafne en mi entrada dedicada a la poética del mito de Apolo y Dafne
Creo que Archipélagos está descatalogado, pero hay ofertas de segunda mano en internet
Aurora Luque (Almería, 1962) es una magnífica poeta que acaba de recibir el Premio nacional de poesía de 2022, por su libro "Un número finito de veranos". Su larga trayectoria poética comenzó en 1981 y desde entonces ha publicado unos 20 titulos y traducido 10 más.
El poema que os copio a continuación, que hace referencia a Grecia, lo leí por primera vez durante un viaje por sus islas y me sentí totalmente identificado con el final. Tanto es así que esa sensación de dependencia inspiró un poema mío: Cuando se llevan tantas playas...
GEL
Preparo la toalla. Me descalzo. Esa esponja porosa y amarilla que compré en un mercado obsceno de turistas en la isla de Hydra qué dócil bajo el agua cotidiana tantos meses después, en el exilio. De pronto el gel recuerda -su claridad lechosa, su consistencia exacta- el esperma del mito, el cuerpo primitivo y trastornado de Urano, un susurro de olas mar adentro y una diosa que aparta los restos de otra espuma de sus hombros. Me punza una emoción tan anacrónica, un penoso latir, hondo y absurdo, por ese mar. Por ese sólo mar. Busco una dosis de mares sucedáneos. Cómo podría desintoxicarme. Dependo de por vida de una droga. De Grecia.
aunque pase la vida, vigilante, su factura de abismo. Conocer la región en que los laberintos se destejen, donde pueda el Deseo firmar un alto el fuego con la Muerte.
Vino la poesía de improviso. A mí, que me sentía malquerida por ella —porque yo no la quise a su capricho— me dijo: Túmbate y mira al cielo. Vuelve al ciclo del huerto, vuelve al mar mitológico. ¿No adorabas de niña las mochilas? Da la espalda al vecino vertedero de datos, ruido y prosa. Traduce —a ver si puedes— esa gracia del mundo que es aullido y sonrisa. Métete ya en un barco con proa de dragón. Fuiste vikinga, sí, aunque no lo sepas. Así que bebe océano, come islas y duerme ya en los bosques que metí entre tus sueños de once años.
Aurora Luque
Y ahora en 2022 ha publicado "Un número finito de veranos" por el que acaba de conseguir el Premio Nacional de Poesía. Aquí tenéis un artículo en El País de Javier Rodríguez Marcos, crítico y poeta. Y otro de El cultural de El Españolque incluye además varios poemas del libro.
VEREDICTO DE CASANDRA. Oráculo
Hay amores de pieles como el de la ciruela
a la ciruela, juntas en una rama
bajo el sol endulzadas mutuamente.
Amores que fermentan
como huesos de fruta escupidos al par,
peladuras de higos fundidas entre insectos
y gorriones ávidos.
Hay amor de cenizas unidas en la tierra
y nadie se da cuenta.
Hay otro amor de puras prenociones
que se rozan dichosas
y sólo el aire sabe.
Aurora Luque, Un número finito de veranos, 2021.
Considero a Aurora Luque una de los y las mejores poetas actuales. Sin embargo, tengo que hacerle una observación: en alguno de sus poemas corta (escande) los versos de forma distinta a como se recitan. Veamos un extracto de su poema "Pregunto a las Danaides" de su último libro:
(...) Os pregunto: ¿Gritaban
las aves de terror? Pregunto: ¿Enmudecieron, huecas las cigarras? ¿Escuchabas un llanto con los filos cortantes
en las jarras del agua? ¿Veías a una esclava sin boca en el espejo? ¿Hablaba un esqueleto
rechinante y gastado? Pregunto:
¿Era su tiranía un tigre torvo? ¿Era la cama un campo
de exterminio de sueños? ¿Tan feroz era el brazo
de los depredadores? ¿Tan nauseabundos eran los alacranes? ¿Tan asfixiante el peso de las dunas? (...)
Recitar muchos de esos versos con las separaciones versales que se indican en el texto es difícil y dificultaría su entendimiento. Tanto es así que la autora los recita en un vídeo de forma similar a como yo propongo:
(...) Os pregunto:
¿Gritaban las aves de terror?
Pregunto:
¿Enmudecieron, huecas las cigarras? ¿Escuchabas un llanto con los filos cortantes
en las jarras del agua?
¿Veías a una esclava sin boca en el espejo?
¿Hablaba un esqueleto rechinante y gastado?
Pregunto:
¿Era su tiranía un tigre torvo?
¿Era la cama un campo de exterminio de sueños?
¿Tan feroz era el brazo de los depredadores?
¿Tan nauseabundos eran los alacranes?
¿Tan asfixiante el peso de las dunas? (...)
No entiendo el porqué se cortan los versos de una forma artificial que no tiene nada que ver ni con la sintaxis ni con cómo se deben recitar. Esto lo único que hace es dificultar la lectura y el recitado de los poemas.
Os adjunto dos enlaces a "Cervantes virtual". En el primero tenéis una amplia selección de sus poemas, y en el segundo unos videos con una entrevista y Aurora recitando tres poemas suyos. Pero a un autor hay que leerlo en sus libros, aquí tenéis algunos de los suyos y cómo conseguirlos.
Si, a raiz de mi comentario sobre divisiones versales, estáis interesados en saber más de Métrica, o sea de los principios y porqués de esa armonía versal
que distingue al poema de la prosa, podéis consultar mi tratado "Métrica poética del idioma español"
que los explica de una forma sencilla, pero rigurosa. Aquí os dejo una sinopsis del libro.
Recordad, si sois partidarios del verso libre, que “hasta para saltarse las
normas hay que conocerlas previamente, si no queremos que el salto sea al vacío”.
Vuestras críticas positivas o negativas serán siempre bien recibidas.
Nota: Esta entrada del blog fue efectuada en marzo del 2011 y ha sido posteriormente actualizada en 2023.
Estuve en la isla griega de Kímolos unas horas en 2005 y me gustó, pero no volví por la dificultad de encontrar buenas comunicaciones en ferry. Este año, al planear un viaje en velero en junio por el oeste de las cícladas, la puse en la bitácora y tanto me gustó que he repetido una semana en septiembre.
Milos desde la taberna de Kalamitsi en Kímolos
REDESCUBRIENDO KÍMOLOS
Volver a descubrir la isla que olvidé, más de dieciséis años después del primer viaje cuando no fue un destino y no tuvo capítulo, solo fue una excursión en ferry desde Milos, unas horas de playas en que me encantó Prasa. Por la dificultad de llegar hasta Kímolos, quedó como un recuerdo que se desdibujaba.
Cuando mis singladuras del poniente cicládico la pusieron a tiro, la incluí en la bitácora. Llegamos navegando, nos bañamos en Prasa, fondeamos en Rema entre casas de barcos, subimos al Jorió, donde nunca había estado, y me gustó su Kastro -con sabor a Folégandros- , sus calles y sus bares, su música latina, y cenar en la plaza, donde vive la gente entre gritos de niños y charlas de mayores.
Por eso he repetido pocos meses después, ahora es un destino al que abro capítulo. Esta semana ha sido redescubrir a Kímolos que sigue siendo isla de los tiempos pasados con guiños del presente que fusionan muy bien, y si algo desafina, como en Prasa la música o excesivas tumbonas al estilo de Ibiza, me procuro un antídoto en playas del poniente, sombras de tamarisco con sones de cigarras; no os digo sus nombres, descubridlos vosotros.
Siempre ha sido difícil escoger entre cícladas, pero unas cuantas cartas reinan en la baraja: la escala de colores de los blancos y azules donde Kímolos tiene su lugar reservado.
Aunque en la playa de Prasa se haya instalado un beach club sigue siendo un lugar agradable, y con libros a vuestra disposición (como en otros puntos de su Jorió, su único pueblo), además hay muchas otras playas más tranquilas. La isla tiene poco turismo, salvo los diurnos que vienen a pasar unas horas desde Milos, y los no residentes parecen veraneantes o visitantes que no influyen en el entorno. Podéis comer bien en varios restaurantes y en alguna taberna junto al mar, como la de Kalamatsi. No os digo más, lo podéis descubrir si venís. Este es el resumen de la bitácora por las Cícladas (buscad el año 2022) que me hizo redescubrir Kímolos el pasado junio.
El puerto de Psati
La playa de Prasa
Metamórfosos en el Jorió
Ag Spirídon, Kambo, Jorió
Skiadi en el interior
Libros en la playa de Prasa
El fondeadero de Rema
Si estáis interesados en ese entorno griego, en mi libro "Por las islas griegas" , revisado y ampliado en 2023, describo unas 75 islas que he visitado y repetido en los últimos 25 años con anotaciones sobre los lugares que prefiero.
En 2023 he vuelto a Kímolos 2 veces (una escala de un día en un velero y 6 días en septiembre) y he escrito "Luces y sombras aquí en Kímolos" que complementa el poema anterior.